Una crisis epiléptica es la respuesta del cuerpo y el cerebro a estallidos repentinos de actividad eléctrica anormal en el cerebro. Las crisis pueden afectar el control muscular, movimiento, habla, visión o estado de conciencia de una persona.
Existen dos tipos de crisis.
- Las crisis generalizadas comienzan en toda la superficie del cerebro y pueden involucrar a todo el cuerpo. No puede identificarse un lugar específico del cerebro como el origen de estas crisis. La causa de las crisis generalizadas se presume que es genética. La epilepsia que causa crisis generalizadas es más común en niños que en adultos. Las crisis generalizadas suelen tratarse con medicamentos. Pero la cirugía puede ser útil en algunos casos.
- Las crisis focales (a veces llamadas crisis parciales) comienzan en un lugar específico del cerebro. La causa de estas crisis no siempre es evidente, pero a menudo resultan de una lesión grave a la cabeza, ataque cerebral, tumor cerebral, infecciones cerebrales, tejido cicatricial y otras enfermedades que afectan el cerebro. Las crisis focales pueden afectar la conciencia y solo un lado o parte del cuerpo o pueden comprender todo el cuerpo. Ocurren comúnmente en adultos con epilepsia, pero los niños también pueden llegar a tenerlas. Este tipo de crisis suele tratarse con medicamentos. Pero la cirugía para extraer la zona del cerebro afectada o interrumpir ciertas vías es una opción para algunas personas.