La punción lumbar es un procedimiento en el cual se inserta una aguja en el canal espinal para medir la presión y obtener una muestra de líquido cefalorraquídeo (CSF, por sus siglas en inglés), que es el líquido incoloro que rodea al cerebro y a la médula espinal. También se puede realizar el procedimiento para inyectar anestésicos, medicamentos o material de contraste (para radiografías de la columna vertebral) en el líquido cefalorraquídeo o para drenar líquidos que se acumulan como resultado de determinadas afecciones médicas.
Las muestras de líquido obtenidas de una punción lumbar pueden ser analizadas para detectar señales de infección (como meningitis), inflamación, cáncer o sangrado en la zona alrededor del cerebro o la médula espinal.
A veces, una punción lumbar también se llama drenaje espinal.