Una de las funciones del hígado es mantener el azúcar en la sangre en un nivel normal. En las personas con diabetes, los medicamentos ayudan a cumplir esta función. Además, el hígado ayuda a eliminar el alcohol de la sangre.
Muchas personas con diabetes pueden beber alcohol con moderación, según las mismas pautas que siguen las personas que no tienen diabetes.
El alcohol puede no mezclarse bien con la insulina o las pastillas para la diabetes, y puede empeorar otras condiciones médicas y provocar problemas graves.
Lo mejor es que hable con el médico sobre su progreso en el manejo de la diabetes, su historia clínica, los medicamentos y el consumo de alcohol. De esta manera, podrá saber qué esperar y planificar con anticipación.
Cómo beber alcohol con moderación
El significado de “una copa” cambia según los diferentes tipos de bebidas alcohólicas:
- Cerveza regular = 12 onzas
- Licor de malta = de 8 a 9 onzas
- Vino = 5 onzas
- Licor fuerte = 1.5 onzas
Según estas cantidades, las pautas para beber alcohol “con moderación” (para personas con o sin diabetes) son las siguientes:
- Hombres: No más de 2 copas por día.
- Mujeres: No más de 1 copa por día.
Si tiene diabetes, debe intentar reducir el consumo de alcohol lo más posible. Si elige beber, hable con su médico y con el equipo de atención para decidir qué es lo mejor para su propia salud y seguridad.
Sepa a qué debe estar atento
Tal vez sea importante que limite o evite el consumo de alcohol en los siguientes casos:
- Si su diabetes no está bien controlada.
- Si tiene un nivel alto de triglicéridos (grasa en la sangre).
- Si tiene otras condiciones médicas, como daño nervioso.
- Si toma medicamentos que interactúan con el alcohol.
- Si tuvo problemas con el alcohol en el pasado.
Antes de tomar el primer sorbo, pregúntese lo siguiente:
- ¿Mi diabetes está bajo control (un valor de A1C inferior al objetivo que definí con mi médico)?
- ¿Hablé con mi médico para saber si tengo otras cuestiones de salud que pueden empeorar si bebo alcohol?
- ¿Estoy haciendo un tratamiento con insulina o pastillas para la diabetes, como metformina, glipizida o gliburida, que podrían hacer que se acumule ácido láctico o que baje el nivel de azúcar en la sangre si bebo?
Pautas de seguridad
De acuerdo con su historia clínica, sus medicamentos y su progreso en el manejo de la diabetes, usted y el médico podrían acordar que puede consumir alcohol con moderación.
Las siguientes son algunas pautas que lo ayudarán a mantenerse seguro y saludable si decide beber:
- Chequee su nivel de azúcar en la sangre antes y después de consumir alcohol. Esto le permitirá saber qué efecto tiene el alcohol en su nivel de azúcar en la sangre y cómo se mezcla con sus medicamentos para la diabetes.
- Tenga en cuenta las calorías y los carbohidratos. El alcohol tiene muchas calorías y la mayoría de las bebidas con las que se mezcla tiene un alto contenido de calorías y azúcar (carbohidratos).
- Elija bebidas sin azúcar y sin calorías para combinar con el alcohol. Evite los jugos de frutas, los refrescos regulares y otras bebidas similares para mezclar con el alcohol.
- Recuerde que lo que elija puede ayudar o perjudicar sus esfuerzos para manejar la diabetes. Esto también se aplica si una de sus metas es perder peso.
- Cuando beba alcohol, aliméntese o consuma un refrigerio. Cuando se administra insulina o toma medicamentos para la diabetes, el alcohol puede hacer que el nivel de azúcar en la sangre baje mucho (hipoglucemia). Tener algo de comida en el estómago le permitirá mantener el nivel de azúcar en la sangre alto y en un rango saludable.
- Sea inteligente. El alcohol puede hacer que se olvide de su salud y seguridad. También puede hacer que corra riesgos que normalmente no correría. Tenga en cuenta lo siguiente:
- Beba lentamente para mantenerse consciente de cómo lo hace sentir el alcohol a medida que lo bebe.
- Si empieza a sentirse mal, deje de tomar y resuelva el problema. Es posible que solo necesite una respuesta rápida, como alimentos, agua o medicamentos.
- Lleve con usted una identificación médica por si no puede pedir ayuda cuando la necesita.
- Si bebe, no conduzca. No debería hacer falta decirlo, pero lo decimos de todas formas.