Dolor de espalda en adolescentes: Instrucciones de cuidado

Generalidades

En la mayoría de los casos, no existe una causa clara para el dolor de espalda. Puede estar relacionado con problemas con los músculos y ligamentos de la espalda. También puede estar relacionado con problemas con los nervios, discos o huesos de la espalda. Moverse, levantar objetos, estar de pie, sentarse o dormir de manera incómoda puede forzar la espalda.

Aunque puede doler mucho, el dolor de espalda suele mejorar por sí solo al cabo de varias semanas. La mayoría de las personas se recuperan en 12 semanas o menos. Cuidarte a ti mismo, como hielo o calor y actividades livianas (como caminar), puede ayudarte a sentirte mejor antes.

¿Cómo puedes cuidarte en el hogar?

• Siéntate o acuéstate en posiciones que sean las más cómodas y que reduzcan tu dolor. Prueba una de estas posiciones cuando te acuestes:
  • Acuéstate de espalda con las rodillas flexionadas y apoyadas sobre grandes almohadas.
  • Acuéstate sobre el piso con las piernas sobre el asiento de un sofá o una silla.
  • Acuéstate de lado con las rodillas y las caderas dobladas y una almohada entre las piernas.
  • Acuéstate boca abajo si esta posición no empeora tu dolor.
• Descansar en la cama puede aliviar el dolor inicialmente, pero retrasa la sanación. Evita descansar en la cama después del primer día.
• Cambia de posición cada 30 minutos. Si debes permanecer sentado por períodos prolongados, toma descansos para levantarte. Levántate y camina un poco o acuéstate en una posición cómoda.
• Prueba a usar una almohadilla térmica a temperatura baja o mediana por entre 15 y 20 minutos cada 2 o 3 horas. Prueba una ducha templada en lugar de una de las sesiones con la almohadilla térmica.
• También puedes probar una compresa fría de 10 a 15 minutos cada 2 o 3 horas. Ponte un paño delgado entre el hielo y la piel.
• Sé prudente con los medicamentos. Toma los analgésicos exactamente según las indicaciones.
  • Si el médico te recetó un analgésico, tómalo según las indicaciones.
  • Si no estás tomando un analgésico recetado, pregúntale a tu médico si puedes tomar uno de venta libre.
• Haz caminatas cortas varias veces al día. Puedes comenzar con un período de 5 a 10 minutos, 3 o 4 veces al día, y aumentar progresivamente hasta lograr caminatas más largas. Camina en superficies planas y evita cuestas y escaleras hasta que tu espalda mejore.
• Regresa a trabajar y a las demás actividades tan pronto como puedas. El descanso continuo sin actividad no suele ser bueno para la espalda.
• Para prevenir dolores de espalda en el futuro, haz ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento de la espalda y del abdomen. Aprende a mantener una buena postura, a usar técnicas seguras para levantar objetos pesados y una mecánica corporal apropiada.