Absceso periodontal: Instrucciones de cuidado

Instrucciones de cuidado

Un absceso periodontal es una bolsa de pus en los tejidos de la encía. Se ve como una pequeña bola roja que sobresale de la encía hinchada.

Un absceso puede ocurrir con una enfermedad grave de las encías (periodontitis), la cual provoca que las encías se separen de los dientes. Esto deja bolsas profundas donde se pueden desarrollar las bacterias. Si se acumula demasiado sarro o si la comida se queda atorada en las bolsas, se forma pus. Si el pus no puede drenar, se forma un absceso.

Un absceso puede causar fiebre y dolor palpitante en los dientes circundantes. También puede causar daño a largo plazo a los dientes y las encías. Los dientes pueden aflojarse y caerse. La infección puede diseminarse a otras partes de su cuerpo.

En la mayoría de los casos, su dentista le dará antibióticos para detener la infección. Es posible que necesite hacer un corte (con una lanceta) para abrir el absceso a fin de que la infección pueda drenar. Esto debería aliviar su dolor. También es posible que necesite más tratamiento dental, como la extracción de un diente o cirugía maxilofacial para corregir el daño óseo causado por el absceso.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Reduzca el dolor y la hinchazón de la cara y la mandíbula aplicándose hielo o una compresa fría en la parte externa de la mejilla durante 10 a 20 minutos cada vez. Ponga un paño delgado entre el hielo y la piel.
• Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las instrucciones de la etiqueta.
  • Si el médico le recetó un analgésico (medicamento para el dolor), tómelo según las indicaciones.
  • Si no está tomando un analgésico recetado, pregúntele a su médico si puede tomar uno de venta libre.
• Tome los antibióticos según las indicaciones. No deje de tomarlos por el hecho de sentirse mejor. Debe tomar todos los antibióticos hasta terminarlos.

Para prevenir un absceso periodontal

• Cepíllese los dientes y use hilo dental todos los días, y hágase revisiones dentales regularmente.
• Siga una dieta saludable, y evite los alimentos y las bebidas azucaradas.
• No fume ni consuma tabaco de mascar. El consumo de tabaco reduce su capacidad de curación. También aumenta el riesgo de una enfermedad de las encías y cáncer de boca y garganta. Si necesita ayuda para dejar de fumar, hable con su médico sobre programas y medicamentos para dejar de fumar. Estos pueden aumentar sus probabilidades de dejar el hábito para siempre.