Envejecimiento saludable

Saltar la barra de navegación

Generalidades del tema

¿Qué es el envejecimiento saludable?

Envejecer es una parte natural de la vida. Cómo se sentirá a medida que envejezca depende de muchos factores, incluyendo los problemas de salud comunes en su familia y las elecciones que haga. Si cuida bien de su cuerpo y aprende maneras positivas de manejar el estrés ahora, puede desacelerar o incluso prevenir problemas que suelen venir con la vejez.

Nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para cambiar los malos hábitos y para empezar con los buenos hábitos. Sin importar cuándo empiece, un estilo de vida saludable puede marcar la diferencia en cuanto a cómo se siente y qué puede hacer.

¿Qué determina lo saludable que estará a medida que envejece?

Los cambios que atravesará a medida que envejezca dependen de una serie de factores. Uno consiste en sus antecedentes familiares (genética). Si sus familiares tienen enfermedades o problemas de salud continuos (crónicos), como presión arterial alta o diabetes, es posible que usted tenga mayores probabilidades de tener esos problemas. Pero solo porque su riesgo sea más alto no significa que definitivamente tendrá los mismos problemas. De hecho, las elecciones de estilo de vida que haga pueden ayudar a reducir sus probabilidades de llegar a tener enfermedades comunes en su familia. Y aunque tenga una enfermedad hereditaria, elegir hacer actividad física, comer alimentos saludables y aprender a manejar el estrés pueden evitar que la enfermedad destruya su capacidad para disfrutar sus años dorados.

¿Qué tipos de cambios debería esperar a medida que envejece?

Los cambios a medida que envejece suelen ser graduales. Ciertos cambios físicos son comunes. Su metabolismo (la rapidez con la que su cuerpo puede quemar calorías) se vuelve más lento con el tiempo, lo que significa que su cuerpo necesita menos energía de los alimentos que antes. Cuánto duerme y la calidad de su sueño probablemente cambien también. La mayoría de las personas empiezan a necesitar anteojos para leer alrededor de los 40 años, y muchas personas tienen pérdida de audición más adelante. A partir de los 50 años, el envejecimiento óseo aumenta. También a partir de alrededor de los 50 años es posible que note cambios en la función sexual: es normal tener una respuesta sexual más lenta.

La mayoría de los órganos vitales se vuelven gradualmente menos eficientes con la edad. Los riñones tienen menos capacidad de retener suficiente agua en el cuerpo. Y el corazón puede comenzar a mostrar señales de desgaste. Por lo tanto, a medida que envejece es importante que haga actividad física, que beba abundante agua y que elija alimentos saludables. Hacer estas cosas ayudará a su cuerpo a funcionar bien por un período más prolongado.

¿Qué debe hacer para sentirse mejor que nunca a medida que envejece?

Una de las medidas más importantes que puede tomar por la salud a cualquier edad es hacer actividad física. La actividad física mantiene el cuerpo fuerte y le ayuda con cómo se siente. Las personas que permanecen activas tienen menos probabilidades de deprimirse. La actividad física puede ser cualquier actividad, desde caminar hasta trabajar en el jardín o hacer ejercicio en el gimnasio. Lo importante es hacer actividad casi todos los días. Independientemente de su edad o afección, existe un tipo de actividad física adecuada para usted. Pregúntele siempre a su médico si es seguro que empiece un programa de actividad física.

Su salud mental y emocional también es importante. Proteja o mejore su salud emocional manteniendo el contacto con amigos, con familiares y con la comunidad. Las personas que se sienten conectadas con otras tienen más probabilidades de prosperar que aquellas que no lo hacen. Además, intente mantener el menor nivel de estrés posible. Además de hacer actividad física regular, usted puede tomar el control de cómo le afecta el estrés tomándose 20 minutos al día solo para relajarse.

Para proteger o mejorar su memoria y su agudeza mental, mantenga su cerebro activo y estimulado. Aprenda o haga algo nuevo y diferente. Por ejemplo, atienda un taller educacional o aprenda un juego de cartas nuevo. La depresión puede ser un problema grave para los adultos mayores. Si cree que podría estar deprimido, busque ayuda: los medicamentos antidepresivos y la asesoría psicológica pueden ayudar a tratar la depresión.

Otros hábitos saludables pueden ayudarle a mantenerse de la mejor manera posible:

  • Siga una dieta saludable y equilibrada. Evite los alimentos salados y las comidas que tienen mucha grasa, como las comidas fritas.
  • Recuerde que las infecciones de transmisión sexual pueden afectar a cualquier persona a cualquier edad; por lo tanto, es primordial tener relaciones sexuales más seguras.
  • Si fuma, trate de dejar de hacerlo.
  • Siempre use el cinturón de seguridad en el automóvil.
  • No abuse del alcohol ni de las drogas.

Herramientas de salud

Las Herramientas de salud le permiten tomar decisiones acertadas sobre salud o tomar medidas para mejorar su salud.

Los Puntos de decisión se centran en cualquier decisión clave sobre la asistencia médica que sea importante para distintos problemas de salud.
Las Herramientas interactivas están diseñadas para ayudarle a la gente a determinar los riesgos de salud, el peso ideal, la frecuencia cardíaca deseable y mucho más.

Envejecimiento normal

A medida que su cuerpo envejece, puede esperar cambios graduales, al ritmo de su propio cuerpo. La manera de envejecer de su cuerpo depende en parte de sus patrones familiares (genéticos) de envejecimiento. Pero sus elecciones de estilo de vida tienen un impacto más potente en lo bien que envejece su cuerpo. Afortunadamente, puede controlar sus elecciones de estilo de vida.

Es posible que algunos de los siguientes cambios se apliquen a usted. Puede ser que otros no. Un estilo de vida saludable puede desacelerar muchos de estos efectos normales del envejecimiento.

Piel. Con la edad, la piel se vuelve menos elástica, tiene más líneas y está más arrugada. El crecimiento de las uñas también se vuelve más lento. Las glándulas sebáceas gradualmente producen menos sebo, lo que hace que la piel esté más seca que antes. Puede retrasar el envejecimiento de la piel usando un humectante y protegiendo la piel del sol con protector solar y ropa de protección solar, como sombrero o gorra.

Cabello. Es normal que gradualmente el cabello del cuero cabelludo, de la zona púbica y de las axilas se torne más fino. Como la cantidad de células de pigmento del cabello disminuye, aumenta el crecimiento de canas.

Estatura. A los 80 años, es común haber perdido hasta 2 pulgadas (5 cm) de estatura. Esto suele relacionarse con los cambios normales en la postura y en la compresión de las articulaciones, de los huesos de la columna y de los discos vertebrales.

Audición. Con el tiempo, los cambios auditivos dificultan la audición de los sonidos de alta frecuencia y disminuyen la claridad de los cambios de tono y del habla. Estos cambios tienden a acelerarse después de los 55 años.

Visión. A medida que los cristalinos de los ojos se vuelven menos flexibles (presbicia), la mayoría de las personas de 40 a 49 años empiezan a tener que usar anteojos para leer. También es normal que se reduzcan la visión nocturna y la agudeza visual. Además, en los años de la vejez, el resplandor interfiere cada vez más en la visión nítida. Los cambios en la vista pueden afectar su capacidad de conducir en forma segura. Para obtener más información, vea:

Sueño. Ocurren cambios en el sueño y el ritmo circadiano a medida que envejece. Probablemente duerma menos por la noche, y quizá no duerma tan profundamente como lo hacía cuando era más joven. Y es más probable que usted se despierte durante la noche y/o se despierte más temprano en la mañana. Para obtener más información, vea el tema Cómo sobrellevar los cambios en los hábitos de sueño a medida que envejece.

Huesos. A lo largo de la adultez, los hombres y las mujeres pierden gradualmente parte del contenido mineral en sus huesos. Los huesos se vuelven menos densos y fuertes. Usted puede desacelerar la pérdida ósea natural y reducir su riesgo de osteoporosis haciendo ejercicio con soporte de peso (como caminar) en forma regular, consumiendo suficiente calcio y vitamina D y evitando elecciones en el estilo de vida que debiliten los huesos (como fumar). También es posible que su médico le recomiende un medicamento de protección ósea. Para obtener más información, vea el tema Osteoporosis.

Metabolismo y composición del cuerpo. Con el tiempo, el cuerpo generalmente necesita menos energía, y su metabolismo se vuelve más lento. Los cambios hormonales en el cuerpo que está envejeciendo provocan un cambio de más grasa corporal y menos masa muscular. La mejor estrategia para manejar estos cambios es ingerir menos calorías mientras mantiene o aumenta la actividad física. El entrenamiento de fuerza es una manera especialmente buena de aumentar o conservar la masa muscular. Cuando se reduce la masa muscular, el metabolismo se desacelera. Aumentar o conservar la masa muscular le permite mantener o aumentar el metabolismo.

Cerebro y sistema nervioso. A partir de la tercera década de vida, el peso del cerebro, el tamaño de la red nerviosa del cerebro y su flujo de sangre disminuyen. Pero el cerebro se adapta a estos cambios ya que desarrolla nuevos patrones de terminales nerviosas. Los cambios en la memoria son una parte normal del proceso de envejecimiento; es común recordar menos los sucesos recientes y demorar más en recordar nombres y detalles. Usted puede ayudar a mantener su agudeza mental. Participe en actividad social en forma regular. Rétese a sí mismo a aprender y a hacer cosas nuevas. Y manténgase activo físicamente, para aumentar el flujo sanguíneo y de oxígeno al cerebro.

Corazón y circulación de la sangre. El corazón se vuelve naturalmente menos eficiente a medida que envejece y debe trabajar un poco más que en el pasado durante la actividad. Esto hace que el músculo cardíaco se agrande un poco. Usted notará una disminución gradual de la energía o resistencia de una década a la siguiente.

Pulmones. En las personas inactivas, los pulmones se vuelven menos eficientes con el tiempo y empiezan a suministrar menos oxígeno al cuerpo. La actividad física regular desempeña un papel clave para mantener los pulmones fuertes.

Riñones. Con el avance de la edad, disminuyen el tamaño y la actividad de los riñones. No limpian los desechos ni algunos medicamentos de la sangre tan rápidamente y no ayudan al cuerpo a manejar la deshidratación tan bien como lo hacían en el pasado. Esto hace que sea cada vez más importante que usted minimice las toxinas, el alcohol y los medicamentos innecesarios que toma, y que beba abundante agua.

Incontinencia urinaria. Los cambios en el sistema urinario y la movilidad reducida relacionados con la edad y los efectos secundarios de algunos medicamentos pueden provocar incontinencia urinaria. Esto no necesariamente forma parte del envejecimiento normal; por lo tanto, hable con su médico si la incontinencia urinaria lo está afectando.

Función sexual. Los hombres y las mujeres producen menores niveles de hormonas a partir de los 50 años. Los hombres producen menos espermatozoides, y la rapidez de su respuesta sexual disminuye. Las mujeres dejan de ovular y tienen una serie de cambios menopáusicos relacionados con una menor producción de estrógeno. Para obtener más información, vea el tema Menopausia y perimenopausia.

Vitalidad física

La actividad física aumenta la vitalidad física. Años tras año, usted puede beneficiarse más de ser físicamente activo.

¿Cuáles son los beneficios de hacer actividad física?

Diariamente, hacer actividad física mejora su calidad de vida al mejorar su:

  • Nivel de energía.
  • Agudeza mental.
  • Estado de ánimo (el ejercicio aeróbico regular puede ayudar a manejar la depresión, la ansiedad y el estrés).
  • Equilibrio, fuerza y flexibilidad, que son clave para prevenir lesiones y caídas.
  • Probabilidades de luchar contra una enfermedad crónica. Por lo general, la actividad física también ayuda a manejar enfermedades crónicas con menos medicamentos.

A medida que envejece, un estilo de vida inactivo aumenta su riesgo de enfermedad crónica. Por el contrario, hacer ejercicios aeróbicos regulares es una de las mejores defensas contra enfermedades como:

Si ya tiene una enfermedad crónica, empezar a hacer actividad física podría disminuir su necesidad de tomar medicamentos para tratarla o controlarla.

No hago actividad en este momento. ¿Cómo puedo empezar?

Si ha estado inactivo durante un tiempo, no necesariamente debe aspirar a convertirse en un atleta; su primer objetivo es simplemente comenzar a moverse más cada día. Sin embargo, antes de hacerlo, tenga un buen comienzo y consulte a su médico para que le haga un examen físico completo. Entonces podrá seguir sus recomendaciones, así como también estas pautas para hacer más actividad física.

  • Agregue más movimiento a su rutina diaria. Por ejemplo, guarde el control remoto de la televisión, estacione más lejos de las entradas de los edificios o en el lado del estacionamiento que está opuesto al lugar al que se dirige, y use las escaleras en lugar de los elevadores. Dé una o dos vueltas en su casa o apartamento, luego en la calle, o alrededor de un parque cercano. Use una aplicación para teléfono móvil o un podómetro y aumente gradualmente la cantidad de pasos que da cada día.
  • Empiece con metas pequeñas a corto plazo. Es más fácil continuar haciendo algo nuevo cuando usted tiene éxito con frecuencia desde el comienzo. Por ejemplo, elabore un plan para caminar 10 minutos al día, 3 días a la semana, durante 2 semanas.
  • Júntese con un amigo. No hay mejor manera de seguir haciendo actividad física que con un amigo al que ansía ver, que también cuenta con usted (especialmente los días en los que le resultaría fácil encontrar una excusa para no hacer ejercicio).
  • Cambie la manera de pensar sobre sí mismo: empiece a pensar, a vestirse y a comer como la persona activa y vital que planea ser.
  • Haga de la actividad física un hábito con tareas fáciles como anotar las actividades físicas que haga en su calendario semanal.

Después de algunas semanas de actividad física regular, es probable que se sienta mejor que antes. Cuando esté listo para más, agregue alguna variante a su programa de actividad con nuevas maneras de aumentar la flexibilidad, con actividad aeróbica y con fuerza muscular. Los expertos recomiendan realizar cualquiera de estas actividades para estar y mantenerse saludable:nota 1

  • Actividad moderada durante al menos 2½ horas a la semana. Una forma de hacer esto es estar activo 30 minutos al día, por lo menos 5 días a la semana. La actividad moderada se refiere a actividades como caminatas rápidas, paseos rápidos en bicicleta o bailes de salón. Pero puede incluir cualquier actividad, como las diligencias diarias, que aumente su frecuencia cardíaca. Notará que su corazón bombea con más fuerza con este tipo de actividad.
  • Actividad intensa durante al menos 1¼ horas a la semana. Una forma de hacer esto es estar activo 25 minutos al día, por lo menos 3 días a la semana. La actividad intensa se refiere a actividades como trotar, montar rápido en bicicleta o practicar esquí de fondo. Usted respirará con más rapidez y su corazón latirá con mucha más fuerza con este tipo de actividad.

Está bien hacer actividad en bloques de 10 minutos o más a lo largo del día y de la semana. Puede elegir hacer uno o ambos tipos de actividad.

Si recién está empezando un programa de actividad física o si tiene 65 años o más, hable con su médico acerca de con qué frecuencia es seguro que haga actividad física.

  • La flexibilidad es cada vez más importante a medida que la rigidez causada por la edad se convierte en una parte normal de su vida diaria. Una rutina regular de estiramiento o de yoga puede mejorar enormemente la facilidad del movimiento. Para ayudar a prevenir lesiones, es importante estirarse antes y después de cualquier actividad que use sus articulaciones y músculos durante más de algunos minutos.
  • La actividad aeróbica acondiciona el corazón y los pulmones. El ejercicio aeróbico (que usa oxígeno) es cualquier actividad que haga latir el corazón más rápido que cuando está en reposo, lo que hace circular más sangre oxigenada por todo el cuerpo. Todos los tipos de actividades cotidianas pueden ser aeróbicos, desde la limpieza de la casa, trabajar en el jardín o empujar a un niño en un columpio, hasta caminar, montar en bicicleta o jugar tenis.
  • El acondicionamiento muscular incluye desarrollar músculos más fuertes y aumentar la cantidad de tiempo durante el que puede usarlos (resistencia). Levantar pesas desarrolla músculos más fuertes y fortalece los huesos. Independientemente de su edad y de si lo ha hecho antes, puede obtener un gran beneficio del entrenamiento de fuerza. A medida que envejece, el acondicionamiento muscular desempeña un papel cada vez más importante en mantenerse en un peso saludable, debido a que las células de los músculos constituyen el principal tipo de células que usan las calorías. El acondicionamiento muscular también es clave para mejorar o evitar problemas de equilibrio, caídas y, en consecuencia, fracturas óseas. Intente hacer ejercicio para fortalecer los músculos al menos dos veces a la semana.nota 1 Ejemplos incluyen entrenar con pesas o subir escaleras durante dos o más días no consecutivos. Para obtener los mejores resultados, use una resistencia (peso) que fatigue sus músculos después de hacer entre 8 y 12 repeticiones de cada ejercicio.

Ya realizo actividad física. ¿Debería hacer algo más?

Aunque esté contento con su rutina de ejercicio, es una buena idea dejarla periódicamente, pensar y cambiar sus actividades y metas. A medida que los problemas causados por la edad ingresan gradualmente en su ecuación de actividad física, tenga en cuenta los siguientes factores:

  • A partir de los 60 años, es importante que dedique la misma cantidad de tiempo a aumentar la fuerza y la flexibilidad que a la actividad aeróbica. La fuerza y la flexibilidad ayudan a su cuerpo a manejar mejor los cambios debidos a la edad, incluyendo pérdida de masa muscular y problemas con el equilibrio. Para mantener o mejorar su equilibrio y su resistencia, incluya en su rutina semanal ejercicios de estiramiento, de fortalecimiento muscular y actividades para aumentar el equilibrio, como yoga o tai chi.
  • Es normal tener que adaptar gradualmente sus expectativas de cuánto puede exigirle a su cuerpo. Si está acostumbrado a exigirse, acepte los cambios de su cuerpo e inclínese hacia la moderación.
  • La combinación de disciplinas o la incorporación de diferentes disciplinas a su calendario de actividades le ayudan a aumentar mejor su estado físico general y ayudan a prevenir las lesiones causadas por uso excesivo.
  • Reemplazar una actividad "perdida" es clave para mantenerse activo. Por ejemplo, si ya no puede correr, podría intentar caminar, montar en bicicleta o nadar.
  • Por lo general, la recuperación de las lesiones es más prolongada a medida que envejece. Si está lesionado, dele tiempo a su lesión para que sane, pero mantenga el resto del cuerpo en movimiento. Puede escoger de una lista de actividades alternativas, como natación, ejercicios en el agua, ciclismo, caminata, yoga, Pilates o remo.
  • Para prevenir lesiones, comience una nueva actividad gradualmente, evite usar excesivamente el cuerpo y haga estiramiento a menudo. Beba abundante agua antes, durante y después de la actividad. Esto es muy importante cuando hace mucho calor afuera y cuando haga ejercicio muy intenso.

Vitalidad emocional y mental

La vitalidad emocional y mental está estrechamente relacionada con la vitalidad física (de la misma manera que la mente tiene efectos potentes sobre el cuerpo, el estado físico afecta cómo se siente y piensa). El contacto social también puede marcar una gran diferencia en cómo se siente.

Reemplazar una actividad "perdida" es una clave para mantenerse activo y sentirse bien con uno mismo. Por ejemplo, si ya no puede correr, podría intentar caminar, montar en bicicleta o nadar. Y si su actividad favorita era bailar, podría intentar otra actividad que combine actividad social y física, como anotarse en una clase de ejercicio aeróbico en el agua. Reemplazar las actividades perdidas puede ayudarle a mantener una actitud positiva y una sensación de bienestar con el tiempo, aunque el envejecimiento y los cambios en su salud impliquen que no puede hacer todas las actividades que solía hacer.

Actividad física. Proteja o mejore su salud emocional y cognitiva con actividad física regular. Mientras que la actividad física produce sustancias químicas en el cuerpo que fomentan el bienestar emocional, la inactividad puede empeorar la depresión, la ansiedad y el estrés. Se han realizado investigaciones para relacionar la actividad física con el riesgo de tener enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia. Es posible que los adultos que son físicamente activos tengan menos probabilidad de tener la enfermedad de Alzheimer o demencia que los adultos que no son físicamente activos.nota 2

Actividad social. Proteja o mejore su salud emocional manteniendo el contacto con amigos, con familiares y con la comunidad en general. Independientemente de si están físicamente saludables o enfermas, las personas que se sienten conectadas con otras tienen más probabilidades de prosperar que aquellas que se aíslan socialmente. Ofrecerse como voluntario en su comunidad y compartir su sabiduría y talentos con otras personas es una manera gratificante y significativa de enriquecer su vida.

Actividad mental. Proteja o mejore su memoria y su agudeza mental:

  • Desafiando su intelecto todos los días. Lea, aprenda a tocar un nuevo instrumento musical o aprenda un idioma, resuelva crucigramas o participe en juegos de estrategia con otras personas. Al igual que un cuerpo activo, un cerebro activo continúa desarrollándose y creciendo, mientras que un cerebro inactivo pierde su poder con el tiempo.
  • Ayudando a la memoria. Anote fechas, nombres y otra información importante que olvida fácilmente. Use la rutina y la repetición. Por ejemplo, deje los objetos de uso diario, como las llaves y los anteojos, en un lugar específico. Y cuando conozca a una nueva persona, imagínesela mientras repite su nombre en voz alta a otros o a usted mismo varias veces para recordarlo. (Independientemente de su edad, tener demasiado en su mente puede prevenir que recuerde nueva información. Y a medida que envejece, es normal que demore más en recuperar información nueva de su banco de memoria).
  • Previniendo la depresión, que es una causa común pero tratable de disminución cognitiva en personas mayores. Además de hacer actividad física y tener contacto social en forma regular, evite el efecto depresivo del consumo de alcohol y de sedantes, coma comidas y refrigerios saludables e incluya actividad significativa en su vida diaria (como aprender, crear, trabajar y ofrecerse como voluntario). Si cree que tiene depresión, busque ayuda profesional. Los medicamentos antidepresivos o la asesoría psicológica o ambos son tratamientos eficaces para la depresión. Para obtener más información, vea el tema Depresión. Si descubre que una afección o una discapacidad físicas están empeorando su estado de ánimo deprimido, siga el tratamiento médico que necesita.
  • No fumando. Fumar cigarrillos podría acelerar el deterioro mental. Si fuma y quisiera dejar de hacerlo, vea el tema Cómo dejar de fumar.

Técnicas de reducción de estrés y de relajación. Demasiado estrés en la vida puede afectar su cuerpo, su mente y a las personas más cercanas a usted. Además de hacer actividad física regular, usted puede tomar el control de cómo lo afecta el estrés tomándose 20 minutos al día para relajarse.

  • La meditación concentra su atención y le ayuda a calmar tanto su mente como su cuerpo. La meditación diaria se usa para manejar una gama de afecciones físicas y emocionales, incluyendo presión arterial alta, ansiedad, depresión y dolor crónico.
  • El cuerpo responde al estrés con tensión muscular, la cual puede causar dolor o molestia. La relajación progresiva de los músculos reduce la tensión muscular y la ansiedad general, y podría ayudarle a dormir.
  • La forma en que respira afecta todo el cuerpo. Pruebe hacer . La respiración profunda y completa es una buena forma de reducir la tensión, de sentirse relajado y de reducir el estrés. Para obtener más información sobre cómo reducir el estrés, vea el tema Manejo del estrés.

Pensamiento positivo. Es posible que el pensamiento positivo le ayude a vivir una vida más larga y más feliz. Aunque tienda a ser optimista, hay ocasiones en las que se necesita un esfuerzo adicional para darle un marco positivo a su vida. Tome las siguientes medidas para aprovechar el poder del pensamiento positivo en su vida diaria:

  • Ábrase al humor, a la amistad y al amor. Esfuércese por encontrar motivos para reír y pasar tiempo con las personas de las que disfruta su compañía.
  • Tenga expectativas positivas para usted, para su salud y para la vida en general. Cuando se dé cuenta de que está diciéndose a sí mismo cosas negativas o de que está prediciendo un mal resultado, deténgase. Transforme su pensamiento en un pensamiento positivo y expréselo en voz alta o anótelo. Para obtener más información, vea Detenga los pensamientos negativos: Cómo elegir una manera más saludable de pensar.

Bienestar espiritual. Sus creencias espirituales pueden brindarle consuelo y darle fuerza para enfrentar los desafíos de la vida. Para algunas personas, la religión institucionalizada proporciona una comunidad de fe y un sistema de creencias. Pero la espiritualidad puede adoptar muchas formas. Dedicar tiempo para estar en contacto con la naturaleza, meditar u orar puede ayudarle a encontrar un sentido de significado y de propósito. Para obtener más información, vea La espiritualidad y su salud.

Vitalidad sexual

Debido a que la sexualidad tiende a ser un asunto privado, es probable que haya oído hablar menos acerca del cambio sexual que de cualquier otro tema del envejecimiento. Afortunadamente, las noticias son buenas: en la mayoría de los adultos sanos, el placer y el interés no disminuyen con la edad. La mayoría de las personas tienen actividad sexual toda su vida, con o sin pareja, y algunas sienten mayor libertad sexual a una edad avanzada. Por otro lado, algunos hombres y mujeres están contentos de ser sexualmente inactivos.

Aproximadamente a los 50 años, los hombres y las mujeres suelen empezar a notar cambios en su impulso sexual, en su respuesta sexual o en ambos. Al igual que muchos otros cambios físicos que evolucionan con el tiempo, estas no son señales de que está perdiendo su sexualidad. Por el contrario, estos cambios son simplemente un factor al que debe adaptarse y sobre el que debe hablar abiertamente con su pareja o con su médico.

Cambios sexuales normales en los hombres

A partir de los 50 años, es posible que descubra que:

  • El impulso sexual de los hombres se ve mínimamente afectado por la edad (a pesar de que los problemas de salud, determinados medicamentos o el estrés relacional pueden reducir el impulso sexual).
  • Las erecciones son menos firmes y suele llevar más tiempo alcanzarlas que cuando era más joven.
  • Es posible que pueda demorar más la eyaculación que cuando era más joven.

Cambios sexuales normales en las mujeres

Después de la menopausia, disminuyen los niveles de estrógeno y de andrógeno, lo que causa cambios físicos. Es posible que descubra que:

  • Demora más en excitarse sexualmente.
  • Siente menos interés por el sexo.
  • Tiene la piel más sensible y se le irrita fácilmente con las caricias.
  • Las relaciones sexuales son más dolorosas debido al adelgazamiento de las paredes de la vagina (el sexo regular suele ayudar a evitar que se agrave esta situación). Si no es suficiente con un lubricante a base de agua (como Astroglide), hable con su médico acerca de la crema de estrógeno vaginal, que revierte el adelgazamiento y la sensibilidad. Para obtener más información, vea los temas Menopausia y perimenopausia y Problemas sexuales en las mujeres.

Si ha notado cambios sexuales que no parecen estar relacionados con el envejecimiento normal, hable con su médico. Hay una serie de medicamentos que pueden causar problemas sexuales, así como afecciones de salud que pueden causar problemas sexuales.

Cómo adaptarse a los cambios sexuales causados por la edad

Con un poco de experimentación y paciencia, puede adaptarse a los cambios sexuales y satisfacer sus necesidades sexuales e íntimas. Si cree que su interés sexual podría verse afectado por un medicamento o por un problema de salud, colabore con su médico para corregirlo o para tratarlo. Hable con su pareja acerca de las dudas que pueda tener para poder manejarlas juntos.

Con su pareja, tómese su tiempo para crear una atmósfera relajada y entablar una estimulación erótica. Use un lubricante si la sequedad o la irritación vaginales son una barrera para disfrutar del sexo. Si bebe alcohol, recuerde que una pequeña cantidad podría relajarlo y aumentar su capacidad de respuesta, pero es probable que no sea bueno beber demasiado alcohol.

Las infecciones de transmisión sexual (STI, por sus siglas en inglés) son un riesgo, independientemente de la edad que tenga. A menos que usted y su pareja se hayan hecho pruebas o estén 100% seguros de que ambos han sido monógamos durante muchos años y no se han contagiado, asegúrese de practicar sexo más seguro para prevenir las STI. Para obtener más información, vea el tema Relaciones sexuales más seguras.

Cómo obtener la nutrición que necesita

A medida que envejece, tener una buena nutrición es cada vez más importante para envejecer bien. Llevar una dieta baja en sal, baja en grasa, con muchas frutas, verduras y fibra puede efectivamente reducir los riesgos causados por la edad de enfermedades cardíacas, diabetes, ataque cerebral, osteoporosis y otras enfermedades crónicas. Si come una gran variedad de alimentos, puede obtener con bastante facilidad lo que su cuerpo necesita, que incluye:

  • Proteínas, que son necesarias para mantener y reconstituir los músculos. Puede obtener proteínas de alta calidad bajas en grasa comiendo aves, pescado, huevos o sustitutos del huevo, soya y pequeñas cantidades de nueces, así como carne y productos lácteos bajos en grasa.
  • Carbohidratos, que son la fuente de energía preferida del cuerpo. Hay dos fuentes principales de carbohidratos dietarios: los azúcares simples, como la sacarosa (el azúcar blanca refinada que se agrega a los dulces y a los postres), la fructosa (el azúcar que contienen las frutas) y la lactosa (el azúcar de la leche); y los carbohidratos complejos, que provienen de las verduras y los granos. A diferencia de los azúcares refinados, las frutas contienen vitaminas y fibra, los productos lácteos contienen nutrientes como calcio y vitamina D, y los carbohidratos complejos contienen vitaminas, minerales y fibra. Obtenga la mayoría de las calorías de carbohidratos de las verduras, los granos y las frutas. Limitar bebidas y alimentos con azúcar agregada. Además, intente reemplazar las calorías provenientes de las grasas por carbohidratos complejos en su dieta.
  • Grasas, que también proporcionan energía. Para ayudar a mantener bajos los niveles de colesterol en la sangre, obtenga la mayoría de su consumo limitado de grasa de las grasas poliinsaturadas (como en el aceite de maíz o en el aceite de soya) y de las grasas monoinsaturadas (en el aceite de oliva, el aguacate y las nueces). Limite las grasas saturadas (carne de res, cerdo, ternera, mantequilla, manteca vegetal y queso). Puede hacerlo comiendo estos alimentos con menos frecuencia, sirviéndose porciones más pequeñas, eligiendo cortes de carne con menos grasa, y usando quesos con sabor más fuerte a fin de usar solo un poco y obtener el sabor del queso. Intente evitar las grasas trans (grasas hidrogenadas), presentes en la margarina en barra (dura) y en muchos alimentos procesados, como galletas saladas y galletas dulces. Las grasas trans ahora se incluyen en las etiquetas de información nutricional de la mayoría de los alimentos envasados.
  • Agua, para reponer el agua que se pierde durante la actividad. Asegúrese de beber abundante agua todos los días.

Al mirar su dieta diaria, recuerde que a medida que envejece:

  • Las necesidades diarias de energía de su cuerpo van disminuyendo lentamente. Así que necesita menos calorías al día que cuando era más joven. Su médico o un dietista registrado (RD, por sus siglas en inglés) pueden ayudarle a calcular su consumo calórico ideal.
  • Los cambios hormonales naturales hacen que su cuerpo tienda a almacenar más grasa corporal (especialmente alrededor de la parte media del cuerpo) y menos músculo. Llevar una dieta equilibrada saludable y limitar el consumo de grasas saturadas, al mismo tiempo que aumenta la actividad y el fortalecimiento muscular (las células musculares son los principales quemadores de calorías del cuerpo), puede ayudarle a mantenerse en un peso saludable.
  • Los huesos pierden contenido mineral con más rapidez que antes, especialmente si es una mujer posmenopáusica, debido a que tener menos estrógeno aumenta la disminución de masa ósea. Como consecuencia, necesita incluir calcio y vitamina D en su dieta, para ayudar a prevenir la osteoporosis. Puede que su médico le recomiende que tome un suplemento de calcio y de vitamina D.
  • La acumulación de placa (aterosclerosis) puede ocurrir naturalmente en el interior de las arterias que suministran sangre al corazón y al cerebro. Usted puede ayudar a desacelerar esta acumulación de placa comiendo alimentos saludables para el corazón como carnes magras, frutas, verduras y granos integrales. Una dieta saludable puede ayudar a reducir el colesterol y la presión arterial alta, y a prevenir enfermedades cardíacas y ataques cerebrales.

Ayuda para manejar un peso por debajo del valor normal o una nutrición deficiente

Las personas que tienen un peso por debajo de lo normal o que están débiles tienen pocas reservas para sobreponerse después de una enfermedad o de una lesión. En la edad avanzada, esto puede provocar una salud deficiente o una discapacidad permanentes. Si tiene problemas para aumentar de peso, es fundamental que tome medidas especiales para aumentar de peso, aumentar la energía y la resistencia. Siga las recomendaciones de su médico todos los días y:

  • Coma tres comidas más tres refrigerios y nunca omita una comida.
  • Elija alimentos más altos en calorías de cada grupo alimenticio, como leche entera en lugar de leche descremada. Pero intente mantener bajo su consumo total de grasas saturadas; el colesterol alto puede afectar a cualquier persona.
  • Coma primero los alimentos con mayor contenido calórico durante una comida.
  • Beba suplementos líquidos, como Ensure o Boost, entre las comidas.

Si tiene problemas para consumir los alimentos que necesita por problemas de transporte, financieros o de salud, pregúntele a su médico acerca de los programas de comidas locales. La mayoría de las comunidades tienen programas Meals on Wheels que pueden entregar la comida a domicilio. Y hay comidas en las iglesias y centros comunitarios que pueden satisfacer sus necesidades alimentarias y sociales.

Cómo obtener la atención médica que necesita

La prevención médica, los controles regulares y el tratamiento temprano desempeñan un papel clave en su calidad de vida a medida que envejece.

Prevención

La generación de sus abuelos tenía menos protecciones ante afecciones potencialmente mortales, pero ahora usted tiene la ventaja de las vacunaciones y las pruebas de detección regulares. Las pruebas de detección y las vacunaciones pueden ayudarle a llevar una vida más larga y de mayor calidad. Pero llega el momento cuando algunas pruebas de detección no van a ser útiles, así que hable con su médico de cuáles pruebas hacerse.

Para aprender más sobre las pruebas de detección de salud recomendadas, vea el tema Evaluación de salud: Cómo detectar temprano los problemas de salud.

Cómo manejar su atención médica

Sea un consumidor de atención médica informado. Cuando esté preocupado por una afección médica, lea todo lo que pueda sobre ella y sobre sus posibles tratamientos. Haga una lista de preguntas sin responder y hable con su médico acerca de ellas. Explore todas las opciones de tratamiento antes de decidir cómo tratar un problema. Y obtenga al menos una segunda opinión si está considerando hacerse una cirugía, tomar medicamentos con efectos secundarios peligrosos o realizarse un tratamiento experimental.

Sea el mejor defensor de su salud. Establezca como meta trabajar en colaboración con sus médicos. En general, las personas que toman decisiones de salud con sus médicos están más contentas con la atención que reciben y con los resultados que obtienen. Es importante compartir cada decisión sobre la salud. Las decisiones que tome influyen en su bienestar general, así como en la calidad y el costo de su atención médica. Cada vez que tenga una cita médica:

  • Lleve su historia clínica y de medicamentos, así como una lista de preguntas que quiera que le respondan durante su cita.
  • Asegúrese de comprender los puntos clave que su médico le explique acerca de la salud y de toda posible prueba y tratamiento.
  • Puede ir acompañado por un amigo o un familiar para que lo apoyen y le ayuden a recordar la información clave para el futuro. Esto puede ser especialmente útil cuando usted está bajo mucho estrés físico o emocional.

Para obtener más información acerca de cómo trabajar en colaboración con un médico, vea:

Organícese. Sentirse organizado y sentir que tiene control sobre su atención médica puede ser un desafío, especialmente cuando sucede algo inesperado. Su mejor estrategia para manejar su atención médica es organizarse ahora. Cree un archivo de información médica personal que incluya un registro permanente de:

  • Los nombres y números de los profesionales de la salud.
  • Medicamentos, suplementos herbarios y vitaminas. Para cada uno, incluya la dosificación, quién lo recetó y por qué, y cualquier efecto secundario que haya tenido. Use este formulario .
  • Alergias conocidas a medicamentos, alimentos o insectos (incluya el tipo de reacción alérgica).
  • La cartilla de vacunación.
  • Síntomas, afecciones de salud y tratamientos. Para cada uno, anote las fechas y cualquier detalle que podría olvidar fácilmente. Use este formulario .
  • Resultados de exámenes y pruebas.
  • Información médica de urgencia, como el uso de marcapasos o el diagnóstico de una enfermedad crónica.
  • Póliza de seguro y los recibos de pago.

Para obtener más información sobre cómo organizar su información médica, vea el tema Cómo organizar su historia clínica.

Las instrucciones médicas por anticipado, como un testamento vital y un poder notarial permanente para asuntos médicos, pueden asegurar que usted reciba la atención que desea si pierde la capacidad física o mental para tomar sus propias decisiones médicas. Un testamento vital expresa sus deseos sobre su atención médica. Un poder notarial permanente para asuntos médicos le da a una persona que usted selecciona (su representante de atención médica) la autoridad para tomar decisiones médicas en su nombre si usted no puede tomar estas decisiones por sí mismo. Además de poner sus instrucciones por anticipado por escrito, también asegúrese de comunicar sus decisiones claramente a todos los miembros de su familia que pudieran estar involucrados en su atención de salud en el futuro.

Información relacionada

Referencias

Citas bibliográficas

  1. U.S. Department of Health and Human Services (2008). 2008 Physical Activity Guidelines for Americans (ODPHP Publication No. U0036). Washington, DC: U.S. Government Printing Office. Available online: http://www.health.gov/paguidelines/guidelines/default.aspx.
  2. Wang L, et al. (2006). Performance-based physical function and future dementia in older people. Archives of Internal Medicine, 166(10): 1115–1120.

Créditos

Revisado: 6 agosto, 2023

Autor: El personal de Healthwise Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.

La Enciclopedia de salud contiene información general de salud. No todos los tratamientos o servicios descritos son beneficios cubiertos para los miembros de Kaiser Permanente ni se ofrecen como servicios de Kaiser Permanente. Para obtener una lista de beneficios cubiertos, consulte su Evidencia de cobertura o Descripción resumida del plan. Para los tratamientos recomendados, consulte con su proveedor de atención médica.