Una enfermedad ambiental es un conjunto de síntomas o una enfermedad causada por sustancias químicas, vapores, contaminación, alérgenos, virus o toxinas o riesgos físicos que se encuentran en el medio ambiente. La exposición a las sustancias químicas tóxicas o a otros riesgos podría suceder en el hogar, el lugar de trabajo o la comunidad.
Los síntomas de una enfermedad ambiental dependen de lo que esté causándola. Los síntomas pueden parecerse a aquellos causados por otras enfermedades. Los ejemplos incluyen dolor de cabeza, tos, fatiga y náuseas. Y los síntomas pueden variar de acuerdo con la cantidad y el tipo de exposición. Las enfermedades ambientales pueden ser difíciles de diagnosticar. Y a veces se confunden con otras enfermedades.
Es posible que los síntomas aparezcan repentinamente y desaparezcan cuando termina la exposición a la sustancia. Por ejemplo, los dolores de cabeza o el aturdimiento causados por el monóxido de carbono en el hogar pueden desaparecer cuando las personas que viven allí van a trabajar o a la escuela. A veces, es posible que no se desarrollen síntomas por años, lo que puede suceder después de la exposición a las sustancias químicas que causan cáncer.
El primer tratamiento para una enfermedad ambiental incluye eliminar o reducir la exposición a las cosas que causan la enfermedad. El tratamiento adicional se basa en los síntomas específicos y en la parte del cuerpo afectada.