Los programas de cuidados para enfermos terminales comprenden servicios médicos, apoyo emocional y recursos espirituales para personas que se hallan en las últimas etapas de una enfermedad incurable, como el cáncer o la enfermedad de Alzheimer. Los programas de cuidados para enfermos terminales también ayudan a los familiares a ocuparse de los detalles prácticos y los desafíos emocionales de cuidar a una persona que se está muriendo.
Los servicios de programas para enfermos terminales son ofrecidos por cuidadores que pueden incluir profesionales de la salud, voluntarios y consejeros espirituales. Los servicios suelen incluir:
- Atención médica básica con una concentración en el control del dolor y de los síntomas.
- Acceso a un miembro del equipo de cuidados para enfermos terminales las 24 horas del día, todos los días de la semana.
- Suministros y equipamiento médico según se necesiten.
- Asesoría psicológica y apoyo social. Estos servicios están disponibles, según se necesiten, tanto para la persona que recibe cuidados para enfermos terminales como para cualquier miembro de su familia.
- Orientación con las cuestiones difíciles, pero normales, de la finalización de la vida y necesidad de cierre.
- Un descanso (servicio de relevo) para cuidadores, familiares y otros que le brinden atención en forma regular.
- Asistencia voluntaria, como preparación de comidas o recados.