Consejos prácticos: Cómo modificar su hogar y su área de trabajo cuando tiene artritis

Cómo comenzar

El dolor y la rigidez ocasionados por la artritis podrían hacer que le resulte difícil realizar sus tareas diarias. Por ejemplo, si tiene problemas con las manos o con los dedos, podría resultarle difícil usar un teclado o abrir y cerrar una puerta. Si usted tiene problemas con las caderas o con las rodillas, podría resultarle difícil subir y bajar las escaleras o sentarse en una silla y después pararse.

Cuando le resulte más difícil realizar estas tareas cotidianas, es posible que se sienta cansado y frustrado. Sin embargo, existen algunos cambios que usted puede hacer en el hogar y en el área de trabajo que pueden ayudarle a moverse con más facilidad y con menos dolor.

En el hogar

• Use cubiertas para perillas para que sea más fácil abrir las puertas. O reemplace las perillas redondas por manijas para poder hacer palanca, de manera que usted no tenga que emplear un agarre completo a fin de girar la perilla para abrir la puerta. Puede, simplemente, empujar la manija hacia abajo con la mano o incluso con el codo. Esto le resta esfuerzo a la muñeca y a los dedos.
• Use un dispositivo para alcanzar objetos para levantar cosas del piso o agarrar objetos ubicados en lugares elevados, en gabinetes o en armarios.
• Use herramientas con almohadillas o con mangos grandes para hacer que le sea más fácil sujetar objetos como llaves, cubiertos, cacerolas y ollas de cocina, peines y cepillos de dientes.
• Use herramientas eléctricas, como abridores de latas, licuadoras y demás herramientas eléctricas, para facilitar tareas como abrir latas, mezclar ingredientes o hacer reparaciones en el hogar.
• Use sillas más altas o cojines para asientos a fin de evitar sentarse en sillas que sean muy bajas, en las que sea difícil sentarse y de las que sea difícil pararse.
• Coloque un asiento más alto en el inodoro para que sea más fácil sentarse y pararse.
• Coloque agarraderas en el baño como ayuda para entrar en la ducha o en la tina y salir de ellas. Y coloque cinta antideslizante en la tina. Todas estas cosas también pueden ayudarle a prevenir caídas.
• Use un taburete alto para tareas que con normalidad haría de pie, como trabajar en la cocina o en el taller de carpintería.
• Use ganchos para abotonar, calzadores de mango largo y subecalcetines, para que vestirse le resulte más fácil. Y use ropa con Velcro en lugar de con botones o broches pequeños.

Usted puede encontrar algunos de estos dispositivos y herramientas en línea, en tiendas y catálogos de artículos médicos, y en tiendas minoristas y para mejoras en el hogar locales.

En el trabajo

• Use carritos o bolsas con ruedas para mover objetos como cajas o muebles pesados. Si no puede usarlos todo el tiempo, aprenda a levantar un objeto en forma segura. Asegúrese de mantener el objeto cerca de usted al levantarlo. Flexione las rodillas y mantenga la espalda derecha cuando sujeta el objeto, luego estire las rodillas para levantarlo.
• Use una silla ajustable que le sostenga la parte baja de la espalda y le permita ajustar la altura para que los pies reposen en posición horizontal sobre el piso.
• Use una bandeja para el teclado de la computadora que sea lo suficientemente grande como para sostener el teclado y el mouse. Y asegúrese de que la altura de la bandeja pueda ajustarse en un lugar que le permita usar un teclado sin dolor. Existen otros tipos de teclados, entre los que se incluyen los teclados divididos o curvos, que podrían ser mejores para usted.
• Use un mouse con bola de seguimiento o una almohadilla táctil para computadora en lugar de un mouse de computadora estándar para reducir el esfuerzo que realizan la mano, la muñeca y el hombro.
• Ajuste el monitor de su computadora para que la parte superior de la pantalla quede aproximadamente al nivel de los ojos, a fin de reducir el esfuerzo del cuello.
• Disponga su escritorio o su área de trabajo de forma tal que las cosas que más use sean fáciles de alcanzar y que usted no tenga que inclinarse, doblarse ni girar para alcanzarlas.
• Siéntese erguido para hacer su trabajo y reducir la presión de la espalda. Relaje los hombros, mantenga los pies en posición horizontal sobre el piso y no se incline demasiado hacia adelante.
• Tome descansos para estirarse o levantarse de la silla. Esto puede ayudarle a mantener los músculos relajados y a que sus articulaciones se muevan bien.

Un terapeuta ocupacional puede ayudarle a realizar estos cambios y otros en su hogar y en su área de trabajo.