Aprenda sobre la histoplasmosis

¿Qué es la histoplasmosis?

La histoplasmosis es una infección causada por un tipo de hongo (o moho). Afecta con más frecuencia a los pulmones. En los Estados Unidos, el hongo es más común en las partes central y oriental del país. A menudo se encuentra en los valles de los ríos Mississippi y Ohio, pero se puede encontrar en otros lugares.

¿Cuál es la causa?

Una persona puede contraerla al inhalar las esporas del hongo Histoplasma capsulatum. Este hongo a menudo crece en el suelo que contiene heces de murciélagos o de aves. Usted puede contraerla si se halla en un área donde crece el hongo. Esto es más probable si hace una actividad que remueve el suelo en el que crece el hongo.

La infección no se propaga de una persona a otra.

Algunas personas tienen un riesgo más alto de enfermarse si se exponen a este hongo. Estas incluyen:

• Bebés.
• Adultos mayores.
• Personas que tienen un sistema inmunitario debilitado. (Tener un trasplante de órgano o tejido o una afección como el VIH o el SIDA puede causar esto).
• Personas que toman ciertos medicamentos que debilitan el sistema inmunitario, como corticosteroides o quimioterapia.

¿Cuáles son los síntomas?

La mayoría de las personas no tienen síntomas. Pero la infección puede hacerle sentir como si tuviese gripe. Podría tener fiebre, tos, escalofríos, dolor de pecho, dolor de cabeza y fatiga.

Generalmente, los síntomas mejoran por sí solos al cabo de varias semanas. Las infecciones serias pueden durar más tiempo. En algunos casos, la infección puede irse pero regresar años más tarde.

En las personas que tienen un sistema inmunitario debilitado, la infección puede propagarse de los pulmones a otros órganos, por ejemplo, el cerebro.

¿Cómo se diagnostica?

El médico le hará un examen físico. El médico le hará preguntas acerca de sus síntomas y de sus antecedentes de salud. El médico puede preguntarle sobre sus actividades o lugares a los que ha viajado que podrían haber aumentado su riesgo de contraer la infección.

Podrían hacerle pruebas para ver si tiene la infección. Estas incluyen:

• Análisis de sangre o de orina.
• Exámenes de diagnóstico por imágenes, como una radiografía de pecho o una tomografía computarizada de los pulmones.
• Una muestra de líquido o de tejido (biopsia). En los casos más serios, podrían tomarle una muestra de los pulmones o de las vías respiratorias o del líquido que normalmente rodea la médula espinal.

¿Cómo se trata?

La mayoría de las personas se recuperan de una infección leve sin tratamiento. Se pueden usar medicamentos antimicóticos si la infección es grave, no desaparece o se ha diseminado de los pulmones a otros órganos. Puede tomar medicamentos durante meses o hasta unos años.