Aprenda acerca del pie caído

¿Qué es el pie caído?

El pie caído es un problema que hace que no pueda levantar la parte delantera del pie con normalidad cuando camina. Se conoce como pie caído porque la parte delantera del pie se cae en lugar de apuntar hacia arriba al caminar. Puede tener el pie caído en uno o en ambos pies.

¿Cuál es la causa?

Normalmente, el cerebro, los nervios y los músculos trabajan juntos para ayudarle a caminar. El pie caído puede producirse si tiene un problema con:

• El cerebro. Un ataque cerebral u otro problema puede dañar la zona del cerebro que ayuda a mover las piernas y los pies. Esto puede provocar la caída del pie.
• Los nervios. La presión o el daño en los nervios que ayudan a mover la pierna y el pie puede dar lugar al pie caído. Esto puede suceder cerca de la rodilla debido a un yeso o a una operación. O puede suceder en los nervios de la parte baja de la espalda debido a un problema como una hernia discal.
• Los músculos. Algunos tipos de distrofia muscular u otros problemas musculares pueden causar el pie caído.

¿Cuáles son los síntomas?

Cuando usted camina, tal vez tenga que alzar la cadera más de lo normal para evitar que el pie golpee el suelo. Cuando el pie en efecto toca el suelo, puede caerse de modo que los dedos del pie se posan primero en lugar del talón.

Usted puede notar que se tropieza a menudo. Esto sucede porque la parte delantera del pie roza contra el suelo, especialmente en una superficie desigual, como una repisa o una alfombra.

¿Cómo se diagnostica el pie caído?

Su médico le hará un examen físico. Esto incluirá observar cómo camina, examinar sus reflejos para ver cómo le funcionan los nervios, y ver si tiene debilidad muscular. El médico puede solicitar pruebas, incluyendo:

• Pruebas nerviosas. Estas pruebas muestran la eficacia y la rapidez con la que los nervios envían señales eléctricas a los músculos.
• Pruebas de imágenes, como una resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés) o una tomografía computarizada (CT, por sus siglas en inglés). Estas pruebas pueden mostrar presión sobre un nervio de la espalda o pueden ayudar a detectar problemas en el cerebro.

¿Cómo se trata el pie caído?

El tratamiento depende de la causa del pie caído. Si se debe a presión en un nervio cerca de la rodilla o en la espalda, eliminar esa presión puede hacer que el pie se pose mejor. Esto puede implicar la eliminación de un yeso o incluso una operación para reparar un disco o un nervio dañado.

Los nervios pueden tardar semanas o meses en sanar. Si evita cruzar las piernas o los tobillos, puede ayudar a reducir la presión sobre los nervios que pueden causar el pie caído.

Su médico podría recetarle un dispositivo ortopédico ligero para la pierna y una plantilla ortopédica para el calzado. Estos pueden ayudar a evitar que el pie se caiga cuando camina. Pueden ayudar si usted tiene un problema a corto plazo, como presión sobre un nervio, o un problema a largo plazo, como un ataque cerebral. Hacer fisioterapia y ejercicios también puede ayudarle a caminar en forma segura.