Problemas del desarrollo: Pruebas

Generalidades

La Academia Americana de Pediatría recomienda pruebas del desarrollo para niños a los 9, 18 y 30 meses.^{nota 1} Se hacen pruebas específicas para el trastorno del espectro autista (TEA) a los 18 y 24 meses. El médico usará las pruebas de evaluación del desarrollo (cuestionarios) y luego revisará los resultados de su hijo. El médico comparará las habilidades de su hijo con los hitos normales de los niños de la misma edad.

En las visitas de control del niño sano, el médico se fijará si hay señales tempranas de problemas del desarrollo. Estos pueden afectar cómo un niño puede hablar, moverse, concentrarse y relacionarse socialmente.

Un niño que tiene señales de retrasos del desarrollo debería ser evaluado. Estas señales incluyen:

• No balbucear, señalar ni hacer otros gestos para cuando tiene 12 meses de vida.
• No decir palabras sueltas para los 16 meses.
• No decir frases espontáneas de dos palabras para los 24 meses, a excepción de frases repetidas (ecolalia).
• No caminar a los 18 meses.
• Cualquier pérdida de habilidades de lenguaje o sociales a cualquier edad.

Si no se observan señales evidentes de problemas en las pruebas de detección, la mayoría de los niños no necesitan más evaluación hasta la próxima visita de control del niño sano.

Los niños que tienen un hermano o hermana que tiene TEA deberían ser evaluados más a menudo. Además de los controles normales en cada cita de control del niño sano, estos niños necesitan ser evaluados para ver si tienen retrasos del lenguaje, habilidades sociales deficientes y otros problemas que pudieran ser una señal de TEA. Algunos niños podrían tener que ver a un pediatra especialista en desarrollo después de que tiene lugar la prueba de detección.

Todo aquel que presente problemas de relaciones sociales, aprendizaje o comportamiento debería ser evaluado.