Las drogas ilegales son aquellas que no han sido recetadas por un médico o compradas en la farmacia. A veces se llaman "drogas callejeras". Algunos ejemplos son la heroína (también llamada caballo, jaco o falopa), la cocaína (coca o crack), el PCP, el éxtasis (MDMA), el Rohypnol (droga de la violación) y la metanfetamina (speed o anfeta).
Los efectos de las drogas ilegales pueden ser difíciles de predecir porque:
- Las personas responden de manera diferente a las mismas drogas.
- La concentración o la potencia de la droga puede ser indeterminada.
- Pueden contener sustancias desconocidas o productos químicos peligrosos, como el fentanilo. No existe un control de calidad para las drogas callejeras como el que se exige para los medicamentos con receta.
- Pueden interactuar con otras drogas o con el alcohol de forma nociva o imprevisible.