Recuperarse de un problema cardíaco significa no solo recuperar su fuerza física sino también su bienestar emocional y mental. Tener una actitud positiva durante su recuperación y rehabilitación puede ayudarle a recuperarse física, emocional y mentalmente. Recuerde que pronto empezará a sentirse mejor. Se está esforzando para volver a su vida normal.
Tras el diagnóstico de un problema cardíaco o después de someterse a un procedimiento o cirugía, algunas personas experimentan estrés, depresión, ansiedad o aislamiento social. Debe saber que estos sentimientos son habituales en las personas que tienen problemas cardíacos. Es posible que se resista a la idea de tener un problema cardíaco o que tenga dificultades para prevenir futuros problemas.
El equipo de rehabilitación puede ofrecerle apoyo y educación para ayudarle a sobrellevar los efectos emocionales de padecer una enfermedad cardíaca.
Muchas personas se preguntan si sus síntomas de ansiedad o depresión son problemas que el médico o el equipo de rehabilitación debe conocer mientras trata su enfermedad cardíaca. Su salud emocional afecta a su salud física. Así que el médico y el equipo de rehabilitación necesitan conocer todos sus síntomas.
Cuanto antes hayan hablado usted y el médico sobre sus síntomas y sus opciones de tratamiento, antes podrá empezar a sentirse mejor. Y cuando se sienta mejor, puede que le resulte más fácil hacer las cosas que son buenas para su corazón.