Instrucciones de cuidado
Cuando un bebé nace antes de término, algunos sistemas de su cuerpo podrían necesitar ayuda adicional durante un tiempo. El sistema nervioso de un bebé prematuro podría no estar suficientemente maduro como para enviar las señales correctas en el momento adecuado. Estos bebés a menudo tienen un problema respiratorio llamado apnea. La apnea es una pausa en la respiración durante 20 segundos o más. Durante la pausa, hay una disminución de oxígeno en la sangre. Cuando esto ocurre, la frecuencia cardíaca de su bebé también podría desacelerarse (bradicardia).
Es posible que los bebés con apnea hagan una respiración profunda y luego no respiren por un rato o hagan respiraciones cortas. Algunos bebés se ponen pálidos y azulados durante un episodio de apnea. Su bebé podría tener un solo episodio al día o podría tener varios episodios por hora. Muchos bebés dejan de tener apnea cuando alcanzan su fecha original de nacimiento. Pero si su bebé nació mucho tiempo antes de la fecha de parto, los episodios de apnea podrían tardar un tiempo en desaparecer, incluso por meses.
Preocuparse de la respiración de su bebé es muy estresante. Puede ser útil aprender todo lo posible acerca de la afección y el tratamiento de su bebé.
La atención de seguimiento es una parte clave del tratamiento y la seguridad de su hijo. Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si su hijo está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de los exámenes de su hijo y mantener una lista de los medicamentos que toma.
¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?
- El médico y el personal de enfermería de su bebé le ayudarán a preparar su casa. Si su bebé va a necesitar un monitor de apnea u otro equipo especial, recibirá capacitación para su uso. La alarma del monitor se activa cuando su bebé deja de respirar. Si su bebé sigue sin respirar después de unos segundos, frótele suavemente las piernas, los brazos y la espalda. Intente cambiar un poco la posición de su bebé. Esto suele iniciar la respiración.
- Si el médico le recetó medicamentos a su bebé, déselos según las indicaciones. Llame al médico si su bebé tiene problemas con algún medicamento.
- Lávese las manos antes de sostener a su bebé. Mantenga a su bebé alejado de las multitudes y de las personas enfermas.
- No fume ni exponga a su bebé al humo. El humo del cigarrillo aumenta el riesgo de síndrome de muerte infantil súbita (SIDS, por sus siglas en inglés), infecciones de oído, asma, resfriados y neumonía.
- Ponga a su bebé a dormir boca arriba, no de costado ni boca abajo. Esto reduce el riesgo de muerte súbita del lactante. Use un colchón firme y plano. No coloque almohadas en la cuna. No utilice posicionadores para dormir, almohadas para moldear la cabeza ni protectores de cuna.
- Demasiada luz, tacto, sonido o movimiento pueden alterar a su bebé. Haga que su hogar sea tranquilo y relajante.
- Arrope a su bebé con una manta. Mantenga la manta suelta alrededor de las caderas y las piernas. Si las piernas se envuelven apretadas o rectas, pueden desarrollarse problemas de cadera. Sostenga a su bebé en brazos lo más posible.
- Tómese su tiempo al alimentarlo, ya que su bebé podría necesitar hacer una pausa y tomar unas respiraciones.
- Aprenda a hacer reanimación cardiopulmonar (RCP) y respiración de rescate. Es importante saber cómo hacerlas en caso de que su bebé deje de respirar. Hable con su médico o tome clases para aprender a hacer la respiración de rescate y la RCP.
¿Cuándo debe pedir ayuda?
Llame al 911 en cualquier momento que considere que su hijo necesita atención de urgencia. Por ejemplo, llame si:
- Su hijo deja de respirar, se pone de color azulado o pierde el conocimiento. Empiece con la respiración de rescate o siga las instrucciones que le den en los servicios de emergencia mientras espera la ayuda.
- Su hijo tiene graves dificultades para respirar. Entre las señales se encuentran hundimiento del pecho, uso de los músculos abdominales para respirar o agrandamiento de los orificios nasales mientras su hijo se esfuerza por respirar.
Llame a su médico ahora mismo o busque atención médica inmediata si:
- Los episodios de apnea de su hijo empeoran o suceden con mayor frecuencia.
- Su hijo está despierto rara vez y no se despierta para ser alimentado, está muy inquieto, parece estar demasiado cansado para comer o no tiene interés en comer.
Preste especial atención a los cambios en la salud de su hijo y asegúrese de comunicarse con su médico si:
- Su hijo no mejora como se esperaba.
¿Dónde puede encontrar más información en inglés?
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Revisado: 30 abril, 2024
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
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