Semanas 34 a 36 del embarazo: Instrucciones de cuidado

Cuatro consejos para las semanas 34 a 36 del embarazo

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  Elija qué tipo de alivio del dolor desea durante el trabajo de parto. Puede elegir entre varios tipos, incluyendo opciones medicinales y no medicinales. Es posible que desee utilizar varios tipos de alivio del dolor.

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  Sepa cómo pueden ayudar los medicamentos con el dolor durante el trabajo de parto. Algunos medicamentos disminuyen la ansiedad y ayudan con parte del dolor. Otros adormecen la parte inferior del cuerpo para que sienta menos dolor.

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  Dígale al médico qué analgésico prefiere. Hágalo antes de que empiece el trabajo de parto o en las primeras fases del mismo. Es posible que pueda cambiar de opinión durante el trabajo de parto.

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  Conozca las etapas del trabajo de parto.

  • La primera etapa incluye las fases temprana (latente) y activa del trabajo de parto. Las contracciones comienzan en los primeros momentos del trabajo de parto. Durante el trabajo de parto activo, las contracciones se hacen más fuertes, duran más y ocurren con más frecuencia. Y el cuello uterino se abre más rápidamente.
  • La segunda etapa comienza cuando está lista para empujar. Durante esta etapa, nace su bebé.
  • Durante la tercera etapa, normalmente tendrá algunas contracciones más para expulsar la placenta.

La atención de seguimiento es una parte clave de su tratamiento y seguridad. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas y llame al médico si está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de sus pruebas y mantener una lista de los medicamentos que toma.

¿Cuándo debe pedir ayuda?

Llame al 911 en cualquier momento que crea que pueda necesitar atención de emergencia. Por ejemplo, llame si:

• Tiene sangrado vaginal intenso. Ha empapado una o más toallas sanitarias en una hora y la hemorragia no disminuye.
• Tiene un dolor repentino e intenso en el abdomen que no desaparece.
• Tiene dolor en el pecho, le falta el aire o tose sangre.
• Se desmayó (perdió el conocimiento).
• Tiene una convulsión.
• Ve o siente el cordón umbilical.
• Cree que está a punto de dar a luz y no puede llegar de forma segura al hospital o al centro de partos.

Llame al médico ahora u obtenga atención médica inmediata si:

• Tiene sangrado vaginal.
• Tiene dolor de abdomen.
• Tiene fiebre.
• Está mareada o aturdida, o siente que puede desmayarse.
• Tiene señales de un coágulo de sangre en la pierna (llamado trombosis venosa profunda), como:
  • Dolor en la pantorrilla, la parte posterior de la rodilla, el muslo o la ingle.
  • Hinchazón en la pierna o la ingle.
  • Un cambio de color en la pierna o la ingle. La piel puede estar rojiza o violácea.
• Tiene síntomas de preeclampsia, como:
  • Hinchazón repentina de la cara, las manos o los pies.
  • Nuevos problemas de visión (como oscurecimiento, visión borrosa o visión de manchas).
  • Un fuerte dolor de cabeza que no desaparece.
• Tiene una salida repentina o un goteo lento de líquido por la vagina. Esto puede significar que ha roto aguas.
• Ha tenido contracciones regulares durante una hora. Esto significa que ha tenido al menos 6 contracciones en 1 hora, incluso después de cambiar de postura y beber líquidos.
• Nota que su bebé ha dejado de moverse o se mueve menos de lo normal.
• Tiene síntomas de una infección de las vías urinarias. Estos pueden incluir:
  • Dolor o ardor al orinar.
  • Necesidad frecuente de orinar sin poder expulsar mucha orina.
  • Dolor en la zona lumbar (por debajo de la caja torácica y por encima de la cintura).
  • Sangre en la orina.

Esté atenta a cualquier cambio en su estado de salud y póngase en contacto con el médico si:

• Tiene flujo vaginal que huele mal.
• Se siente triste, ansiosa o desesperanzada durante más de unos días.
• Tiene cambios en la piel, como salpullidos, comezón o un color amarillento en la piel.
• Tiene otras preocupaciones sobre el embarazo.