Con la llegada de una gran variedad de deliciosos productos de temporada, la primavera es un buen momento para incorporar algunos de los superalimentos de la naturaleza a su alimentación diaria.
Puede comprar estos alimentos ricos en nutrientes en su tienda o mercado agrícola local. Son un complemento sabroso para cualquier comida, así que experimente distintas maneras de prepararlos. Quizás descubra un nuevo bocadillo favorito.
Frijoles y legumbres
Todos los tipos de frijoles aportan proteínas, fibra y hierro, y tienen muy poca grasa. Además, son económicos y versátiles. Agregue frijoles cocidos a una ensalada verde, una sopa de verduras, un guisado o chili. Prepare un plato principal vegetariano sustancioso: cocine a fuego lento frijoles negros con tomates y condimentos, como ajo, comino y chile en polvo. Sírvalos con arroz integral, envueltos en una tortilla o acompañados de una ensalada verde.
Arándanos
Como los arándanos contienen vitamina C, potasio y antioxidantes, pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, Alzheimer y ciertos tipos de cáncer. Coma un puñado como bocadillo, agréguelos a los cereales, licúelos con plátanos para preparar un delicioso batido o caliéntelos para hacer una cobertura de fruta nutritiva.
Brócoli
El brócoli es una poderosa fuente de vitaminas, fibra y calcio. Según las investigaciones, puede ayudar a reducir el riesgo de tener cáncer de colon, cataratas y ataque cerebral. Pruébelo crudo en trozos con aderezo ranchero, al vapor con limón o asado con ajo y parmesano.
Semillas de lino
Las semillas de lino, una excelente fuente de fibra y ácidos grasos omega 3, pueden reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, estimular la función cerebral y mejorar la digestión. Agregue linaza molida a sus batidos, espolvoréela sobre avena o mézclela con yogur. Incluso puede agregar unas cucharadas a recetas de pasteles y brownies.
Frutos secos
Son una buena fuente de proteína, vitaminas B y grasas saludables para el corazón. Solo un puñado pequeño (1/4 de taza) de frutos secos puede ayudarle a combatir el hambre entre comidas. Este alimento versátil puede dar una textura crujiente a sus ensaladas, arroces o cuscuses. También puede combinarlos con fruta fresca para obtener un bocadillo energético.
Salmón
El salmón, abundante en proteínas y ácidos grasos omega 3, es excelente para el corazón y el cerebro. A la plancha, al horno o salteado, el salmón es un sustituto sabroso de la carne roja. También puede servirlo sobre una ensalada verde o un colchón de lentejas y tomates.
Espinaca
La espinaca aporta hierro, ácido fólico, vitamina K, que fortalece los huesos, y antioxidantes como el betacaroteno. Mézclela en sus batidos o utilícela en ensaladas. Como guarnición, puede cocerla al vapor con un chorrito de jugo de limón o saltearla con ajo y aceite de oliva.
Tomates
Los tomates son dulces y jugosos, y tienen un alto contenido de licopeno, que es un antioxidante relacionado con la reducción de las tasas de ciertos tipos de cáncer. También son una gran fuente de vitamina C y folato. Puede cortarlos en trozos para hacer sopas, tacos o salsas. Agregue rodajas de tomate a sus sándwiches. O corte unos cuantos tomates heirloom para preparar una ensalada con pepino, garbanzos, aguacate y vinagreta balsámica.
Yogur
Además de calcio, proteínas y vitamina D, el yogur ofrece un beneficio adicional: los probióticos. Estas bacterias "buenas" ayudan al sistema digestivo, lo que puede mejorar significativamente el estado de salud general. Mezcle el yogur con su batido y obtenga un alimento sustancioso. Agregue un poco de fruta, frutos secos o granola a una taza de yogur para disfrutar de algo delicioso por la tarde. Para hacer un desayuno sustancioso, mezcle partes iguales de yogur y mantequilla de almendras (aproximadamente 1/2 taza de cada uno) con una manzana picada.