Generalidades
Las hemorragias nasales son comunes, especialmente con los resfriados o las alergias. Muchas cosas pueden causar una hemorragia nasal.
Algunas hemorragias nasales se detienen por sí mismas con presión, otras necesitan taponamiento y algunas deben cauterizarse (sellarse). Si su hijo tiene gasa u otros materiales de taponamiento dentro de la nariz, usted tendrá que hacer un seguimiento con el médico para que le retiren el tapón. Su hijo podría necesitar más tratamiento si las hemorragias nasales ocurren con frecuencia.
La atención de seguimiento es una parte clave del tratamiento y la seguridad de su hijo. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si su hijo está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de los exámenes de su hijo y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?
- Si su hijo tiene otra hemorragia nasal:
- Haga que su hijo se suene con cuidado la nariz para eliminar cualquier coágulo de sangre.
- Haga que su hijo se siente erguido e incline la cabeza ligeramente hacia adelante para evitar que la sangre le baje por la garganta.
- Use los dedos pulgar e índice para apretar la parte delantera y blanda de la nariz por al menos 5 minutos. Use un reloj. No se fije para ver si la hemorragia se ha detenido antes de que pasen los 5 minutos. Si la hemorragia no se ha detenido, apriétele la nariz por 10 minutos más. Si su hijo tiene más de 6 años, usar un aerosol descongestionante nasal como oximetazolina (Afrin) antes de apretarle la nariz también puede ayudar a detener el sangrado. Consulte con su médico primero. Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las indicaciones de la etiqueta.
- Cuando se haya detenido la hemorragia, dígale a su hijo que no se hurgue, frote ni suene la nariz por varias horas para evitar que vuelva a sangrar.
Para prevenir las hemorragias nasales
- Enséñele a su hijo a no sonarse la nariz demasiado fuerte.
- Asegúrese de que su hijo evite levantar cosas o esforzarse después de una hemorragia nasal.
- Elévele la cabeza a su hijo sobre una almohada mientras duerme.
- Aplíquele a su hijo una capa delgada de gel nasal a base de solución salina o de agua dentro de la nariz. Un ejemplo es NasoGel. Aplíquelo en el tabique, el cual divide las fosas nasales. Esto prevendrá la sequedad que causa las hemorragias nasales.
- Use un humidificador de vapor frío para agregar humedad en la habitación de su hijo. Siga las indicaciones de limpieza del aparato.
- Hable con su médico acerca de suspender cualquier otro medicamento que esté tomando su hijo. Algunos medicamentos pueden aumentar las probabilidades de que su hijo tenga una hemorragia nasal.
- No dé medicamentos para resfriados ni aerosoles nasales sin hablar antes con su médico. Pueden resecar la nariz de su hijo.
¿Cuándo debe pedir ayuda?
Llame al 911 en cualquier momento que sospeche que su hijo puede necesitar atención de urgencia. Por ejemplo, llame si:
- Su hijo se desmaya (pierde el conocimiento).
Llame a su médico ahora mismo o busque atención médica inmediata si:
- Le sigue sangrando la nariz a su hijo después de que se le ha aplicado presión por 15 minutos.
- Su hijo tiene mucha sangre que le corre por la parte posterior de la garganta, aun después de haber apretado la nariz con los dedos e inclinar la cabeza hacia adelante.
- Su hijo se vuelve débil o aturdido.
- Su hijo tiene una hemorragia nasal después de una lesión en la cabeza.
Preste especial atención a los cambios en la salud de su hijo y asegúrese de comunicarse con el médico si:
- Su hijo tiene hemorragias nasales con frecuencia, aunque se detengan.
- Su hijo no mejora como se esperaba.
¿Dónde puede encontrar más información en inglés?
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Revisado: 27 octubre, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
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