Insuficiencia suprarrenal secundaria: Instrucciones de cuidado

Instrucciones de cuidado

Las glándulas suprarrenales se encuentran encima de los riñones. Producen hormonas que afectan casi todos los órganos del cuerpo.

Insuficiencia suprarrenal secundaria significa que sus glándulas suprarrenales no producen una cantidad suficiente de una hormona llamada cortisol. El cortisol ayuda a mantener la presión arterial. Ayuda a descomponer el azúcar y las grasas para generar energía. También ayuda a controlar el estrés.

El problema comienza en la hipófisis (glándula pituitaria). Esta se encuentra en la base del cerebro. Normalmente envía una señal a las glándulas suprarrenales para producir más cortisol. La señal es una hormona que produce la hipófisis llamada corticotropina (ACTH, por sus siglas en inglés). Cuando la hipófisis no produce suficiente cantidad de corticotropina, las glándulas suprarrenales no producen suficiente cortisol.

Esto puede suceder si la hipófisis resulta dañada por cosas como un tumor o cirugía.

El tratamiento implica sustituir las hormonas que su cuerpo necesita. Es posible que le den algunas de estas hormonas en el hospital. Algunas personas tendrán que tomar hormonas en su hogar durante el resto de su vida. Las hormonas pueden venir en forma de pastilla o como inyección.

Si es posible, su médico tratará la afección que dañó la hipófisis.

Algunas personas pueden necesitar atención de urgencia porque tienen lo que se conoce como insuficiencia suprarrenal aguda. Esta puede ser causada por una infección o estrés graves. Los síntomas pueden incluir:

• Vómito y diarrea intensos.
• Debilidad extrema.
• Fiebre alta.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Tome sus medicamentos exactamente como se los recetaron. Llame a su médico si cree que está teniendo un problema con sus medicamentos.
• Use joyas de alerta médica. Esto les permite saber a otras personas que usted tiene insuficiencia suprarrenal.
• Tenga una inyección de medicamento de emergencia consigo en todo momento. Sepa cuándo y cómo administrarse la inyección. Tenga instrucciones escritas. Enséñele a otra persona a administrarle la inyección en caso de que usted no pueda administrársela por sí solo.
• Mantenga un registro de su presión arterial. Informe a su médico si está alta o demasiado baja. Informe también a su médico si tiene hinchazón o se siente mareado. Es posible que deba ajustar la dosis de medicamento.
• Colabore con su médico para elaborar un plan de acción para cuando esté enfermo o cuando su cuerpo esté bajo estrés. Es posible que tenga que cambiar la dosis de medicamento durante este tiempo.
• Pésese con regularidad, especialmente si no ha tenido ganas de comer o ha estado vomitando. Pésese a la misma hora todos los días y use la misma ropa cada vez que se pese. Informe a su médico si pierde peso o vomita con frecuencia.