La historia de Dani
¡Hola! Soy Dani. Aquí estoy con mis padres y mi perro Frank.
Me encanta jugar al fútbol. Pero no hace mucho, no me sentía muy bien. Y me estaba costando mucho jugar como siempre.
Me enteré de que tengo diabetes tipo 1. Tuve que aprender algunas cosas nuevas y hacer algunos cambios en casa y en la escuela. Fue difícil al principio, pero ahora las cosas están mejorando.
Aprendí que tener diabetes significa que mi cuerpo no elabora insulina. La insulina es una cosa que ayuda a convertir el azúcar de los alimentos en energía que puedo usar.
¡Me gusta usar la energía para hacer goles para mi equipo!
Cuando no tengo insulina, mi cuerpo no puede usar el azúcar de los alimentos. Y eso puede hacer que me sienta mal.
Pero aprendí lo que tengo que hacer para sentirme bien y saludable. Presto atención a lo que como. Me reviso el azúcar en la sangre y le doy a mi cuerpo la insulina que necesita.
Tengo un estuche especial donde tengo mi insulina y todas las demás cosas que necesito. Mi estuche tiene forma de mariposa y lo cubro de pegatinas. ¡Llevo mi estuche conmigo a todos lados!
Me llevó un tiempo acostumbrarme a revisarme el azúcar en la sangre y usar la insulina.
Para revisarme la sangre, primero me pincho el dedo. Después, pongo una gotita de sangre en un aparatito que mide cuánta azúcar hay en la sangre.
Después de revisarme la sangre, un adulto me ayuda a calcular cuánta insulina necesita mi cuerpo.
Me pongo la insulina con una inyección. La inyección tiene una aguja muy pequeña. Y ahora que me acostumbré a las inyecciones, ya casi ni las siento.
Al principio, necesitaba que un adulto me ayudara con los pinchazos en el dedo y las inyecciones. Pero ahora, después de mucha práctica, ¡puedo hacerlo todo sola! Solo tengo que tener a un adulto a mi lado.
En la escuela, voy a la enfermería un par de veces al día para revisarme la sangre y aplicarme la insulina.
Cuando comencé a ir a la enfermería con tanta frecuencia, algunos niños se preguntaban por qué. Estaban preocupados por mí, porque pensaban que podría estar enferma.
Así que les conté sobre la diabetes. Y les dije que no se la pueden contagiar de otra persona.
Tener diabetes significa que tengo que tener más cuidado con lo que como. Pero NO significa que no puedo darme gustos. Solo tengo que hacer elecciones saludables la mayor parte del tiempo. Y tengo que recordar que si como algunos tipos de alimentos, podría necesitar más insulina.
Mi familia también me ayuda a comer de manera saludable. Preparamos la cena juntos y todos ayudamos a cocinar. Frank ayuda limpiando lo que se cae al piso.
Puedo seguir haciendo todas las actividades que me gusta hacer. ¡Como jugar al fútbol! Porque el ejercicio también me ayuda a estar sana.
¡Oh! ¡Y aprendí que no soy la única en mi equipo que trae medicamentos a fútbol! Arthur trae su inhalador para el asma, y Kate trae su estuche para picaduras de abejas. Nos ayudamos mutuamente para acordarnos de traer las cosas que necesitamos en los entrenamientos y los partidos.
Esta es la historia de Dani. Ahora que sabes lo que ELLA aprendió sobre la diabetes, ¿puedes pensar en algunas cosas que TÚ hayas aprendido? ¿Cómo quieres que sea tu estuche? ¿Cómo lo decorarías?
Revisado: 30 abril, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.