Presbicia: Instrucciones de cuidado

Instrucciones de cuidado

La presbicia es una parte natural del envejecimiento. Cuando usted tiene alrededor de 40 años de edad, ocurren ciertos cambios en los ojos. El cristalino se vuelve más grueso. Los músculos alrededor del cristalino se debilitan. Y la luz que entra en el ojo se enfoca detrás de la retina en lugar de en ella.

Estos cambios dificultan leer y enfocar en cosas cercanas. Podría hacer que sea más difícil ver con poca luz o cuando está cansado. Usted también puede tener dolores de cabeza o fatiga visual.

Los anteojos o los lentes de contacto pueden ayudar. Si usted no usaba usted anteojos o lentes de contacto antes, es posible que pueda utilizar anteojos para leer que se pueden comprar sin receta. Pregúntele al médico de la vista (oftalmólogo) acerca de ellos.

Si ya usa anteojos o lentes de contacto, es posible que necesite una nueva receta. Esta receta tal vez deba cambiarse con tiempo si su visión empeora.

A veces, la presbicia se trata con cirugía.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

Reduzca la fatiga visual

• Use anteojos o lentes de contacto si el médico se los receta.
• Asegúrese de disponer de buena luz cuando lea, trabaje o estudie. Use una luz tenue de fondo además de una luz más directa.
• Elija libros con letras grandes. Y ajuste el tamaño de la letra en su computadora y en línea siempre que sea posible.
• Tome descansos frecuentes cuando haga cosas que supongan un esfuerzo para los ojos. Parpadee a menudo. Cada 20 minutos, dirija la mirada a algo que esté a 20 pies (6 metros) de distancia durante 20 segundos (la regla de "20-20-20"). Cierre y descanse los ojos cuando los sienta cansados o resecos.
• Evite el reflejo de las pantallas de televisión y computadoras. Coloque la televisión o la computadora donde las luces no se reflejen en la pantalla. A algunas personas les es más fácil trabajar en una computadora en una habitación más oscura. También puede probar pantallas antirreflectantes especiales que se adaptan al monitor de la computadora.

Mantenga sus ojos saludables

• Hágase exámenes de la vista tan a menudo como su médico se lo recomiende.
• Use anteojos de sol. Compre aquellos que bloqueen los rayos ultravioleta A y B (UVA y UVB).