Rehabilitación después de un ataque cerebral

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Generalidades del tema

¿Es para usted este tema?

Este tema cubre la rehabilitación después de un ataque cerebral. Para información sobre el ataque cerebral en sí, vea el tema Ataque cerebral.

¿Qué es la rehabilitación después de un ataque cerebral?

La mejor forma de recuperarse después de un ataque cerebral es comenzar la rehabilitación. Durante la rehabilitación después de un ataque cerebral, un equipo de profesionales de la salud trabaja con usted para que recupere las habilidades que perdió como resultado de un ataque cerebral. La rehabilitación puede ayudarle a:

  • Hacer las cosas tan bien como pueda y ser tan independiente como sea posible.
  • Aprender a vivir con los cambios causados por el ataque cerebral en el cerebro y en el cuerpo.
  • Adaptarse a vivir dentro de su hogar, con su familia, en su comunidad.

La rehabilitación empieza cuando usted está aún en el hospital. Después de que salga del hospital, puede continuar el tratamiento en un centro de rehabilitación o en el hogar. Algunos programas de rehabilitación ofrecen al menos 3 horas de terapia al día, 5 o 6 días a la semana.

Una parte clave de la rehabilitación es tomar medidas para prevenir un ataque cerebral en el futuro. Para mantenerse saludable, es posible que deba tomar medicamentos y hacer algunos cambios en el estilo de vida. Colabore con su equipo de rehabilitación para decidir qué ejercicios, dietas u otras decisiones relacionadas con el estilo de vida son los más adecuados para usted.

Usted tiene las mejores probabilidades de recuperar sus capacidades durante los primeros meses después de un ataque cerebral. Por ello es importante comenzar la rehabilitación poco después de un ataque cerebral y hacer un poco cada día.

¿Quién está en un equipo de rehabilitación de ataque cerebral?

Usted y su familia, sus seres queridos y sus cuidadores son la parte más importante de un equipo de rehabilitación. Un equipo de profesionales de la salud trabajará conjuntamente, con usted y con sus cuidadores para ayudarle a recuperarse de un ataque cerebral. Un equipo de rehabilitación podría incluir médicos y enfermeras que se especializan en rehabilitación después de un ataque cerebral, así como terapeutas de rehabilitación, como:

  • Un fisioterapeuta para trabajar sobre los problemas con el movimiento, el equilibrio y la coordinación.
  • Un terapeuta ocupacional para ayudarle a aprender de nuevo a comer, bañarse, vestirse, escribir, y otras tareas cotidianas.
  • Un patólogo del habla y lenguaje para ayudarle a volver a aprender las habilidades del habla y del lenguaje y para ayudarle también si tiene problemas para tragar.
  • Un terapeuta de recreación para ayudarle a volver a hacer las actividades que usted disfrutaba antes del ataque cerebral.
  • Un psicólogo o un consejero para ayudarle a hacer frente a sus emociones.
  • Otros profesionales de la salud, como un dietista para ayudarle a planear una dieta saludable y un consejero profesional para ayudarle a encontrar un trabajo o volver al trabajo.

Un trabajador social o administrador de casos les ayudarán a usted y a sus cuidadores a hacer los arreglos para obtener la ayuda y los equipos que usted podría necesitar en el hogar después de que haya abandonado el centro de rehabilitación.

¿Qué tipo de problemas puede tener una persona después de un ataque cerebral?

Los problemas que usted tiene después de un ataque cerebral dependen de la parte del cerebro que se vio afectada y de la cantidad de daño que causó el ataque cerebral. Las personas que han tenido un ataque cerebral suelen tener:

  • Problemas con el movimiento y las sensaciones. Podría tener dolor, entumecimiento u hormigueo en los brazos y las piernas, rigidez muscular o espasmos, debilidad y problemas para caminar y moverse. Es posible que tenga problemas con su sentido del tacto o con la forma en la que siente el calor y el frío, problemas para tragar y comer, y problemas urinarios o intestinales.
  • Problemas de la vista. Podría tener problemas para ver en algunas o todas las áreas normales de la visión.
  • Problemas para reconocer un lado del cuerpo.
  • Problemas con el lenguaje y el pensamiento. Es posible que no pueda entender el lenguaje escrito ni el lenguaje hablado, leer ni escribir, ni expresar sus pensamientos. Es posible que también tenga problemas con la memoria y con el aprendizaje.
  • Problemas emocionales. Un ataque cerebral puede causar sentimientos de miedo, ansiedad, enojo, tristeza y pena, tanto para los sobrevivientes de un ataque cerebral como para sus seres queridos.

¿Causa un ataque cerebral problemas permanentes?

Un ataque cerebral ocasiona daños en las partes del cerebro que controlan diferentes funciones del cuerpo, como el habla y el movimiento. Sin embargo, otras partes del cerebro pueden cumplir con las funciones de las regiones dañadas. Muchas personas pueden recuperar la mayoría de las habilidades y de las capacidades que perdieron.

Algunas personas sí tienen problemas permanentes después de un ataque cerebral. Sin embargo, la rehabilitación puede ayudarle a adquirir nuevas habilidades que le servirán para cuidarse lo mejor posible.

¿Cuánto tiempo dura la rehabilitación?

El tiempo que usted pase en un programa de rehabilitación dependerá del tipo de ayuda que necesite. El camino hacia la recuperación puede ser largo y frustrante, por ello, la clave es mantener una mirada positiva. Intente todo lo que pueda para mejorar y busque un alivio para el dolor si lo necesita. Su equipo de rehabilitación después de un ataque cerebral está a su disposición para ayudarle de todas las maneras posibles. Una red sólida de apoyo integrada por familiares y amigos también es muy importante.

Es posible que la mayor parte de la recuperación suceda en las primeras semanas o meses después de su ataque cerebral. Pero puede seguir mejorando durante años. Solo que podría suceder más lentamente. Y puede llevar mucho tiempo y significar mucho trabajo. No pierda la esperanza.

¿Qué más debería tener en cuenta?

  • Es común sentirse triste y desesperanzado después de un ataque cerebral. Podría ser duro hacer frente a sus emociones. Cuéntele a su equipo de rehabilitación cómo se siente. Si lo necesita, busque tratamiento para la depresión.
  • Es importante obtener el apoyo que necesita. Deje que sus seres queridos le ayuden. Forman parte de su equipo de rehabilitación. Hágalos participar en su tratamiento. Hable con otras personas que hayan tenido un ataque cerebral y averigüe cómo manejaron ellos sus problemas.
  • Un ataque cerebral afecta a sus seres queridos también. Es posible que estén tan asustados y preocupados como usted. Insístales para que busquen un grupo de apoyo para cuidadores y aprendan formas de aliviar su estrés.
  • Es posible que usted tenga preguntas o inquietudes acerca de reanudar la actividad sexual. La rehabilitación podría incluir ayuda y apoyo.
  • Es posible que el seguro médico no cubra la rehabilitación o los dispositivos necesarios después de dejar el hospital. Procure que un cuidador averigüe sobre Medicare u otros programas.

Herramientas de salud

Las Herramientas de salud le permiten tomar decisiones acertadas sobre salud o tomar medidas para mejorar su salud.

Las Medidas prácticas le ayudan a la gente a participar activamente en la gestión de una condición de salud.

Qué esperar después de un ataque cerebral

Discapacidades iniciales

Sus discapacidades y su capacidad de mejorar después de un ataque cerebral dependen de:

  • Qué lado del cerebro se vio afectado (si es su lado dominante).
  • Qué parte del cerebro se dañó como consecuencia del ataque cerebral.
  • La cantidad de tejido cerebral afectado.
  • Su estado de salud general antes del ataque cerebral.

Entre los impedimentos que surgen después de un ataque cerebral podrían incluirse los problemas con los músculos y con el movimiento. Estos incluyen:

  • Debilidad en un lado del cuerpo. Es posible que esto le cause problemas para caminar, asir objetos o hacer otras tareas. El lado del cuerpo afectado es el opuesto al lado del cerebro que se dañó como consecuencia del ataque cerebral.
  • Dolor y rigidez articular. Una persona que tiene un brazo muy débil podría sentir dolor en el hombro causado por una articulación trabada o rígida. El movimiento de la articulación es esencial para evitar que esta se "paralice" y para asegurarse de que usted pueda moverla fácilmente cuando recupere la fuerza.
  • Rigidez o espasmos musculares (espasticidad). Si usted tiene espasticidad, es posible que necesite ciertos medicamentos o inyecciones de sustancias que bloquean las reacciones nerviosas.
  • Problemas con su sentido del tacto o con su capacidad para sentir el calor y el frío. Es posible que también tenga problemas para calcular la posición de las partes del cuerpo.
  • Dolor, entumecimiento u hormigueo en las extremidades.
  • Problemas para empezar a moverse y coordinar los movimientos del cuerpo (apraxia).
  • Problemas para tragar y para comer (disfagia). Para obtener más información, vea disfagia. Vea también:
  • Problemas urinarios o intestinales. Es posible que tenga problemas para retener la orina (incontinencia urinaria) o problemas para vaciar la vejiga (retención urinaria). O es posible que tenga estreñimiento o problemas para controlar la evacuación del intestino. Aunque esto puede hacerle sentir avergonzado o desanimado, estas cuestiones no suelen ser permanentes. Para obtener más información, vea cómo manejar problemas de los intestinos y la vejiga después de un ataque cerebral.

Otros problemas implican la manera en que usted procesa la información y sus emociones. Estos incluyen:

  • Problemas del habla y del lenguaje. Estos problemas pueden afectar al habla, la lectura, la escritura o la comprensión del lenguaje hablado. La afasia es un problema que suele ser el resultado de algún daño en el lado izquierdo del cerebro, que es la región responsable del lenguaje. Es posible que algunas personas que tienen afasia no puedan comprender el lenguaje escrito ni el lenguaje hablado, leer ni escribir, ni expresar sus pensamientos. Para obtener información sobre cómo sobrellevar problemas de comunicación, vea cómo manejar problemas del habla y el lenguaje después de un ataque cerebral.
  • Problemas cognitivos y de memoria. Es posible que las partes del cerebro que controlan la conciencia, el aprendizaje y la memoria estén dañadas. Es posible que tenga problemas para concentrarse o para recordar. Es posible que sea difícil hacer planes, aprender nuevas actividades o hacer otras tareas complejas. Es posible que no pueda darse cuenta de los impedimentos físicos causados por el ataque cerebral. Para obtener más información, vea problemas de la memoria, cambios en la velocidad de actuación y cambios en el discernimiento después de un ataque cerebral.
  • Problemas con la percepción. Es posible que tenga problemas para calcular la distancia, el tamaño, la posición, la velocidad del movimiento, la forma y el modo en que las partes se relacionan con el todo. Algunas personas tienen problemas para reconocer las partes del cuerpo en el lado afectado. Esto es especialmente cierto para las personas que no tienen sensibilidad en el brazo o en la pierna afectados. Para obtener más información, vea cambios en la percepción después de un ataque cerebral.
  • Problemas de la vista. Podría tener problemas para ver en algunas o todas las áreas normales de la visión. Para obtener más información, vea problemas de la visión después de un ataque cerebral.
  • Problemas emocionales. El miedo, la ansiedad, el enojo, la tristeza, la frustración y la pena son comunes después de un ataque cerebral. La depresión es una afección importante que requiere tratamiento. Para obtener más información, vea cambios en las emociones y cómo reconocer y lidiar con la depresión después de un ataque cerebral.

Cómo recuperar lo que se perdió: los primeros pasos

El cerebro es un órgano extraordinario que tiene la capacidad de renovarse a sí mismo hasta cierto grado. Es posible que las zonas dañadas por un ataque cerebral puedan volver a funcionar. Y es posible que las partes del cerebro que no se vieron afectadas por el ataque cerebral puedan cumplir con las funciones de las partes dañadas, haciendo algunas de las tareas que anteriormente eran controladas por las zonas afectadas.

Gran parte de las mejoras en el funcionamiento motor —caminar, usar los brazos y las piernas— se produce en las primeras fases de la recuperación después de un ataque cerebral. Este es uno de los motivos por los cuales es tan importante comenzar la rehabilitación tan pronto como sea posible.

La primera etapa de la rehabilitación suele comenzar entre las 24 y las 48 horas después del ataque cerebral, en cuanto usted esté estable y mientras se encuentre en el hospital. Para la mayoría de las personas, la rehabilitación comienza con la meta de levantarse de la cama y sentarse en una silla. A medida que recupere gradualmente la fuerza y la función, las enfermeras o los terapeutas le ayudarán a recuperar las habilidades y a volver a aprender las tareas que se perdieron debido al ataque cerebral. La intensidad y el enfoque de la rehabilitación inicial variarán con cada persona. Es un proceso que se basa en sus propias necesidades. Si tiene otros problemas de salud (como una afección cardíaca, por ejemplo), es posible que deba ir un poco más despacio que alguien que estaba sano antes de tener el ataque cerebral.

Cuando esté listo para abandonar el hospital, es posible que continúe su tratamiento en un centro de rehabilitación. Esto podría hacerse en otra parte del hospital donde lo trataron por primera vez, en otro establecimiento o en el hogar si es seguro para usted y tiene el apoyo adecuado. Es posible que asista a un centro especializado de enfermería si no está listo o no es capaz de acudir a un centro de rehabilitación. Las personas que tienen el mayor deseo de mejorar y que tienen una buena red de apoyo integrada por familiares y amigos tendrán mayores probabilidades de mejorar con la rehabilitación, independientemente del lugar donde se lleve a cabo la rehabilitación.

Recuperarse después de un ataque cerebral puede ser muy frustrante. Es común enfrentar depresión y tener algunos contratiempos. Es posible que tenga considerables mejoras al principio y luego sienta que ha perdido algo de lo que obtuvo. Superar los problemas del habla y el lenguaje puede parecer un proceso muy lento, debido a que podría resultarle difícil medir su evolución. Es posible que tenga un profundo sentimiento de pena respecto de la pérdida de un estilo de vida activo anterior al ataque cerebral. Sin embargo, su equipo de rehabilitación después de un ataque cerebral está para ayudarle de todas las maneras posibles. Hablar de sus frustraciones con el equipo y su familia serán una parte importante de su recuperación.

Construir una red de apoyo fuera de su familia podría servirle de ayuda. Es posible que se ofrezcan grupos de apoyo en relación con los ataques cerebrales a través de la filial local de la Asociación Americana del Ataque Cerebral (American Stroke Association, una división de la Asociación Americana del Corazón [American Heart Association]) o de la Asociación Nacional del Ataque Cerebral (National Stroke Association). Estos grupos incluirán a las personas que están aprendiendo a sobrellevar muchas de las mismas cosas que usted y su familia están enfrentando. Los seres queridos que ayudan a cuidar de usted también se beneficiarán con las redes de apoyo. Pregúntele a su médico o a su equipo de rehabilitación sobre grupos de apoyo locales.

Cómo prevenir otro ataque cerebral

Hay muchas cosas que usted puede hacer para prevenir otro ataque cerebral. Estas incluyen tomar medicamentos y hacer cambios en su estilo de vida para mejorar su estado de salud general. Controlar otros factores de riesgo de ataque cerebral, como la presión arterial alta, también es importante.

Inquietudes del cuidador

El cuidado de un ser querido que ha tenido un ataque cerebral puede ser difícil por muchas razones. Es posible que tema que su ser querido tenga otro ataque cerebral o que este no pueda aceptar ni superar las discapacidades. Es posible que le preocupe no estar preparado para cuidar de alguien que ha tenido un ataque cerebral recientemente. O es posible que tenga sus propias inquietudes relacionadas con su salud, lo que hace difícil que usted cuide de otra persona. También es posible que se deprima por perder el estilo de vida que disfrutaba anteriormente con su ser querido. Y es posible que se preocupe por los costos de la rehabilitación y la pérdida de ingresos.

Antes de que su ser querido regrese a casa, el equipo de rehabilitación los entrenará a usted o a otros familiares para ayudar con la terapia. Es posible que aprenda a ayudar a su ser querido a levantarse después de una caída, a vestirse, a ir al baño, a comer y a hacer otras actividades. Si tiene sus propias inquietudes relacionadas con la salud, que le impiden ayudar, es posible que necesite ayuda en el hogar o que su ser querido necesite ir a un hogar para ancianos o a un establecimiento de vivienda asistida. Sin embargo, incluso cuando no pueda brindar ayuda física, su amor y su apoyo seguirán siendo claves para la recuperación de su ser querido.

Su equipo de rehabilitación puede proporcionarle información sobre recursos comunitarios locales, tales como asistencia domiciliaria. También es posible que puedan proporcionarle consejos sobre la cobertura de seguro.

Aquí encontrará formas en las que puede ayudar a la recuperación de su ser querido:

  • Bríndele apoyo y aliento por participar en el programa de rehabilitación.
  • Visite a su ser querido y hable con él con frecuencia. Anime a su ser querido a hacer actividades, como jugar un juego con usted. Manténgase en contacto con los amigos de su ser querido tanto como sea posible y anímelos a que lo visiten.
  • Participe en programas educativos y asista a sesiones de rehabilitación en la mayor medida posible.
  • Ayude a su ser querido a aprender y a practicar nuevas habilidades.
  • Averigüe lo que su ser querido puede hacer por sí solo y aquello en lo que necesita ayuda. Evite hacer cosas para su ser querido que él pueda hacer sin ayuda.

También necesitará cuidar su propio bienestar.

  • Coma bien, descanse lo suficiente y tómese tiempo para hacer actividades que disfruta. Salga de la casa en la mayor medida posible.
  • Asegúrese de no ignorar su propia salud mientras esté cuidando de su ser querido. No intente hacer todo por sí solo. Siga asistiendo a sus visitas médicas y asegúrese de tomar sus propios medicamentos en forma regular. Pida ayuda a otros familiares. Averigüe si reúne los requisitos para acceder a un centro diurno para adultos o a visitas de atención médica en el hogar para que le ayuden con la rehabilitación.
  • Busque un grupo de apoyo adonde concurrir. Puede encontrarlos a través de las filiales locales de la Asociación Americana del Ataque Cerebral (American Stroke Association, una división de la Asociación Americana del Corazón [American Heart Association]) o de la Asociación Nacional del Ataque Cerebral [National Stroke Association]). También, consulte con el equipo de rehabilitación para obtener ideas y ayuda.
  • Programe tomarse tiempo para sí mismo. Salga de la casa y haga actividades que disfrute, haga diligencias o salga de compras.

Para obtener más información sobre cómo cuidar a alguien, vea el tema Consejos para el cuidador.

  • Ataque cerebral: ¿Debería trasladar a mi ser querido a un lugar donde reciba atención a largo plazo?

Cómo prevenir otro ataque cerebral

Usted puede ayudar a prevenir un ataque cerebral si controla factores de riesgo y trata otras afecciones médicas que pueden conducir a un ataque cerebral.

Sepa cuál es su riesgo de tener un ataque cerebral

Su médico puede ayudarle a conocer su riesgo. Estos son algunos de los factores de riesgo comunes para un ataque cerebral:

  • Tener fibrilación auricular.
  • Fumar.
  • Tener presión arterial alta.
  • Tener colesterol alto.
  • Tener diabetes.
  • Tener sobrepeso.
  • No hacer ejercicio en forma regular.
  • Beber grandes cantidades de alcohol.

Hágase tratar cualquier problema de salud que tenga

  • Controle la presión arterial alta o el colesterol alto colaborando con su médico.
  • Controle la diabetes. Mantenga los niveles de azúcar en la sangre dentro de los límites ideales para usted.
  • Si su médico le recomienda que tome aspirina o un anticoagulante, tómelo. Esto puede ayudar a prevenir un ataque cerebral.
  • Tome su medicamento exactamente como se lo recetaron. Llame a su médico si cree que está teniendo un problema con el medicamento.

Adopte un estilo de vida saludable

  • No fume ni permita que otros fumen a su alrededor. Para obtener más información, vea el tema Cómo dejar de fumar.
  • Limite el alcohol a 2 bebidas al día si es hombre y 1 bebida al día si es mujer.
  • Manténgase en un peso saludable. Tener sobrepeso aumenta las probabilidades de que empiece a tener presión arterial alta, problemas del corazón y diabetes. Estas afecciones hacen que sea más probable que tenga un ataque cerebral.
  • Esté activo. Pregúntele a su médico y a su equipo de rehabilitación qué tipo y nivel de actividad es seguro para usted. Ellos pueden ayudarle a crear un programa de ejercicios que sea adecuado para usted. Un programa podría incluir entre ½ hora y 1½ horas a la semana de ejercicio moderado. Una forma de lograr esto es hacer actividad física 30 minutos al día, entre 1 y 3 días a la semana. Está bien hacer actividad en bloques de 10 minutos a lo largo del día.
  • Coma alimentos saludables para el corazón. Estos incluyen frutas, verduras, alimentos altos en fibra y alimentos que tengan bajo contenido de sodio, grasas saturadas y grasas trans. Coma pescado al menos 2 veces cada semana. Los pescados aceitosos, que contienen ácidos grasos omega-3, son los mejores. Estos pescados incluyen el salmón, la caballa, la trucha, el arenque y las sardinas.

Si usted o su ser querido ya ha tenido un ataque cerebral, usted necesita prestar mucha atención a los síntomas de otro ataque cerebral. Con atención médica inmediata y tratamiento se puede ayudar a prevenir o reducir daño cerebral permanente. Si se presentan de modo repentino señales de un ataque cerebral, llame al 911 u otros servicios de emergencia inmediatamente. Para obtener más información sobre síntomas de ataque cerebral y cuándo buscar atención médica, vea el tema Ataque cerebral.

Medicamentos para prevenir los ataques cerebrales

Su médico probablemente le recete varios medicamentos después de que ha tenido un ataque cerebral. Suelen usarse medicamentos para prevenir la formación de coágulos de sangre, porque los coágulos de sangre pueden causar accidentes isquémicos transitorios (TIA, por sus siglas en inglés) y ataques cerebrales.

Los tipos de medicamentos que previenen la formación de coágulos son:

  • Medicamentos anticoagulantes.
  • Medicamentos antiplaquetarios.

Los medicamentos para bajar el colesterol y la presión arterial también se usan para prevenir TIA y ataques cerebrales.

Para obtener más información sobre medicamentos que se recetan después de un ataque cerebral, vea Ataque cerebral.

Medicamentos para la rehabilitación después de un ataque cerebral

Después de un ataque cerebral, es posible que necesite medicamentos para disminuir el dolor, tratar la depresión o para ayudar a acelerar su recuperación.

Usted puede tomar medicamentos para otros problemas, como, por ejemplo, de sueño o ansiedad. Estos medicamentos pueden incluir:

  • Medicamentos para dormir. Después de un ataque cerebral, es posible que tenga problemas para dormir (insomnio). Su médico puede recetar diferentes tipos de medicamentos para ayudarle a dormir, como los antidepresivos trazodona y mirtazapina (Remeron), los cuales tienen la sedación como efecto secundario. Otros medicamentos para dormir, como el hidrato clórico, podrían ser eficaces, pero podrían generar adicción.
  • Medicamentos para la ansiedad. Podrían usarse varios medicamentos para tratar la ansiedad después de un ataque cerebral. Las benzodiazepinas, como el lorazepam (Ativan, por ejemplo), son tranquilizantes menores o sedantes que desaceleran el sistema nervioso central. El alprazolam (Xanax, por ejemplo) y la buspirona son medicamentos contra la ansiedad que alivian la ansiedad y el nerviosismo.
  • Medicamentos para la agitación. Los médicos usan varios tipos de medicamentos para tratar la agitación. Los neurolépticos, como haloperidol (Haldol, por ejemplo), risperidona (Risperdal, por ejemplo) y olanzapina (Zyprexa, por ejemplo), son medicamentos antipsicóticos que funcionan cambiando los efectos de las sustancias químicas del cerebro. El anticonvulsivo ácido valproico (Depakote, por ejemplo) se usa a veces para tratar la agitación.

Vea también el tema Espasticidad.

Cómo adaptarse después de un ataque cerebral

Después de un ataque cerebral, la rehabilitación no solo se concentrará en ayudarle a recuperarse de sus discapacidades, sino también a realizar cambios en su estilo de vida, en el hogar, en el trabajo y en sus relaciones. Los cambios que haga dependerán de cómo le afectó el ataque cerebral su capacidad para funcionar.

Su equipo de rehabilitación puede ayudarle a aprender a adaptarse, mantenerse seguro y regresar a sus actividades diarias.

En un programa de rehabilitación, usted puede aprender a utilizar dispositivos de asistencia o dispositivos ortopédicos. Estos son instrumentos que le ayudan a asir objetos, abrir y cerrar cosas, transferir el peso cuando cambia de posición o caminar. Puede ser difícil acostumbrarse a usar estos dispositivos, pero le ayudarán a retomar su vida diaria y sus tareas cotidianas.

Su equipo de rehabilitación puede darle consejos sobre cómo volver a hacer sus actividades diarias en forma segura. Para obtener más información, vea:

Créditos

Revisado: 6 agosto, 2023

Autor: El personal de Healthwise
Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.

La Enciclopedia de salud contiene información general de salud. No todos los tratamientos o servicios descritos son beneficios cubiertos para los miembros de Kaiser Permanente ni se ofrecen como servicios de Kaiser Permanente. Para obtener una lista de beneficios cubiertos, consulte su Evidencia de cobertura o Descripción resumida del plan. Para los tratamientos recomendados, consulte con su proveedor de atención médica.