El tendón de Aquiles conecta el músculo de la pantorrilla con el hueso del talón. Un tendón de Aquiles muy desgarrado causa dolor y pérdida repentina de fuerza y movimiento. A veces esto se llama rotura.
Un desgarro de Aquiles generalmente es causado por un movimiento repentino y contundente que sobrecarga el músculo de la pantorrilla. Esto puede ocurrir durante actividades deportivas intensas o incluso durante una simple carrera o salto. Los adultos de mediana edad son más propensos a sufrir este tipo de lesiones.
Un tendón que está muy desgarrado o completamente desgarrado generalmente se trata con cirugía. A veces, un desgarro se puede tratar con un yeso, una tablilla, un aparato ortopédico u otro dispositivo que impida que la parte inferior de la pierna se mueva.