Depresión, ansiedad y problemas de salud física

Generalidades

Depresión y otros problemas de salud

Las personas que padecen enfermedades de larga duración (crónicas) como artritis, asma, diabetes, cáncer, enfermedades cardíacas, hepatitis C o ataques cerebrales a menudo también sufren depresión. La depresión también suele aparecer con el dolor crónico. La depresión puede aparecer con estos problemas porque:

• El estrés cotidiano de lidiar con una enfermedad crónica provoca la depresión o la empeora.
• A las personas que sufren depresión puede resultarles difícil cuidar de su salud. Esto puede provocar problemas de salud.
• Las personas que tienen depresión pueden tener dificultades para mantenerse activas o comer alimentos saludables. También pueden tener hábitos poco saludables, como fumar.
• Algunas enfermedades crónicas cambian la química del cuerpo. Esto puede contribuir a causar depresión. El síndrome de Cushing y una tiroides hipoactiva (hipotiroidismo) son ejemplos de ello.
• La depresión está relacionada con algunas enfermedades crónicas. Por ejemplo, las personas que padecen diabetes o arteriopatía coronaria tienen más probabilidades de sufrir depresión. Y las personas con depresión tienen más probabilidades de desarrollar diabetes o arteriopatía coronaria.

Cómo controlar la depresión

El asesoramiento psicológico y los medicamentos suelen funcionar bien para tratar la depresión. A veces el asesoramiento por sí solo es suficiente. A menudo una combinación de ambos es la mejor opción.

Puede probar muchas cosas para ayudarse a sí mismo cuando se sienta deprimido. Estas cosas también pueden ayudar a reducir la probabilidad de que la depresión regrese.

• Haga ejercicio con regularidad. Incluso algo tan sencillo como caminar puede ayudarle a sentirse mejor.
• Coma alimentos saludables.
• Duerma lo suficiente.
• Evite beber alcohol, consumir marihuana u otras drogas o tomar medicamentos que no le hayan sido recetados.
• Piense de forma positiva. Su forma de pensar puede influir en sus sentimientos.
• Consiga el apoyo de otras personas.

Cuidarse bien es importante mientras se recupera de la depresión. Si el médico le recetó medicamentos, tómelos exactamente como le fueron recetados. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, incluido el asesoramiento psicológico. Y llame al médico si tiene problemas.

Ansiedad y otros problemas de salud

Cuando tiene un problema de salud crónico, como la diabetes, tal vez se sienta ansioso sobre su afección. O podría estar preocupado por el futuro. Esto es normal. Pero si la ansiedad continúa, puede ser difícil para usted ocuparse de su salud. La ansiedad puede tratarse, de modo que hable con el médico si tiene inquietudes.

Cómo controlar la ansiedad

El tratamiento en el hogar, combinado con el tratamiento profesional, puede ayudar a aliviar la ansiedad. Estos son algunos consejos para ayudarle a sobrellevar la ansiedad.

• Conozca su ansiedad. Reconozca y acepte su ansiedad sobre miedos o situaciones en particular. Luego haga un plan para enfrentarla. Por ejemplo, si siempre se está preocupando sobre cuestiones de dinero, elabore un presupuesto o un plan de ahorro.
• Intente no obsesionarse con problemas del pasado. Cambie lo que pueda como ayuda para sentirse más cómodo con las preocupaciones del momento. Pero deje de pensar en problemas del pasado o las cosas que no puede cambiar.
• Cuide su cuerpo.
  • Alivie la tensión con ejercicio o masajes.
  • Pruebe técnicas de alivio de estrés que se centren en relajar la mente y el cuerpo.
  • Descanse lo suficiente.
  • Practique el pensamiento saludable y detenga los pensamientos negativos. Elija pensamientos útiles para reemplazar los pensamientos inútiles.
  • Evite el alcohol, la cafeína, el chocolate y la nicotina. Pueden hacer que sienta más ansiedad. Algunas drogas, como la cocaína, el crack y las anfetaminas, también pueden causar ansiedad.
• Mantenga su mente activa.
  • Salga y haga algo que le guste. Por ejemplo, vaya a ver una película divertida o dé un paseo o una caminata.
  • Planifique su día. Tener demasiado o muy poco que hacer puede causarle más ansiedad.
  • Lleve un diario de sus síntomas. O hable de sus miedos con un buen amigo. Confiar en otras personas a veces alivia el estrés.
• Haga cosas con otras personas. Relaciónese con grupos sociales o haga tareas voluntarias para ayudar a otras personas. Estar solo puede hacer que las cosas parezcan peores de lo que son.
• Consiga apoyo. Aprenda sobre recursos disponibles en su comunidad.
  • Hable con el encargado de recursos humanos de su empleo acerca de los beneficios de asesoría psicológica que pudieran estar disponibles a través de su programa de asistencia al empleado.
  • Consulte con su compañía de seguros para ver qué beneficios de salud mental hay disponibles.
  • Comuníquese con su departamento de salud pública para obtener información sobre programas comunitarios de salud mental.