Instrucciones de cuidado
La prótesis de cadera de su hijo es una articulación grande con bastante estabilidad. Normalmente se necesita una caída fuerte, un accidente de automóvil o algo de gran fuerza para que el fémur se salga de su cavidad (luxarse). Pero como su hijo ha tenido una artroplastia de cadera (cirugía de reemplazo de cadera), la cadera se puede desplazar de su posición con mayor facilidad. Esto es más común durante los primeros meses después de la operación.
El médico volverá a colocarle a su hijo la cadera en su sitio. Lo que suceda después depende de la edad de su hijo. Un niño mayor podría tener que usar un dispositivo de ayuda para caminar o un dispositivo ortopédico de cadera por varias semanas o meses mientras sana la cadera. Es posible que se ponga a un niño pequeño en un yeso pelvipédico. Esto evitará que la cadera se mueva.
El ejercicio y la fisioterapia pueden ayudar a que la cadera de su hijo se fortalezca y vuelva a moverse con normalidad. Usted también puede ayudar a que su hijo mejore con descanso y tratamiento en el hogar.
Se le puede haber dado un sedante a su hijo para ayudarle a relajarse. Su hijo podría estar tambaleante después de la sedación. Se necesita tiempo (a veces algunas horas) hasta que los efectos del medicamento desaparezcan. Los efectos secundarios comunes de la sedación incluyen náuseas, vómitos y sensación de somnolencia o malhumor.
El médico ha examinado minuciosamente a su hijo, pero pueden presentarse problemas más tarde. Si usted nota cualquier problema o síntomas nuevos, obtenga tratamiento médico de inmediato.
La atención de seguimiento es una parte clave del tratamiento y la seguridad de su hijo. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si su hijo está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de los exámenes de su hijo y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?
- Si su médico puso a su hijo en un yeso pelvipédico o un dispositivo ortopédico, asegúrese de seguir todas las indicaciones que le dé su médico.
- Asegúrese de que su hijo siga las precauciones de seguridad que le dé el médico para mantener la cadera centrada en su cavidad durante el período de sanación.
- Haga que su hijo mantenga las rodillas y los dedos de los pies apuntando hacia adelante cuando se siente, camine o permanezca de pie.
- Su hijo no debería sentarse con las piernas cruzadas.
- Su hijo no debería inclinarse desde la cintura a más de 90°. Tenga cuidado cuando su hijo se incline o se mueva en la cama. Haga que mantenga las piernas lo más rectas posible.
- Haga que su hijo descanse la cadera tanto como sea posible. Necesitará cambiar sus actividades para evitar movimientos que le irriten la cadera.
- Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las indicaciones de la etiqueta.
- Si el médico le dio a su hijo un analgésico recetado, déselo según las indicaciones.
- Si su hijo no está tomando un analgésico recetado, pregúntele a su médico si su hijo puede tomar uno de venta libre.
- Si la cadera de su hijo está hinchada, colóquele hielo o una compresa fría durante 10 a 20 minutos cada vez. Trate de hacerlo cada 1 o 2 horas durante los siguientes 3 días (cuando su hijo esté despierto) o hasta que baje la hinchazón. Póngale a su hijo un paño delgado entre el hielo y la piel.
- Si el médico le indicó a su hijo ejercicios para hacer en el hogar, ayúdele a hacerlos exactamente según las indicaciones.
- No permita que su hijo haga nada que le empeore el dolor.
¿Cuándo debe pedir ayuda?
Llame al 911 en cualquier momento que considere que su hijo pueda necesitar atención de urgencia. Por ejemplo, llame si:
- Su hijo tiene dificultad para respirar. Los síntomas pueden incluir:
- Uso de los músculos abdominales para respirar.
- Hundimiento del pecho o agrandamiento de las fosas nasales mientras su hijo se esfuerza por respirar.
- Su hijo está muy somnoliento y usted tiene dificultades para despertarlo.
- Su hijo se desmaya (pierde el conocimiento).
Llame a su médico ahora mismo o busque atención médica inmediata si:
- Su hijo tiene náuseas o vómito nuevos o peores.
- Su hijo tiene señales de que la cadera pudiera estar luxada otra vez. Estas señales incluyen:
- Dolor intenso.
- Una pierna torcida que da la impresión de que el hueso de la cadera está fuera de lugar.
- No poder enderezar la pierna.
- La pierna o el pie de su hijo se vuelve frío o cambia de color.
- Su hijo no puede sentir o mover la pierna.
Preste especial atención a los cambios en la salud de su hijo y asegúrese de comunicarse con el médico si:
- Su hijo tiene un dolor nuevo o peor.
- Su hijo no mejora como se esperaba.
- Su hijo tiene problemas con un yeso o dispositivo ortopédico.
Revisado: 31 julio, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.