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Generalidades
El dolor abdominal (o dolor de barriga) en niños es un problema común. Pero solo un número reducido de estos niños tienen un problema grave.
Las quejas de dolor abdominal son más frecuentes en niños menores de 11 años. El dolor suele estar causado por cambios en los hábitos alimentarios e intestinales. En la mayoría de los casos no es grave. A menudo, el tratamiento en el hogar es todo lo que se necesita para aliviar las molestias.
El dolor abdominal en los niños puede asustar y frustrar a los padres. A menudo es difícil encontrar la causa exacta del dolor de un niño. El dolor sin otros síntomas que desaparece por completo no suele ser grave.
En los niños, el dolor abdominal puede estar relacionado con una lesión en el abdomen. O puede estar relacionado con una enfermedad, como una infección de estómago, una infección de oído, una infección urinaria o una faringitis estreptocócica. Los síntomas abdominales también pueden producirse por una infección transmitida por animales o al viajar a un país extranjero. El estreñimiento es una causa frecuente de dolor abdominal en los niños. Algunas causas más graves en los niños incluyen la apendicitis, la intoxicación por plomo y los problemas intestinales, como la invaginación intestinal o la malrotación. Los períodos menstruales pueden causar dolor abdominal cada mes. El dolor puede ser más intenso unos meses que otros.
El dolor generalizado se produce en la mitad del abdomen o más. El dolor localizado se concentra en una zona del abdomen. Los bebés y los niños pequeños suelen reaccionar al dolor de forma diferente a los niños mayores que pueden hablar de su dolor. Un bebé puede estar inquieto, llevar las piernas hacia el vientre o comer mal. Los niños mayores pueden señalar la zona del dolor y describir su intensidad.
El dolor abdominal puede aparecer una sola vez o de forma repetida durante varios meses.
Revise sus síntomas
La evaluación médica de los síntomas se basa en las partes del cuerpo que usted tiene.
- Si es transgénero o de género no binario, seleccione el sexo que coincida con las partes del cuerpo (como los ovarios, los testículos, la próstata, las mamas, el pene o la vagina) que tenga ahora en la zona donde tenga los síntomas.
- Si sus síntomas no están relacionados con esos órganos, puede elegir el sexo con el que se identifique.
- Si tiene algunos órganos de ambos sexos, es posible que tenga que utilizar esta herramienta de triaje dos veces (una vez como "hombre" y otra vez como "mujer"). Esto es para asegurarse de que la herramienta haga las preguntas adecuadas para usted.
Muchos factores pueden afectar la forma en que el cuerpo responde a un síntoma y qué tipo de atención podría necesitar. Estos incluyen:
- Su edad. Los bebés y los adultos mayores tienden a enfermarse con más rapidez.
- Su estado de salud general. Si tiene una afección como diabetes, VIH, cáncer o enfermedad cardíaca, es posible que deba prestar especial atención a determinados síntomas y buscar atención antes.
- Los medicamentos que toma. Ciertos medicamentos, como los medicamentos que previenen la formación de coágulos de sangre (anticoagulantes), medicamentos que inhiben el sistema inmunitario como los esteroides o la quimioterapia, remedios herbarios o suplementos pueden provocar síntomas o empeorarlos.
- Hechos relacionados con la salud recientes, como una cirugía o una lesión. Estos tipos de hechos pueden causar síntomas más adelante o agravarlos.
- Sus hábitos de salud y su estilo de vida, como los hábitos alimentarios y de ejercicio, el hábito de fumar, el consumo de alcohol o de drogas, los antecedentes sexuales y los viajes.
Pruebe el tratamiento en el hogar
Usted respondió todas las preguntas. En función de sus respuestas, es posible que pueda resolver este problema en el hogar.
- Pruebe el tratamiento en el hogar para aliviar los síntomas.
- Llame a su médico si los síntomas empeoran o si tiene alguna inquietud (por ejemplo, si los síntomas no mejoran como debería esperar). Es posible que necesite atención antes.
Si tiene dolor con retortijones en el abdomen:
- El dolor puede molestar un poco o mucho.
- El dolor puede cambiar de minuto a minuto. Con frecuencia, los retortijones mejoran cuando elimina gases o evacua el intestino.
- El dolor puede sentirse como una opresión o pellizco en el abdomen.
- El dolor puede localizarse en una zona específica o estar en una zona más grande. El dolor puede desplazarse.
Los bebés pueden deshidratarse rápidamente cuando pierden líquidos debido a problemas como vómito o fiebre.
Los síntomas de deshidratación pueden ser de leves a graves. Por ejemplo:
- El bebé podría estar molesto o irritable (deshidratación leve), o el bebé podría estar muy somnoliento y podría resultarle difícil despertarlo (deshidratación grave).
- El bebé podría orinar un poco menos de lo habitual (deshidratación leve), o el bebé podría no orinar en absoluto (deshidratación grave).
Usted puede deshidratarse cuando pierde mucho líquido debido a problemas como vómito o fiebre.
Los síntomas de deshidratación pueden ser de leves a graves. Por ejemplo:
- Es posible que se sienta cansado y tenso (deshidratación leve), o puede sentirse débil, que no está alerta e incapaz de pensar claramente (deshidratación grave).
- Es posible que orine menos de lo habitual (deshidratación leve), o es posible que no orine en absoluto (deshidratación grave).
Deshidratación grave significa:
- Es posible que el bebé esté muy somnoliento y que sea difícil despertarlo.
- Es posible que el bebé tenga la boca y los ojos muy secos (sin lágrimas).
- Es posible que el bebé no moje los pañales durante 12 horas o más.
Deshidratación moderada significa:
- Es posible que el bebé no moje ningún pañal en 6 horas.
- Es posible que el bebé tenga la boca y los ojos secos (menos lágrimas de lo habitual).
Deshidratación leve significa:
- Es posible que el bebé orine un poco menos de lo habitual.
Deshidratación grave significa:
- Es posible que el niño tenga la boca y los ojos extremadamente secos.
- Es posible que el niño orine poco o no orine durante 12 horas o más.
- Es posible que el niño no parezca alerta ni capaz de pensar claramente.
- Es posible que el niño esté demasiado débil o mareado como para mantenerse de pie.
- Es posible que el niño se desmaye.
Deshidratación moderada significa:
- Es posible que el niño tenga mucha más sed de lo habitual.
- Es posible que el niño tenga la boca y los ojos más secos de lo habitual.
- Es posible que el niño orine poco o no orine durante 8 horas o más.
- Es posible que el niño se sienta mareado cuando se pone de pie o se incorpora.
Deshidratación leve significa:
- Es posible que el niño tenga más sed de lo habitual.
- Es posible que el niño orine menos de lo habitual.
Si no está seguro de si la fiebre de un niño es alta, moderada o leve, tenga en cuenta lo siguiente:
Con fiebre alta:
- El niño siente mucho calor.
- Es probable que sea una de las fiebres más altas que haya tenido el niño.
Con fiebre moderada:
- El niño siente calor o un poco de calor.
- Usted está seguro de que el niño tiene fiebre.
Con fiebre leve:
- Es posible que el niño sienta un poco de calor.
- Usted cree que el niño podría tener fiebre, pero no está seguro.
Un bebé que se encuentra extremadamente enfermo:
- Puede estar flojo y caído como un muñeco de trapo.
- Puede no responder en absoluto cuando lo alzan, lo tocan o le hablan.
- Puede ser difícil despertarlo.
Un bebé que se encuentra enfermo (pero no extremadamente enfermo):
- Puede tener más sueño de lo habitual.
- Puede no comer ni beber tanto como lo hace habitualmente.
Dolor en niños menores de 3 años
Puede ser difícil saber cuánto dolor siente un bebé o un niño pequeño.
- Dolor intenso (de 8 a 10): El dolor es tan fuerte que el bebé no puede dormir, no puede estar cómodo y llora constantemente sin importar lo que usted haga. Es posible que el bebé patee, cierre los puños o haga muecas.
- Dolor moderado (de 5 a 7): El bebé está muy molesto, se aferra mucho a usted y podría tener problemas para dormir, pero responde cuando usted intenta calmarlo.
- Dolor leve (de 1 a 4): El bebé está un poco molesto y se aferra un poco a usted, pero responde cuando usted intenta calmarlo.
Dolor en niños de 3 años y mayores
- Dolor intenso (de 8 a 10): El dolor es tan fuerte que el niño no puede soportarlo por más de algunas horas, no puede dormir y no puede hacer nada más excepto concentrarse en el dolor. Nadie puede tolerar un dolor intenso durante más de algunas horas.
- Dolor moderado (de 5 a 7): El dolor es lo suficientemente fuerte como para perturbar las actividades normales y el sueño del niño, pero el niño puede tolerarlo durante horas o días.
- Dolor leve (de 1 a 4): El niño nota el dolor y podría quejarse de eso, pero no es lo suficientemente intenso como para perturbarle el sueño o las actividades.
El choque ("shock") es una afección potencialmente mortal que podría ocurrir rápidamente después de una enfermedad o lesión repentinas.
Los bebés y los niños pequeños a menudo tienen varios síntomas de choque. Estos incluyen:
- Desmayo (pérdida del conocimiento).
- Sentir mucho sueño o que resulte difícil despertarlos.
- No responder cuando los tocan o les hablan.
- Respirar mucho más rápido de lo habitual.
- Actuar confusos. Es posible que el niño no sepa dónde está.
La sangre en las heces puede provenir de cualquier parte del tubo digestivo, como el estómago o los intestinos. Según la parte de donde venga la sangre y la rapidez con que se mueva, es posible que tenga un color rojo vivo, marrón rojizo o negro como el alquitrán.
Una pequeña cantidad de sangre color rojo vivo en las heces o en el papel higiénico suele ser causada por una leve irritación del recto. Por ejemplo, esto puede suceder si tiene que esforzarse mucho para evacuar las heces o si tiene una hemorroide.
Una abundante cantidad de sangre en las heces puede significar que hay un problema más serio. Por ejemplo, si hay mucha sangre en las heces, no solo en la superficie, podría tener que llamar a su médico inmediatamente. Si solo son algunas gotas en las heces o en el pañal, podría tener que llamar a su médico hoy para hablar de sus síntomas. Las heces negras pueden significar que usted tiene sangre en el tubo digestivo que podría requerir tratamiento inmediatamente, o podría ser algo que se va solo.
Determinados medicamentos y alimentos pueden afectar el color de las heces. Los medicamentos contra la diarrea (como Pepto-Bismol) y las tabletas de hierro pueden hacer que las heces se vuelvan negras. Comer mucha remolacha (betabel) podría hacer que las heces se vuelvan rojas. Comer alimentos con colorante negro o azul oscuro puede hacer que las heces se pongan negras.
Si toma aspirina o algún otro medicamento que previene los coágulos de sangre, esto puede hacer que haya algo de sangre en sus heces. Si toma un medicamento que previene los coágulos sanguíneos y tiene sangre en las heces en forma persistente, llame a su médico para hablar de sus síntomas.
Determinadas afecciones de salud y medicamentos debilitan la capacidad del sistema inmunitario de combatir las infecciones y las enfermedades. Algunos ejemplos en los niños son:
- Enfermedades como diabetes, fibrosis quística, enfermedad de células falciformes y enfermedades cardíacas congénitas.
- Medicamentos esteroides, que se usan para tratar una variedad de afecciones.
- Medicamentos que se hayan tomado después de un trasplante de órganos.
- Quimioterapia y radioterapia para el cáncer.
- No tener bazo.
La temperatura varía un poco según cómo se mida. A continuación, se detallan los márgenes en niños de hasta 11 años, para temperaturas alta, moderada y leve según cómo se haya tomado la temperatura.
Temperatura bucal, timpánica (en el oído) o rectal
- Alta: 104°F (40°C) o más
- Moderada: 100.4°F (38°C) a 103.9°F (39.9°C)
- Leve: 100.3°F (37.9°C) o menos
Una medición de la temperatura en la frente suele ser entre 0.5°F (0.3°C) y 1°F (0.6°C) más baja que la temperatura oral.
Temperatura axilar
- Alta: 103°F (39.5°C) o más
- Moderada: 99.4°F (37.4°C) a 102.9°F (39.4°C)
- Leve: 99.3°F (37.3°C) o menos
Nota: Para niños de menos de 5 años, la temperatura rectal es la más precisa.
Es fácil que su diabetes se salga de control cuando está enfermo. Debido a una enfermedad:
- Su nivel de azúcar en la sangre podría ser demasiado alto o demasiado bajo.
- Es posible que usted no pueda tomar sus medicamentos para la diabetes (si tiene vómito o problemas para retener los alimentos o los líquidos).
- Es posible que no sepa cómo ajustar la dosis o cuándo debe administrar su medicamento para la diabetes.
- Es posible que usted no esté comiendo suficiente cantidad de alimentos o bebiendo suficiente cantidad de líquido.
Por lo general, un plan para enfermedad destinado a personas con diabetes cubre aspectos como los siguientes:
- La frecuencia con la que se debe revisar el nivel de azúcar en la sangre y cuáles son los límites ideales.
- Si se debe ajustar la dosis y el momento de administración de la insulina o de otros medicamentos para la diabetes y cómo hacerlo.
- Qué hacer si usted tiene problemas para retener los alimentos o los líquidos.
- Cuándo llamar a su médico.
El plan está diseñado para ayudarle a mantener la diabetes bajo control aunque esté enfermo. Cuando tiene diabetes, aun una enfermedad leve puede causar problemas.
Muchos medicamentos recetados y sin receta pueden provocar dolor abdominal o retortijones. Algunos ejemplos son los siguientes:
- Aspirina, ibuprofeno (como Advil o Motrin) y naproxeno (como Aleve).
- Antibióticos.
- Antidiarreicos.
- Laxantes.
- Suplementos de hierro.
Busque atención hoy
En función de sus respuestas, es posible que usted necesite recibir atención pronto. Probablemente, el problema no mejore si no recibe atención médica.
- Llame a su médico hoy para analizar los síntomas y para coordinar la atención.
- Si no puede comunicarse con su médico o no tiene uno, busque atención hoy.
- Si sucede por la noche, preste atención a los síntomas y busque atención por la mañana.
- Si los síntomas empeoran, busque atención antes.
Busque atención ahora
En función de sus respuestas, es posible que usted necesite recibir atención de inmediato. Es probable que el problema empeore si no recibe atención médica.
- Llame a su médico ahora para analizar los síntomas y para coordinar la atención.
- Si no puede comunicarse con su médico o no tiene uno, busque atención en la siguiente hora.
- No necesita llamar a una ambulancia, a menos que:
- No pueda viajar en forma segura conduciendo usted mismo o pidiéndole a alguien que le lleve.
- Esté en un área en la que haya mucho tránsito u otros problemas que podrían retrasarle.
Llame al 911 ahora
En función de sus respuestas, usted necesita atención de urgencia.
Llame ahora al 911 o a otros servicios de emergencia.
A veces, las personas no quieren llamar al 911. Podrían creer que sus síntomas no son graves o que simplemente pueden pedirle transporte a otra persona. O podría preocuparles el costo. Pero, en función de sus respuestas, la manera más rápida y segura de obtener la atención que necesita es llamar al 911 para solicitar transporte médico al hospital.
Programe una cita
En función de sus respuestas, es posible que el problema no mejore si no recibe atención médica.
- Programe una cita para consultar a su médico en las próximas 1 a 2 semanas.
- Si corresponde, pruebe el tratamiento en el hogar mientras espera la cita.
- Si los síntomas empeoran o si tiene alguna inquietud, llame a su médico. Es posible que necesite atención antes.
Cuidado personal
La mayoría de las veces, el dolor abdominal (o dolor de barriga) de un niño mejorará con tratamiento en el hogar. El niño no necesitará ir al médico.
El tratamiento en el hogar del dolor abdominal leve suele depender de otros síntomas que presente el niño junto con el dolor, como diarrea, náuseas o vómitos.
Pruebe lo siguiente, de uno en uno y en el orden indicado, si su hijo tiene dolor abdominal leve sin otros síntomas.
- Haga que su hijo descanse cuando tenga dolor abdominal leve. La mayoría de los síntomas mejorarán o desaparecerán en 30 minutos.
- Haga que su hijo sorba líquidos claros. Pruebe con líquidos como agua, caldo, té o jugo de frutas diluido con agua.
- Haga que su hijo intente evacuar el intestino.
Si los pasos anteriores no funcionan, también puede probar estos:
- Sirva a su hijo varias comidas pequeñas en lugar de 2 o 3 grandes.
- Cuando su hijo tenga ganas de comer de nuevo, comience con pequeñas cantidades. Evite alimentos picantes, calientes o altos en grasa y bebidas con cafeína durante uno o dos días. Estos alimentos pueden empeorar el dolor abdominal de su hijo.
- No le dé a su hijo ningún medicamento sin hablar antes con el médico. Los medicamentos pueden enmascarar el dolor o empeorarlo.
Dolor abdominal recurrente
Un niño con dolor abdominal recurrente (RAP, por sus siglas en inglés) debería comer comidas regulares, no saltarse ninguna comida y no comer de más en ninguna comida. Diferentes alimentos, como las comidas picantes o los lácteos, pueden provocar un episodio en algunos niños. Su hijo no debería comer ninguna comida que le cause dolor abdominal.
Muchos niños pueden controlar el dolor y seguir realizando sus actividades normales. Asegúrese de que su hijo tenga horarios regulares de comidas y refrigerios, así como un horario regular para acostarse de modo que duerma lo suficiente.
Cuándo pedir ayuda durante el cuidado personal
Llame a un médico si cualquiera de lo siguiente ocurre mientras se cuida en el hogar:
- El dolor empeora, no mejora o se siente en una zona específica del abdomen.
- Aparecen otros síntomas, como diarrea, náuseas, vómitos o fiebre.
- El abdomen está duro o parece muy hinchado.
- Los síntomas ocurren con mayor frecuencia o son más graves.
Sepa más
Cómo prepararse para su cita
Usted puede ayudar al médico a diagnosticar y tratar su afección preparándose para la cita.
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Créditos
Revisado: 19 octubre, 2023
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.
Revisado: 19 octubre, 2023
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