Comprensión de las contracciones de Braxton Hicks

by Kaiser Permanente
Mujer embarazada parada junto a la biblioteca en el hogar.

A medida que se acerca la fecha prevista de parto, el cuerpo se prepara de forma activa. Una de las formas en la que lo hace es con las contracciones de Braxton Hicks, que están destinadas a ayudarla a practicar para cuando realmente entre en trabajo de parto. Pueden comenzar tan pronto como en la semana 20 del embarazo. Algunas mujeres nunca las experimentan, y esto también es normal.

Durante una contracción, los músculos uterinos se tensan y, luego, se relajan. Es posible que sienta este endurecimiento en el abdomen. La diferencia entre una contracción habitual y una de Braxton Hicks es que esta última no causará la apertura ni el adelgazamiento del cuello uterino como lo hacen las contracciones de trabajo de parto reales. La deshidratación es un factor común que genera las contracciones de Braxton Hicks.

Es importante saber la diferencia entre las contracciones de Braxton Hicks y las de trabajo de parto reales. Generalmente, las contracciones de Braxton Hicks:

  • No se vuelven más intensas con el tiempo.
  • Pueden desaparecer si cambia de posición.
  • Pueden desaparecer si se hidrata.
  • Ocurren de manera irregular y pueden ser breves o prolongadas, débiles o intensas.

En cambio, las contracciones reales:

  • Ocurren de manera regular y son próximas entre sí.
  • Se vuelven más prolongadas y más intensas con el tiempo.
  • Pueden causar dolor en la espalda o en la parte baja del abdomen.
  • No desaparecen si cambia de posición o se hidrata.

También es importante comprender los signos del trabajo de parto prematuro, que es cuando comienza el trabajo de parto antes de llegar a la semana 37 del embarazo (a término). Si esto le sucede, su bebé podría correr un mayor riesgo de sufrir ciertas complicaciones. Estos son los signos que debe tener en cuenta:

  • Contracciones que ocurren cuatro o más veces en una hora.
  • Dolor de espalda leve que no desaparece si se mueve o cambia de posición.
  • Aumento del flujo vaginal que puede ser abundante, acuoso, con sangre o mucoso.
  • Calambres intestinales o síntomas gripales.
  • Calambres similares a los menstruales que pueden ser constantes o aparecer y desaparecer con el tiempo. Estos pueden ir acompañados de indigestión, diarrea o náuseas.
  • Dolor pélvico o presión que aparece y desaparece con un patrón predecible en la espalda, la parte baja del abdomen y los muslos.
  • Ruptura del saco amniótico, que también se conoce como romper la fuente.

Si experimenta signos de trabajo de parto prematuro, por favor llame a su equipo de atención de inmediato para obtener consejos.

Este artículo ha sido creado por un grupo nacional de obstetras y ginecólogos, enfermeras parteras certificadas, pediatras, asesoras en lactancia y otros especialistas de Kaiser Permanente que se unieron para brindarle la mejor información sobre el embarazo, el parto, el posparto y el recién nacido.

Parte del contenido se usa y adapta con permiso de The Permanente Medical Group.

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