Alimentación del bebé prematuro: Instrucciones de cuidado

Generalidades

Su bebé ha estado bajo cuidados especiales en la sala de recién nacidos del hospital. El hospital enviará a su bebé a casa con un programa de alimentación que le informa cómo y cuándo amamantarlo o darle el biberón.

La mayoría de los bebés prematuros necesitan ser alimentados lentamente hasta que se vuelvan lo suficientemente fuertes como para succionar de un seno o del biberón. Es posible que su bebé sea alimentado a través de un tubo que va desde la nariz al abdomen. Los bebés muy prematuros o enfermos pueden ser alimentados mediante un tubo que pasa a través de la piel hasta el estómago (gastrostomía).

Si va a amamantar a su bebé, podría tener que extraerse la leche y dársela a través de un tubo. Su médico podría recomendarle que añada hierro, vitaminas o leche de fórmula a una dieta de leche materna. Si continuará alimentando a su bebé por tubo, el personal del hospital le mostrará cómo usarlo y limpiarlo.

Alimentar a su bebé de esta manera es muy diferente de lo que usted esperaba. Pero respalda la vida de su bebé y lo ayudará a fortalecerse. Su bebé necesitará comer con frecuencia, en cantidades pequeñas. El médico puede ayudarles a usted y a su bebé a establecer una rutina de alimentación y le ayudará a manejar cualquier problema de alimentación.

¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?

• Siga el horario de alimentación de su bebé. Cada bebé tiene diferentes necesidades, y este horario está diseñado para satisfacer las necesidades de su bebé.
• Si usa una sonda nasogástrica, el médico le dará instrucciones para su uso y cuidado.
  • Use una jeringa de alimentación para gotear la fórmula o la leche materna en la sonda de alimentación. A veces se utiliza una bomba en lugar de una jeringa.
  • Gastrostomía: Mantenga el lugar de inserción limpio y seco. Siga las instrucciones del fabricante.
• Dele hierro, vitaminas y otros suplementos a su bebé si su médico se lo indica.
• No espere más de 4 horas entre sesiones de alimentación.
• Lávese las manos antes de tocar la sonda de alimentación y los líquidos para alimentar a su bebé.
• Alimente a su bebé con cantidades pequeñas para ayudar a reducir la regurgitación. Su bebé comerá un poco más todo el tiempo, pero es importante no alimentar a su bebé más de lo que su bebé puede tolerar.
• Hable con su médico si su bebé regurgita mucho o llora durante o después de alimentarlo.
• Tenga paciencia cuando su bebé esté listo para comenzar a succionar. Es necesaria mucha energía para succionar y su bebé se cansará. Usted podría tener que ofrecerle tanto el biberón como el pecho durante un tiempo.