Una de las partes más importantes de amamantar es la forma en que el bebé se prende al pecho. Hacerlo de forma correcta ayuda a su bebé a obtener la mayor cantidad de leche posible durante cada toma. También ayuda a que la lactancia sea más cómoda para usted.
Consejos para que el bebé se prenda bien
Primero, siéntese de manera cómoda. Es posible que desee sentarse erguida o puede acostarse de lado o boca arriba. Una posición reclinada puede sentirse más natural para su bebé. También le permite tener más contacto piel con piel.
Para lograr que se prenda correctamente, sujete un seno con el brazo opuesto al que está usando para sostener a su bebé. Coloque el pulgar ligeramente por encima de la areola, la piel más oscura que rodea el pezón. Debe colocar los demás dedos debajo del seno.
Con la cabeza de su bebé al nivel del seno, acaricie el labio superior del bebé con el pezón. Esto alienta a su bebé a abrir la boca de forma amplia. Cuando la abra por completo, guíe suavemente el seno hacia la boca del bebé. Los labios de su bebé deben rodear el pezón.
Cuando el bebé se prende, no debería sentir dolor en absoluto; si lo hace, intente levantar el tejido mamario con los dedos por debajo hasta el nivel de la barbilla del bebé e incline al bebé hacia el seno con la mejilla tocando el seno. Si esto no funciona, querrá quitar al bebé del pecho de manera segura y luego volver a prenderlo. Es una buena idea cambiar de posición de vez en cuando para evitar problemas, como dolor en los pezones.