Gangliones: Instrucciones de cuidado

Generalidades

Un ganglión es un pequeño saco, o quiste, lleno de un líquido claro parecido a la gelatina. Un ganglión puede verse como un bulto en la mano o la muñeca. También puede aparecer en los pies, los tobillos, las rodillas o los hombros. No es cáncer. Los gangliones pueden desarrollarse en la zona protectora, o cápsula, que rodea la articulación. También pueden crecer sobre la cubierta protectora que recubre los tendones, similares a cordones, que conectan los músculos al hueso. Los gangliones pueden ser dolorosos o causar entumecimiento si comprimen un nervio.

Muchos gangliones no necesitan tratamiento y suelen desaparecer por sí solos. Pero si un ganglión es doloroso, se agranda, causa entumecimiento o restringe su actividad, su médico podría drenarlo con una aguja y una jeringa o extraerlo con una cirugía menor.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Use una férula (tablilla) para la muñeca o el dedo por varias semanas. Esto puede ser todo lo que se necesita para que se encoja el ganglión y desaparezca por sí solo. Asegúrese de que la férula no esté muy apretada. Entumecimiento, hormigueo, dolor o frío en la mano son señales de que tiene que aflojar la férula.
• No rompa un ganglión con un libro u otro objeto pesado. Podría fracturarse un hueso o, de otro modo, lastimarse la muñeca al probar este remedio tradicional, y el ganglión podría retornar de todas maneras.
• No trate de drenar el líquido pinchando el ganglión con un alfiler u otro objeto punzante. Podría provocarse una infección.
• Si el ganglión se revienta por sí solo y la piel se abre:
  • Cubra la herida con una capa delgada de vaselina y un vendaje no adherente.
  • Aplíquese más vaselina y cámbiese la venda según sea necesario.