Generalidades
Una mandíbula dislocada ocurre cuando la mandíbula inferior se separa de una o ambas articulaciones que conectan la mandíbula con la base del cráneo. Esto puede causar problemas incluso si la mandíbula vuelve a su sitio.
Una mandíbula dislocada puede ocurrir cuando su hijo se lesiona la cara en un accidente. Con menos frecuencia, puede ocurrir por abrir demasiado la boca.
La mandíbula de su hijo puede sentirse rígida, hinchada y dolorida. Es importante que su hijo no se lesione de nuevo la mandíbula mientras sana. Asegúrese de que su hijo no trate de abrir demasiado la boca. Puede envolver un vendaje alrededor de la mandíbula para ayudar a sostenerla. Asegúrese de que su hijo lleve el vendaje tal y como lo indique el médico.
La atención de seguimiento es una parte clave del tratamiento y la seguridad de su hijo. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si su hijo está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de los exámenes de su hijo y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?
- Administre los analgésicos exactamente según las indicaciones.
- Si el médico le recetó un analgésico a su hijo, déselo según las indicaciones.
- Si su hijo no está tomando analgésicos recetados, pregúntele a su médico si puede tomar uno de venta libre.
- Intente usar calor o hielo para ver si eso ayuda. Use una compresa fría durante 10 a 15 minutos cada 2 o 3 horas. Póngale a su hijo un paño delgado entre la compresa fría y la piel. O pruebe con una almohadilla térmica a baja temperatura durante 15 a 20 minutos cada 2 o 3 horas.
- Si la mandíbula de su hijo está hinchada, intente colocar tres o cuatro almohadas debajo de la cabeza y los hombros de su hijo a la hora de acostarse. Esto puede reducir la hinchazón.
- Dele a su hijo alimentos blandos que sean fáciles de masticar para reducir el dolor en la mandíbula y en la boca. Evite darle alimentos o bebidas calientes, ya que podrían aumentar la hinchazón alrededor de la boca.
- Ayude a su hijo a evitar cualquier actividad que pueda dañarle de nuevo la mandíbula. Enséñele a su hijo cómo sostener la mandíbula con las manos cuando bostece o estornude durante al menos 3 semanas después de la lesión.
¿Cuándo debe pedir ayuda?
Llame al 911 en cualquier momento que considere que su hijo necesita atención de urgencia. Por ejemplo, llame si:
- Su hijo tiene dificultad para respirar.
Llame a su médico ahora mismo o busque atención médica inmediata si:
- Su hijo tiene dificultad para tragar.
- La boca de su hijo sangra.
- Su hijo tiene dolor nuevo o peor.
- Su hijo no puede cerrar la boca del todo.
- La mordida de su hijo no se alinea como solía hacerlo.
Preste especial atención a los cambios en la salud de su hijo y asegúrese de comunicarse con su médico si:
- Su hijo no mejora como se esperaba.
¿Dónde puede encontrar más información en inglés?
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Revisado: 31 julio, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
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