Tu recuperación
En la cirugía de menisco, se extrae o se repara el cartílago (menisco) que está entre los huesos de la rodilla. Cada rodilla tiene dos de estas almohadillas elásticas de cartílago, una de cada lado. La reparación de menisco se realiza a menudo con una cirugía artroscópica. El médico introdujo un tubo iluminado –llamado artroscopio– y otros instrumentos quirúrgicos a través de cortes (incisiones) pequeños en la rodilla. Las incisiones dejan cicatrices que suelen volverse menos visibles con el tiempo.
Te sentirás fatigado durante varios días. Tu rodilla estará hinchada y es posible que tengas entumecimiento alrededor de los cortes (incisiones) en tu rodilla. Podrías ponerte hielo en la rodilla para reducir la hinchazón. La mayor parte de la hinchazón desaparecerá en pocos días. Pronto deberías comenzar a notar mejoría en la rodilla.
Es posible que puedas retomar la mayoría de tus actividades habituales en pocas semanas. Pero pasarán varios meses hasta que recuperes el uso completo de la rodilla. Podría tardar hasta 6 meses antes de que la rodilla esté lo suficientemente fuerte para hacer trabajo físico intenso o ciertos deportes. Deberás hacer ejercicios de rehabilitación para recuperar la fuerza y el movimiento de la articulación. Con el tiempo, deberías tener más fuerza y estabilidad en la rodilla que antes de la cirugía.
El tiempo que tardes en volver a hacer deportes o ejercicio dependerá del tipo de cirugía que te hicieron y de cómo sigas el programa de rehabilitación y sane la rodilla. Tu médico o fisioterapeuta te darán una idea de cuándo podrías retomar estas actividades. Si tuviste una meniscectomía parcial, podrías estar practicando deportes aproximadamente al cabo de 4 a 6 semanas. Si se te hizo una reparación de menisco, podrían pasar de 3 a 6 meses antes de que puedas hacer deportes.
Esta hoja de cuidados le da una idea general del tiempo que le llevará recuperarse. Sin embargo, cada persona se recupera a un ritmo diferente. Siga los pasos que se mencionan a continuación para recuperarse lo más rápido posible.
¿Cómo puedes cuidarte en el hogar?
Actividad
- Descansa cuando te sientas fatigado. Dormir lo suficiente te ayudará a recuperarte. Duerme con la rodilla elevada, pero no doblada. Colócate una almohada debajo del pie.
- Mantén la pierna levantada el mayor tiempo posible durante los primeros días.
- Puedes tomar una ducha de 24 a 48 horas después de la cirugía, si tu médico lo aprueba. Cuando te duches, cubre el vendaje y las incisiones con plástico y sujétalo con cinta adhesiva para mantenerlos secos. Si tienes un aparato ortopédico, quítatelo si tu médico lo autoriza. Podría ser de ayuda sentarte en un banquito para ducha.
- Podrás ponerte de pie si utilizas un aparato ortopédico o muletas. No pongas peso sobre la pierna hasta que tu médico lo autorice. Puedes moverte por tu casa para hacer las tareas cotidianas.
- Si tienes un aparato ortopédico, quítatelo únicamente para ejercitar la rodilla o para ducharte. Ten cuidado de no ponerte el aparato ortopédico demasiado apretado. Lo usarás aproximadamente por entre 2 y 6 semanas.
- Si tu médico no quiere que te duches o que te quites el aparato ortopédico, puedes darte un baño de esponja.
- Espera 2 semanas o hasta que tu médico lo autorice para darte baños de inmersión, nadar, utilizar una bañera de hidromasaje o sumergir tu pierna en agua.
- Si conduces, pregúntale a tu médico cuándo puedes volver a conducir.
- Cuándo puedas regresar a la escuela depende del tipo de cirugía que te hayan hecho. Es posible que puedas volver en 1 o 2 semanas.
- Si trabajas, tu regreso depende del tipo de trabajo que tengas. Si permaneces sentado en el trabajo, podrías volver en 1 o 2 semanas. Pero si estás de pie, podría llevarte de 4 a 6 semanas. Si eres una persona físicamente muy activa en tu trabajo, podrías tener que ausentarte de 3 a 6 meses.
Alimentación
- Puedes continuar con tu dieta normal. Si tienes malestar estomacal, come alimentos suaves bajos en grasa, como arroz sin condimentos, pollo a la parrilla, pan tostado y yogur.
- Puedes notar que tus evacuaciones intestinales no son regulares justo después de tu cirugía. Esto es común. Trata de evitar el estreñimiento y de no hacer esfuerzos cuando evacues el intestino. Tal vez desees tomar un suplemento de fibra todos los días. Si no has evacuado el intestino después de un par de días, pregúntale a tu médico si puedes tomar un laxante suave.
Medicamentos
- El médico te dirá si puedes comenzar a tomar tus medicamentos de nuevo y cuándo puedes hacerlo. También recibirás instrucciones acerca de tomar cualquier medicamento nuevo.
- Toma los analgésicos exactamente según las indicaciones.
- Si el médico te recetó un analgésico, tómalo según las indicaciones.
- Si no estás tomando un analgésico recetado, pregúntale a tu médico si puedes tomar uno de venta libre.
- Si tu médico te recetó antibióticos, tómalos según las indicaciones. No dejes de tomarlos por el hecho de sentirte mejor. Debes tomar todos los antibióticos hasta terminarlos.
- Si crees que el analgésico te está causando malestar estomacal:
- Toma el analgésico después de las comidas (a menos que tu médico te haya indicado lo contrario).
- Pídele al médico un analgésico diferente.
Cuidado de la incisión
- Si tienes una venda sobre las incisiones, mantén la venda limpia y seca. Sigue las indicaciones del médico. Algunos médicos quieren verte antes de que te quites la venda, mientras que otros pueden dejar que te la quites de 48 a 72 horas después de la cirugía.
- Si te han puesto tiras de cinta adhesiva sobre las incisiones, déjatelas durante una semana o hasta que se caigan.
- Mantén la zona limpia y seca.
Ejercicio
- La rehabilitación de la rodilla es una serie de ejercicios para hacer después de la cirugía. Esto te ayuda a recuperar la amplitud de movimiento y la fuerza de la rodilla. Colaborarás con el médico y el fisioterapeuta para planificar este programa de ejercicios. Para obtener los mejores resultados, tienes que hacer los ejercicios correctamente y con la frecuencia y por el tiempo que te indique el médico.
Hielo y elevación
- Aplícate hielo o una compresa fría sobre la rodilla por entre 10 y 20 minutos cada vez. Trata de hacerlo cada 1 o 2 horas durante los siguientes 3 días (cuando estés despierto). Ponte un paño delgado entre el hielo y la piel. Si el médico te recomienda usar una máquina de crioterapia, sigue las instrucciones que vinieron con la máquina.
- Coloca la pierna adolorida sobre una almohada cuando te aplicas hielo en la rodilla o en cualquier momento que te sientes o te acuestes durante los 3 días siguientes. Trata de mantener la pierna por encima del nivel del corazón. Esto ayudará a reducir la hinchazón.
- Si el médico te recetó medias de compresión, continúa usándolas las 24 horas del día durante 3 semanas (o el tiempo que indique el médico).
La atención de seguimiento es una parte clave de su tratamiento y seguridad. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de sus exámenes y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cuándo debes pedir ayuda?
Llama al 911 en cualquier momento que consideres que necesitas atención de urgencia. Por ejemplo, llama si:
- Te desmayaste (perdiste el conocimiento).
- Tienes graves dificultades para respirar.
- Tienes dolor repentino en el pecho y falta de aire, o toses sangre.
Llama a tu médico ahora mismo o busca atención médica inmediata si:
- Tienes dolor que no desaparece después de tomar analgésicos.
- Los puntos de sutura están flojos o las incisiones se abren.
- La venda sobre la incisión está empapada en sangre de color rojo vivo.
- Tienes señales de infección, tales como:
- Aumento del dolor, la hinchazón, el enrojecimiento o la temperatura.
- Vetas rojizas que salen de la incisión.
- Pus que sale de la incisión.
- Ganglios linfáticos inflamados en el cuello, las axilas o la ingle.
- Fiebre.
- Tienes señales de un coágulo de sangre, como:
- Dolor en la pantorrilla, detrás de la rodilla, en el muslo o en la ingle.
- Enrojecimiento e hinchazón en la pierna o la ingle.
Presta especial atención a cualquier cambio en tu salud y asegúrate de ponerte en contacto con tu médico si:
- Sientes como si algo agarrara o trabara la rodilla.
- Sientes el estómago revuelto o no puedes mantener líquidos en el estómago.
- Tienes hinchazón, hormigueo, dolor o entumecimiento en los dedos de los pies, y estos síntomas no desaparecen cuando elevas la rodilla por encima del nivel del corazón.
- No evacuas el intestino después de tomar un laxante.
¿Dónde puede encontrar más información en inglés?
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Revisado: 31 julio, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
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