Dejar el consumo del tabaco sin humo: Instrucciones de cuidado

Generalidades

Hay muchas razones para dejar de usar tabaco sin humo. Estos productos contienen nicotina, que es adictiva. El tabaco sin humo puede causar graves problemas de salud, como:

• Manchas blancas o llagas rojas en la boca que pueden convertirse en cáncer de boca (oral) que afecta el labio, la lengua o la mejilla.
• Pérdida de dientes y otros problemas dentales.
• Enfermedad de las encías. Es posible que las encías se retiren de los dientes y no vuelvan a crecer.

Las personas que usan tabaco anhelan la nicotina que contiene. Dejarlo es mucho más difícil que simplemente cambiar un hábito. Su organismo debe dejar de desear la nicotina. Dejar el hábito es difícil, pero usted puede hacerlo. Hay muchas herramientas disponibles para las personas que quieren dejar el hábito. Puede encontrar que la combinación de herramientas funciona mejor para usted.

Hay varios pasos para dejar de consumir tabaco. El médico puede ayudarle a establecer el plan que mejor se adapte a sus necesidades. Es posible que desee asistir a un programa para dejar el tabaco. Cuando elija un programa, busque uno que haya demostrado su éxito. Pídale ideas al médico. Aumentará en gran medida sus posibilidades de éxito si toma medicamentos y recibe asesoramiento o se une a un programa para dejar de consumir tabaco.

Algunos de los cambios que siente cuando deja el tabaco por primera vez son incómodos. Al principio, su organismo echará de menos la nicotina y es posible que se sienta irritable y malhumorado. Es posible que tenga dificultad para dormir o concentrarse. Los medicamentos pueden ayudarle a lidiar con estos síntomas. Puede tener dificultades para cambiar sus hábitos y costumbres. Y las ansias de consumir tabaco pueden continuar por un tiempo.

Esto puede ser mucho con lo que lidiar, pero no se rinda. Se sentirá mejor.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Pídales ayuda a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo. Tiene más probabilidades de dejar el hábito si cuenta con ayuda y apoyo.
• Únase a un grupo de apoyo para personas que están intentando dejar de consumir tabaco sin humo.
• Establezca una fecha para dejar el hábito. Elija la fecha con cuidado, de modo que no coincida con una fecha importante ni un momento de tensión. Después de dejar el hábito, no consuma tabaco sin humo ni siquiera una vez. Elimine todas las escupideras, latas y bolsas después de su último uso. Limpie su casa y su ropa para que no huelan a tabaco.
• Aprenda a ser una persona que no usa tabaco sin humo. Piense en maneras de evitar aquello que lo hace recurrir al tabaco.
  • Aprenda algunas maneras de manejar las ganas de fumar, como llamar a un amigo o salir a caminar. Las ganas de fumar a menudo se van.
  • Evite las situaciones que más lo exponen al riesgo de usar el tabaco sin humo. Para algunas personas, es difícil pasar tiempo con amigos sin masticar ni aspirar tabaco. Otras quizás podrían evitar salir a tomar un café con los compañeros de trabajo que fuman o usan tabaco sin humo.
  • Modifique su rutina diaria. Tome otro camino para llegar al trabajo o vaya a comer a un lugar diferente.
• Reduzca el estrés. Relájese o libere tensiones haciendo una actividad que disfrute, como leer un libro, tomar un baño caliente o practicar jardinería.
• Hable con su médico o farmacéutico sobre la terapia de reemplazo de la nicotina. Usted continúa recibiendo nicotina, pero no utiliza tabaco. Los productos de reemplazo de la nicotina lo ayudan a reducir lentamente la cantidad de nicotina que necesita. Muchos de estos productos son de venta libre. Esto incluye parches, chicles, tabletas o pastillas para chupar e inhaladores de nicotina.
• Pregúntele a su médico sobre bupropión (Wellbutrin) o vareniclina (Chantix), que son medicamentos recetados. No contienen nicotina. Lo ayudan mediante la reducción de los síntomas de abstinencia, como el estrés y la ansiedad.
• Haga ejercicio de manera regular. Los hábitos saludables ayudarán a su organismo a superar las ansias de nicotina.
• Prepárese para seguir intentando. La mayoría de las personas no tienen éxito las primeras veces que intentan dejarlo. No se enoje consigo mismo si vuelve a usar tabaco. Prepare una lista de lo que aprendió y piense en cuándo desea volver a intentarlo, como, por ejemplo, la próxima semana, el próximo mes o el próximo año.