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Generalidades
La mayoría de las personas tienen problemas menores en la espalda en algún momento. Los movimientos de nuestro cuerpo por lo general no causan problemas. Pero, a veces, los síntomas pueden desarrollarse por el desgaste diario, el uso excesivo o una lesión. Los problemas y las lesiones en la espalda ocurren con mayor frecuencia durante actividades deportivas o recreativas, tareas relacionadas con el trabajo o proyectos en el hogar.
El dolor de espalda puede causar problemas en cualquier lugar, desde el cuello hasta el cóccix. La espalda incluye:
- Los huesos y las articulaciones de la columna (vértebras).
- Los discos que separan las vértebras y absorben el impacto a medida que se mueve.
- Los músculos y ligamentos que mantienen unida la columna.
Las lesiones en la espalda son la causa más común de dolor en la espalda. Las lesiones a menudo ocurren cuando usa los músculos de la espalda en actividades que no realiza con mucha frecuencia. Por ejemplo, levantar objetos pesados o trabajar en el jardín. Las lesiones menores también pueden ocurrir si tropieza, se cae una distancia corta o tuerce demasiado la columna vertebral. Una lesión grave en la espalda puede ser causada por un accidente automovilístico, una caída desde un lugar alto, un golpe directo en la espalda o la parte superior de la cabeza, una caída de alta energía sobre las nalgas o una lesión penetrante como una puñalada.
El dolor de espalda a menudo es causado por una lesión en una o más de las estructuras de la espalda. Pero puede tener otra causa. Algunas personas son más propensas a tener dolor de espalda que otras. Las cosas que aumentan su riesgo de dolor de espalda y lesiones incluyen envejecer, tener antecedentes familiares de dolor de espalda, sentarse demasiado tiempo, levantar o tirar de objetos pesados y tener una enfermedad degenerativa como osteoporosis.
Encorvarse o estar cargado de hombros por sí solo puede no causar lumbalgia. Pero cuando la espalda se tensa o se lesiona, la mala postura puede empeorar el dolor. Tener "buena postura" generalmente significa que las orejas, los hombros y las caderas están en línea recta. Si esta postura causa dolor, tal vez tenga una afección como un problema con un disco o los huesos de la espalda.
La lumbalgia puede ocurrir en niños y adolescentes. A menudo es causada por el uso excesivo o actividades repetidas como llevar una mochila. Pero los niños y adolescentes tienen menos probabilidades de ver a un médico por lumbalgia. La mayoría de los problemas de espalda ocurren en adultos de 20 a 50 años. Pero los problemas de espalda en niños menores de 20 años y adultos mayores de 50 años tienen más probabilidades de tener una causa grave.
Lesiones súbitas (agudas)
El dolor de una lesión puede ser repentino e intenso. Se pueden presentar hematomas e hinchazón poco después de la lesión. El dolor de una lesión aguda generalmente no dura más de 6 semanas. Las lesiones agudas incluyen:
- Una lesión en los ligamentos o músculos de la espalda. Ejemplos de esto son un esguince o una distensión.
- Fractura o luxación de la columna vertebral. Puede causar una lesión de la médula espinal que puede llevar a una parálisis de por vida. Es importante inmovilizar a la persona lesionada y luego moverla de la manera correcta para reducir el riesgo de parálisis de por vida.
- Un disco desgarrado o roto. Si el desgarro es muy grande, el material gelatinoso que está dentro del disco puede salirse (herniarse) y hacer presión contra un nervio.
- Una lesión que causa la compresión de los nervios en la parte baja de la espalda (síndrome de la cola de caballo).
Lesiones por uso excesivo
Es posible que no recuerde una lesión específica, especialmente si sus síntomas comenzaron lentamente o durante las actividades diarias. Estas lesiones ocurren con mayor frecuencia por un movimiento o postura incorrecta cuando levanta, se pone de pie, camina, se sienta o incluso duerme. Los síntomas pueden incluir dolor, espasmos musculares y rigidez. El dolor a menudo desaparece en 4 semanas sin ningún tratamiento.
Afecciones que pueden causar problemas en la espalda
Los problemas o el dolor de espalda pueden no estar relacionados con una lesión. Otras causas incluyen:
- Afecciones que debilitan la columna vertebral. Estas incluyen espondilitis anquilosante, osteoartritis, osteoporosis, estenosis espinal y enfermedad de Paget. Son más comunes en adultos mayores. En casos poco frecuentes, se pueden formar tumores o infecciones en o alrededor de la columna vertebral.
- Algunas afecciones médicas que pueden causar dolor que se extienda a la espalda desde otras partes del cuerpo (dolor referido). Muchos problemas de salud que pueden causar dolor de espalda no tienen nada que ver con los huesos, las articulaciones, los músculos o los ligamentos de la espalda.
- Deformidades espinales. Incluyen escoliosis, cifosis (enfermedad de Scheuermann) y espondilolistesis.
- Síndrome de dolor crónico causado por una lesión pasada o enfermedad degenerativa con el envejecimiento.
Tratamiento
La mayoría de los dolores de espalda mejorarán y desaparecerán por sí solos en 1 a 4 semanas. El tratamiento en el hogar a menudo ayudará a aliviar el dolor de espalda causado por lesiones menores. Por lo general, es una buena idea seguir haciendo sus actividades regulares mientras su espalda se está curando. Evite levantar objetos pesados y actividades que parecen empeorar sus problemas de espalda.
Otros tratamientos para un problema o una lesión de espalda pueden incluir primeros auxilios, fisioterapia, terapia de manipulación (como quiropráctica) y medicamentos. En algunos casos, se necesita cirugía. El tratamiento depende de:
- La ubicación y el tipo de lesión y su gravedad.
- Su edad, estado de salud y actividades (como el trabajo, los deportes o pasatiempos).
Herramientas de salud
Las Herramientas de salud le permiten tomar decisiones acertadas sobre salud o tomar medidas para mejorar su salud.
Revise sus síntomas
La evaluación médica de los síntomas se basa en las partes del cuerpo que usted tiene.
- Si es transgénero o de género no binario, seleccione el sexo que coincida con las partes del cuerpo (como los ovarios, los testículos, la próstata, las mamas, el pene o la vagina) que tenga ahora en la zona donde tenga los síntomas.
- Si sus síntomas no están relacionados con esos órganos, puede elegir el sexo con el que se identifique.
- Si tiene algunos órganos de ambos sexos, es posible que tenga que utilizar esta herramienta de triaje dos veces (una vez como "hombre" y otra vez como "mujer"). Esto es para asegurarse de que la herramienta haga las preguntas adecuadas para usted.
Muchos factores pueden afectar la forma en que el cuerpo responde a un síntoma y qué tipo de atención podría necesitar. Estos incluyen:
- Su edad. Los bebés y los adultos mayores tienden a enfermarse con más rapidez.
- Su estado de salud general. Si tiene una afección como diabetes, VIH, cáncer o enfermedad cardíaca, es posible que deba prestar especial atención a determinados síntomas y buscar atención antes.
- Los medicamentos que toma. Ciertos medicamentos, como los medicamentos que previenen la formación de coágulos de sangre (anticoagulantes), medicamentos que inhiben el sistema inmunitario como los esteroides o la quimioterapia, remedios herbarios o suplementos pueden provocar síntomas o empeorarlos.
- Hechos relacionados con la salud recientes, como una cirugía o una lesión. Estos tipos de hechos pueden causar síntomas más adelante o agravarlos.
- Sus hábitos de salud y su estilo de vida, como los hábitos alimentarios y de ejercicio, el hábito de fumar, el consumo de alcohol o de drogas, los antecedentes sexuales y los viajes.
Pruebe el tratamiento en el hogar
Usted respondió todas las preguntas. En función de sus respuestas, es posible que pueda resolver este problema en el hogar.
- Pruebe el tratamiento en el hogar para aliviar los síntomas.
- Llame a su médico si los síntomas empeoran o si tiene alguna inquietud (por ejemplo, si los síntomas no mejoran como debería esperar). Es posible que necesite atención antes.
Los problemas en la vejiga o los intestinos pueden incluir:
- Problemas para vaciar la vejiga.
- Pérdida involuntaria de orina.
- Sangre en la orina.
- No poder evacuar el intestino.
- Evacuación involuntaria de heces.
Dolor en adultos y niños mayores
- Dolor intenso (de 8 a 10): El dolor es tan fuerte que no puede soportarlo por más de algunas horas, no puede dormir y no puede hacer nada más excepto concentrarse en el dolor.
- Dolor moderado (de 5 a 7): El dolor es lo suficientemente intenso como para perturbar sus actividades normales y el sueño, pero lo puede tolerar durante horas o días. Moderado también puede significar dolor que aparece y desaparece incluso si es intenso cuando está presente.
- Dolor leve (de 1 a 4): Usted nota el dolor, pero no es lo suficientemente intenso como para perturbarle el sueño o las actividades.
Dolor en niños menores de 3 años
Puede ser difícil saber cuánto dolor siente un bebé o un niño pequeño.
- Dolor intenso (de 8 a 10): El dolor es tan fuerte que el bebé no puede dormir, no puede estar cómodo y llora constantemente sin importar lo que usted haga. Es posible que el bebé patee, cierre los puños o haga muecas.
- Dolor moderado (de 5 a 7): El bebé está muy molesto, se aferra mucho a usted y podría tener problemas para dormir, pero responde cuando usted intenta calmarlo.
- Dolor leve (de 1 a 4): El bebé está un poco molesto y se aferra un poco a usted, pero responde cuando usted intenta calmarlo.
Dolor en niños de 3 años y mayores
- Dolor intenso (de 8 a 10): El dolor es tan fuerte que el niño no puede soportarlo por más de algunas horas, no puede dormir y no puede hacer nada más excepto concentrarse en el dolor. Nadie puede tolerar un dolor intenso durante más de algunas horas.
- Dolor moderado (de 5 a 7): El dolor es lo suficientemente fuerte como para perturbar las actividades normales y el sueño del niño, pero el niño puede tolerarlo durante horas o días.
- Dolor leve (de 1 a 4): El niño nota el dolor y podría quejarse de eso, pero no es lo suficientemente intenso como para perturbarle el sueño o las actividades.
Un traumatismo importante es cualquier episodio que pueda causar una lesión muy grave, como:
- Una caída desde más de 10 pies (3.1 m)[más de 5 pies (1.5 m) para niños menores de 2 años y adultos mayores de 65 años].
- Un choque en el que alguno de los vehículos involucrados fuera a una velocidad de más de 20 millas (32 km) por hora.
- Cualquier evento que cause sangrado intenso que no pueda controlar.
- Cualquier evento lo suficientemente fuerte como para producir una fractura grave en un hueso grande (como el hueso de un brazo o de una pierna).
Con sangrado intenso, cualquiera de estas afirmaciones puede ser verdadera:
- Sale sangre a chorros de la herida.
- El sangrado no se detiene ni se reduce al aplicar presión.
- La sangre empapa rápidamente una venda tras otra.
Con sangrado moderado, cualquiera de estas afirmaciones puede ser verdadera:
- El sangrado se reduce o se detiene al aplicar presión, pero comienza nuevamente si deja de presionar.
- La sangre puede empapar algunas vendas, pero no en forma rápida ni descontrolada.
Con sangrado leve, cualquiera de estas afirmaciones puede ser verdadera:
- El sangrado se detiene por sí solo o al aplicar presión.
- El sangrado se detiene o se reduce a supuración o goteo después de 15 minutos de aplicar presión. Es posible que exude o gotee por un máximo de 45 minutos.
Pueden ocurrir infecciones urinarias en la vejiga o en los riñones. Los síntomas pueden incluir:
- Dolor o ardor al orinar.
- Necesidad de orinar con frecuencia sin poder eliminar mucha orina.
- Dolor en el flanco, que puede ser en cualquiera de los dos lados de la espalda, justo por debajo de la caja torácica y por encima de la cintura.
- Sangre en la orina.
- Fiebre.
El choque ("shock") es una afección potencialmente mortal que puede ocurrir rápidamente después de una enfermedad o lesión repentinas.
Los adultos y los niños mayores a menudo tienen varios síntomas de choque. Estos incluyen:
- Desmayo (pérdida del conocimiento).
- Sentirse muy mareados o aturdidos, como si fueran a desmayarse.
- Sentirse muy débiles o tener problemas para estar de pie.
- No sentirse alerta ni capaces de pensar claramente. Es posible que se sientan confusos, inquietos, temerosos o incapaces de responder preguntas.
El choque ("shock") es una afección potencialmente mortal que podría ocurrir rápidamente después de una enfermedad o lesión repentinas.
Los bebés y los niños pequeños a menudo tienen varios síntomas de choque. Estos incluyen:
- Desmayo (pérdida del conocimiento).
- Sentir mucho sueño o que resulte difícil despertarlos.
- No responder cuando los tocan o les hablan.
- Respirar mucho más rápido de lo habitual.
- Actuar confusos. Es posible que el niño no sepa dónde está.
Los síntomas de un ataque al corazón podrían incluir:
- Dolor o presión en el pecho, o una sensación extraña en el pecho.
- Sudoración.
- Falta de aire.
- Náuseas o vómito.
- Dolor, presión o una sensación extraña en la espalda, el cuello, la mandíbula, la parte superior del abdomen, o en uno o ambos hombros o brazos.
- Aturdimiento o debilidad repentina.
- Latidos cardíacos rápidos o irregulares.
Tanto para los hombres como para las mujeres, el síntoma más común es dolor o presión en el pecho. Pero las mujeres tienen una probabilidad algo más alta que los hombres de tener otros síntomas, como falta de aire, cansancio, náusea y dolor en la espalda o la mandíbula.
Busque atención hoy
En función de sus respuestas, es posible que usted necesite recibir atención pronto. Probablemente, el problema no mejore si no recibe atención médica.
- Llame a su médico hoy para analizar los síntomas y para coordinar la atención.
- Si no puede comunicarse con su médico o no tiene uno, busque atención hoy.
- Si sucede por la noche, preste atención a los síntomas y busque atención por la mañana.
- Si los síntomas empeoran, busque atención antes.
Programe una cita
En función de sus respuestas, es posible que el problema no mejore si no recibe atención médica.
- Programe una cita para consultar a su médico en las próximas 1 a 2 semanas.
- Si corresponde, pruebe el tratamiento en el hogar mientras espera la cita.
- Si los síntomas empeoran o si tiene alguna inquietud, llame a su médico. Es posible que necesite atención antes.
Busque atención ahora
En función de sus respuestas, es posible que usted necesite recibir atención de inmediato. Es probable que el problema empeore si no recibe atención médica.
- Llame a su médico ahora para analizar los síntomas y para coordinar la atención.
- Si no puede comunicarse con su médico o no tiene uno, busque atención en la siguiente hora.
- No necesita llamar a una ambulancia, a menos que:
- No pueda viajar en forma segura conduciendo usted mismo o pidiéndole a alguien que le lleve.
- Esté en un área en la que haya mucho tránsito u otros problemas que podrían retrasarle.
Llame al 911 ahora
En función de sus respuestas, usted necesita atención de urgencia.
Llame ahora al 911 o a otros servicios de emergencia.
No mueva a la persona, a menos que haya una amenaza inminente para la vida de la persona, como un incendio. Si tiene que mover a la persona, mantenga la cabeza y el cuello de la persona apoyados y en línea recta en todo momento. Si la persona tuvo un accidente mientras se zambullía y aún está en el agua, haga que la persona flote boca arriba en el agua.
A veces, las personas no quieren llamar al 911. Podrían creer que sus síntomas no son graves o que simplemente pueden pedirle transporte a otra persona. O podría preocuparles el costo. Pero, en función de sus respuestas, la manera más rápida y segura de obtener la atención que necesita es llamar al 911 para solicitar transporte médico al hospital.
Llame al 911 ahora
En función de sus respuestas, usted necesita atención de urgencia.
Llame ahora al 911 o a otros servicios de emergencia.
Aplique presión directa y constante en la herida hasta que llegue la ayuda. Mantenga la zona elevada si puede.
A veces, las personas no quieren llamar al 911. Podrían creer que sus síntomas no son graves o que simplemente pueden pedirle transporte a otra persona. O podría preocuparles el costo. Pero, en función de sus respuestas, la manera más rápida y segura de obtener la atención que necesita es llamar al 911 para solicitar transporte médico al hospital.
Llame al 911 ahora
En función de sus respuestas, usted necesita atención de urgencia.
Llame ahora al 911 o a otros servicios de emergencia.
Después de llamar al 911, el operador podría decirle que mastique 1 aspirina para adultos (325 mg) o 2 a 4 aspirinas de dosis baja (81 mg). Espere a la ambulancia. No trate de conducir un automóvil por sí mismo.
A veces, las personas no quieren llamar al 911. Podrían creer que sus síntomas no son graves o que simplemente pueden pedirle transporte a otra persona. O podría preocuparles el costo. Pero, en función de sus respuestas, la manera más rápida y segura de obtener la atención que necesita es llamar al 911 para solicitar transporte médico al hospital.
Cuidado personal
Primeros auxilios para una posible lesión de la médula espinal
Debe tenerse en cuenta la posibilidad de una lesión medular siempre que ocurra un accidente que implica la cabeza, la cara, el cuello o la espalda. Puede evitarse una parálisis permanente si se evita que la persona lesionada se mueva (se la inmoviliza) y se la transporta correctamente.
No mueva a la persona.
Si piensa que la persona puede tener una lesión en la médula espinal, no la mueva a menos que haya un peligro de vida inmediato, como un incendio. Si existe un peligro inmediato, mantenga la cabeza y el cuello de la persona apoyados en línea recta mientras la mueve a un lugar seguro.
No saque a la persona del agua si ha sufrido un accidente al zambullirse. Haga que la persona flote boca arriba en el agua hasta que llegue la ayuda.
Llame a los servicios de emergencia.
Llame al 911 o a otros servicios de emergencia para que transporten a la persona lesionada si cree que esta persona pudiera tener una lesión en la médula espinal. Esto reducirá el riesgo de más lesiones en la médula espinal.
Pruebe los siguientes consejos para ayudar a aliviar el dolor, la hinchazón y la rigidez de espalda.
- Retome las actividades normales.
Retome sus actividades normales diarias lo antes que pueda. Es posible que deba realizar cambios o limitar algunas tareas de trabajo.
- Manténgase alejado de la cama.
Evite el reposo en cama. El reposo en cama no funciona bien para el dolor de espalda. Y puede hacer que se cure más lentamente.
- Pruebe con calor o hielo.
- Utilice una almohadilla térmica a baja o media temperatura por entre 15 y 20 minutos cada 2 a 3 horas. Pruebe a ducharse con agua tibia en lugar de una sesión. También puede comprar envolturas calientes desechables ("heat wraps") que duran hasta 8 horas.
- También puede usar una compresa de hielo por 10 o 15 minutos cada 2 o 3 horas.
- Cambie de posición cada 30 minutos.
- Frote la zona.
Masajee o frote suavemente la zona para aliviar el dolor y estimular la circulación de la sangre. No masajee la zona afectada si le causa dolor.
- Cuide su postura.
Evite sentarse en la cama, sentarse en sofás blandos y flexionarse o sentarse en otras posiciones que empeoren sus síntomas.
- Cambie la posición para dormir.
Pruebe una de estas posiciones para dormir si tiene problemas para dormir por la noche:
- Acuéstese de espaldas con las rodillas flexionadas y apoyadas en almohadas grandes. O acuéstese sobre el piso con las piernas sobre el asiento de un sofá o una silla.
- Acuéstese de lado con las rodillas y las caderas flexionadas y una almohada entre las piernas.
- Acuéstese boca abajo si eso no le empeora el dolor.
- Empiece a hacer ejercicio.
El dolor de espalda a menudo mejora cuando aumenta lentamente su actividad física.
Comience el ejercicio aeróbico moderado. Dé caminatas cortas (de 3 a 5 minutos cada 3 horas) en superficies niveladas tan pronto como pueda. Esto puede ayudar a mantener sus músculos fuertes. Evite las colinas y escaleras. Camine solamente distancias que pueda manejar sin dolor, especialmente dolor en las piernas.
Después de 2 a 3 días:
- Siga haciendo caminatas diarias. Pero aumente las caminatas a 5 a 10 minutos de 3 a 4 veces al día.
- Pruebe a nadar, lo cual es bueno para la espalda. Puede ser doloroso inmediatamente después de una lesión en la espalda. Pero nadar o patalear con aletas de natación a menudo ayuda a evitar que el dolor de espalda regrese.
- Tome una clase de yoga.
Agregue a su programa de ejercicios cada semana para progresar más.
- Haga ejercicios de inclinación pélvica.
Estos mueven suavemente la columna vertebral y estiran la parte baja de la espalda. Recuéstese de espaldas con las rodillas flexionadas y los pies apoyados completamente en el piso. Apriete lentamente los músculos del estómago y presione la zona lumbar contra el suelo. Mantenga esta posición durante 6 segundos. No contenga la respiración. Relájese lentamente.
- No fume ni consuma otros productos derivados del tabaco.
Fumar demora la sanación, debido a que reduce la irrigación sanguínea y retrasa la reparación del tejido.
Lesión en el cóccix
Las cosas que puede hacer en casa para tratar una lesión en la espalda, como estar activo y hacer ejercicio, también pueden ayudarle a cuidar una lesión del cóccix. Aquí hay algunas cosas más que puede probar para una lesión en el cóccix.
- Haga baños de asiento con agua tibia.
Haga esto durante 20 minutos, de 3 a 4 veces al día después de las primeras 48 a 72 horas. Esto puede ser calmante para la zona del cóccix. Sentarse en una bañera de hidromasaje o baño caliente también puede sentirse bien, siempre y cuando no se siente directamente sobre el cóccix.
- Observe dónde se sienta.
No se siente sobre superficies duras y sin acolchar.
- Use una almohada especial.
Siéntese en una almohada en forma de C con el espacio abierto debajo del cóccix. Esto puede quitar presión de la zona del cóccix.
- Evite el estreñimiento.
Esforzarse al evacuar aumentará el dolor en el cóccix.
- No fume ni consuma otros productos derivados del tabaco.
Fumar demora la sanación, debido a que reduce la irrigación sanguínea y retrasa la reparación del tejido.
Cuándo pedir ayuda durante el cuidado personal
Llame a un médico si ocurre algo de lo siguiente durante el cuidado personal en el hogar:
- Una o ambas piernas se debilitan o entumecen.
- Pérdida del control del intestino o de la vejiga.
- El dolor de espalda no mejora o empeora.
- Fiebre.
- Los síntomas aparecen con más frecuencia o son más graves.
Sepa más
Medicamentos de venta libre
- Acetaminofén
- Aspirina para el dolor, la fiebre y la inflamación
- Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE)
- Consejos prácticos: Cómo dar medicamentos de venta libre en forma segura a los niños
Más cuidado personal
Mire
- Back Pain: 5 Ways to Take Care of Yourself
- Condición física: Cómo aumentar la estabilidad del tronco (subtitulado)
- Cómo levantar objetos de manera apropiada para proteger la espalda (subtitulado)
Cómo prepararse para la cita
Usted puede ayudar al médico a diagnosticar y tratar su afección preparándose para la cita.
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Créditos
Revisado: 31 julio, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.
Revisado: 31 julio, 2024
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