La recuperación de su hijo
Puede anticipar algo de dolor e hinchazón alrededor del corte (incisión) que hizo el médico. Esto debería mejorar al cabo de unos pocos días. Pero es normal que su hijo tenga algo de dolor por 2 o 3 semanas después de la cirugía. El dolor leve puede durar hasta 6 semanas.
El médico puede darle instrucciones específicas sobre cuándo su hijo puede volver a hacer actividades normales, como practicar deportes y volver a la escuela o al trabajo.
Esta hoja de cuidados le da una idea general del tiempo que su hijo tardará en recuperarse. Pero cada niño se recupera a un ritmo diferente. Siga los pasos siguientes para ayudar a su hijo a recuperarse lo antes posible.
¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?
Actividad
- Haga que su hijo descanse cuando se sienta fatigado.
- Aumente la actividad de su hijo según las recomendaciones de su médico. Hacer actividad estimula la circulación sanguínea y ayuda a prevenir la neumonía y el estreñimiento. Por lo general, está bien que su hijo ejercite otras partes del cuerpo tan pronto como se sienta lo suficientemente bien.
- Ayude a su hijo a evitar cargar peso sobre el hueso reparado hasta que su médico diga que puede hacerlo.
- Es probable que su hijo tenga que ausentarse de la escuela o el trabajo por entre 1 y 2 semanas.
- Su hijo puede ducharse al cabo de 24 a 48 horas después de la cirugía. Cuando su hijo se duche, asegúrese de que mantenga secos el vendaje y las incisiones. Si su hijo tiene un yeso, cúbralo con una capa plástica para que no se moje. Podría ser de ayuda que su hijo se siente en un banquito mientras se ducha.
- Su hijo no debería darse un baño de inmersión, nadar, usar una bañera de hidromasaje ni sumergir en agua la extremidad afectada hasta que sane la incisión. Por lo general, esto tarda de 1 a 2 semanas.
Alimentación
- Su hijo puede seguir su dieta normal. Si su hijo tiene malestar estomacal, pruebe alimentos suaves y bajos en grasa, como arroz sin condimentar, pollo asado, pan tostado y yogur.
Medicamentos
- El médico le dirá si su hijo puede comenzar a tomar los medicamentos de nuevo y cuándo puede hacerlo. El médico también le dará instrucciones con respecto a cualquier medicamento nuevo.
- Si su hijo toma aspirina o algún otro medicamento que previene la formación de coágulos de sangre, asegúrese de hablar con su médico. El médico le dirá si su hijo puede comenzar a tomar ese medicamento de nuevo y cuándo puede hacerlo. Asegúrese de que entiende exactamente lo que el médico quiere que haga.
- Si el médico le recetó un analgésico a su hijo, déselo según las indicaciones.
- Si su hijo no está tomando un analgésico recetado, pregúntele al médico si puede tomar uno de venta libre.
- Si su médico le recetó antibióticos, déselos a su hijo según lo indicado. No deje de dárselos solo porque su hijo se sienta mejor. Su hijo debe tomar todos los antibióticos hasta terminarlos.
Cuidado de la incisión
- Si su hijo tiene tiras de cinta adhesiva en la incisión que hizo el médico, déjeselas por una semana o hasta que se caigan.
- Si su hijo no tiene un yeso, limpie la incisión dos veces al día después de que su médico le permita a su hijo quitarse la venda. Use solo agua y jabón para limpiar la incisión a menos que su médico le haya dado diferentes indicaciones. No use agua oxigenada ni alcohol. Pueden retrasar la sanación.
Ejercicio
- Ayude a su hijo a seguir las instrucciones de su médico o fisioterapeuta acerca de qué ejercicios debe hacer. Estos ejercicios ayudarán a mantener fuertes los músculos y flexibles las articulaciones de su hijo mientras sana el hueso.
- Haga que su hijo mueva con frecuencia los dedos de la extremidad que se haya lesionado. Esto ayuda a reducir la hinchazón y la rigidez.
Hielo y elevación
- Eleve el brazo o la pierna que su hijo se haya lesionado sobre una almohada mientras este se aplica hielo o en cualquier momento en que se siente o se acueste durante 1 o 2 semanas después de la cirugía. Trate de que mantenga la extremidad por encima del nivel del corazón. Esto ayudará a aliviar la hinchazón y el dolor.
Otras instrucciones
- Si su hijo tiene un yeso o una férula:
- Evite que se moje.
- Si su hijo tiene una tablilla de quita y pon, pregúntele a su médico si está bien que se la quite para bañarse. El médico podría indicarle que su hijo la use todo el tiempo que sea posible. Tenga cuidado de no colocar la tablilla demasiado apretada.
- No deje que su hijo introduzca objetos como lápices o ganchos de ropa en el yeso o la tablilla para rascarse la piel.
- No deje que su hijo se ponga talco en el yeso o la tablilla para aliviar la comezón en la piel.
- Nunca corte ni altere el yeso o la tablilla de su hijo.
La atención de seguimiento es una parte clave del tratamiento y la seguridad de su hijo. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si su hijo está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de los exámenes de su hijo y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cuándo debe pedir ayuda?
Llame al 911 en cualquier momento que considere que su hijo necesita atención de urgencia. Por ejemplo, llame si:
- Su hijo se desmaya (pierde el conocimiento).
- Su hijo tiene mucha dificultad para respirar.
- Su hijo tiene dolor repentino en el pecho, le falta el aire o tose sangre.
Llame a su médico ahora mismo o busque atención médica inmediata si:
- Su hijo tiene dolor que no mejora después de tomar un analgésico.
- Los dedos de la extremidad lesionada de su hijo están fríos o pálidos o cambian de color.
- Su hijo tiene hormigueo, debilidad o entumecimiento en los dedos de la mano o del pie.
- Su hijo no puede mover los dedos de la mano o del pie.
- Su hijo siente que el yeso o la tablilla le aprieta demasiado.
- Su hijo siente ardor o picazón en la piel cubierta por el yeso o la tablilla.
- Su hijo tiene síntomas de infección, tales como:
- Aumento del dolor, la hinchazón, la temperatura o el enrojecimiento.
- Vetas rojizas que salen de la incisión.
- Pus que sale de la incisión.
- Fiebre.
- Su hijo tiene secreción o mal olor que le sale del yeso o de la tablilla.
- Su hijo tiene señales de un coágulo de sangre en la pierna (llamado trombosis venosa profunda), tales como:
- Dolor en la pantorrilla, el muslo o la ingle, o detrás de la rodilla.
- Hinchazón en la pierna o la ingle.
- Un cambio de color en la pierna o la ingle. La piel podría estar enrojecida o morada, según cuál sea el color de piel normal de su hijo.
Preste especial atención a los cambios en la salud de su hijo y asegúrese de comunicarse con su médico si:
- Su hijo tiene problemas con la tablilla o el yeso.
Revisado: 31 julio, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
Comité de revisión clínica
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