Esta información es producida y suministrada por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés). La información en este tema puede haber cambiado desde que se escribió. Para la información más actual, comuníquese con el Instituto Nacional del Cáncer a través del Internet en la página web http://cancer.gov o llame al 1-800-4-CANCER.
¿Qué es el cáncer de vejiga?
El cáncer de vejiga (también llamado cáncer o carcinoma vesical) se presenta cuando las células de este órgano comienzan a multiplicarse en forma descontrolada. La vejiga es un órgano hueco en forma de globo donde se almacena la orina, y que se encuentra en la parte inferior del abdomen.
La vejiga tiene una pared muscular que le permite agrandarse para almacenar la orina que los riñones producen y contraerse para expulsar la orina del cuerpo. Hay 2 riñones, uno a cada lado de la columna vertebral, por encima de la cintura. La vejiga y los riñones trabajan juntos para eliminar toxinas y desechos del cuerpo a través de la orina de la siguiente manera:
- Unos tubos diminutos en los riñones (túbulos renales) filtran y limpian la sangre.
- Estos túbulos sacan los productos de desecho y elaboran la orina.
- La orina pasa de cada riñón a la vejiga por un tubo largo llamado uréter.
- La vejiga almacena la orina hasta que sale del cuerpo a través de un tubo llamado uretra.
Tipos de cáncer de vejiga
Carcinoma urotelial. Cáncer que se forma en las células uroteliales que revisten la uretra, la vejiga, los uréteres, la pelvis renal y algunos otros órganos. También se llama cáncer de células de transición. Casi todos los cánceres de vejiga son carcinomas uroteliales.
Las células uroteliales también se llaman células de transición porque pueden cambiar de forma. Estas células se estiran cuando la vejiga está llena de orina y se contraen cuando se vacía.
Los siguientes son otros tipos de cáncer de vejiga menos frecuentes:
- Carcinoma de células escamosas. Cáncer que empieza en las células escamosas (células delgadas y planas que revisten el interior de la vejiga). Este tipo de cáncer a veces se forma después de una irritación prolongada o por una enfermedad llamada esquistosomiasis que causa un parásito tropical frecuente en África y el Oriente Medio, pero no en los Estados Unidos. Cuando se presenta una irritación crónica, es posible que las células de transición que revisten la vejiga se conviertan poco a poco en células escamosas.
- Adenocarcinoma. Cáncer que empieza en las células glandulares del revestimiento de la vejiga. Las células glandulares de la vejiga elaboran moco y otras sustancias.
- Carcinoma de células pequeñas de vejiga. Cáncer que empieza en las células neuroendocrinas (células similares a las nerviosas que secretan hormonas en la sangre en respuesta a una señal del sistema nervioso).
Otras formas de describir el cáncer de vejiga son las siguientes:
- Cáncer de vejiga sin invasión muscular. Cáncer que no se ha diseminado a la pared muscular de la vejiga. La mayoría de los cánceres de vejiga no presentan invasión muscular.
- Cáncer de vejiga con invasión muscular. Cáncer que se diseminó a través del revestimiento de la vejiga a la pared muscular o más allá de esta.
Información adicional sobre el cáncer de vejiga
Muchos síntomas del cáncer de vejiga también se observan en otras afecciones menos graves. Estos signos de advertencia no se deben ignorar.
El consumo de tabaco, en especial fumar cigarrillos, es un importante factor de riesgo del cáncer de vejiga. Obtenga información sobre el consumo de tabaco, otros factores de riesgo de este cáncer y qué se puede hacer para reducir el riesgo.
Obtenga información sobre los exámenes de detección para las personas con riesgo alto de cáncer de vejiga.
Obtenga información sobre las pruebas para el diagnóstico del cáncer de vejiga y su estadificación.
Pronóstico y tasas de supervivencia
Obtenga información sobre las tasas de supervivencia del cáncer de vejiga. Tenga en cuenta, que las estadísticas no predicen con exactitud lo qué sucederá con el paciente.
Los estadios indican la extensión del cáncer, como el tamaño y la diseminación del tumor. Obtenga información sobre los estadios, un factor importante para decidir el plan de tratamiento.
Obtenga información sobre los diferentes tratamientos para el cáncer de vejiga.
Cómo afrontar este cáncer y recursos de ayuda
Obtenga información sobre algunos recursos útiles para afrontar este cáncer y tener un mayor control. Afrontar el tratamiento del cáncer de vejiga y los efectos secundarios puede ser abrumador.
El cáncer de vejiga infantil es un tipo muy raro de cáncer que se forma en los tejidos de la vejiga. Obtenga información sobre los síntomas, diagnóstico y tratamiento.
Causas y factores de riesgo del cáncer de vejiga
Ciertos cambios en el funcionamiento de las células de la vejiga, en especial en cómo se desarrollan y se dividen para formar nuevas células, causan cáncer de vejiga. Existen múltiples factores de riesgo para este cáncer, pero muchos de ellos no son una causa directa. Por el contrario, esos factores aumentan la probabilidad de que se produzcan daños en el ADN de las células, lo que puede originar cáncer de vejiga. Para obtener más información sobre cómo se forma el cáncer, consulte ¿Qué es el cáncer?
Un factor de riesgo es cualquier cosa que aumenta la probabilidad de presentar una enfermedad. Es posible cambiar algunos factores de riesgo del cáncer de vejiga, como el consumo de tabaco. Los factores de riesgo también incluyen cosas que las personas no pueden cambiar, como la edad o los antecedentes familiares. Es importante que conozca los factores de riesgo del cáncer de vejiga para poder tomar decisiones que reduzcan el riesgo de que se presente.
Factores de riesgo del cáncer de vejiga
En los Estados Unidos, el cáncer de vejiga se presenta con más frecuencia en los hombres que en las mujeres, y más a menudo en personas blancas que en personas negras. El cáncer de vejiga se diagnostica a cualquier edad, pero el riesgo aumenta a medida que las personas envejecen.
El consumo de tabaco, en especial fumar cigarrillos, es un factor de riesgo importante del cáncer de vejiga. El tabaco contiene sustancias químicas perjudiciales llamadas carcinógenas. Cuando usted consume tabaco, el torrente sanguíneo absorbe estas sustancias químicas, los riñones las filtran y se acumulan en la orina. Esto hace que la vejiga quede expuesta a concentraciones elevadas de estas sustancias químicas, que pueden dañar el ADN de las células que revisten este órgano. Para obtener más información sobre las diferentes herramientas para ayudarle a dejar de fumar y cómo utilizarlas, consulte el sitio de Internet en español Smokefree.
Otros factores de riesgo del cáncer de vejiga son los siguientes:
- Tener antecedentes familiares de cáncer de vejiga.
- Tener ciertos cambios en los genes relacionados con el cáncer de vejiga, como HRAS, RB1, PTEN /MMAC1, NAT2 y GSTM1.
- Estar expuesto a pinturas, tintes, metales o productos derivados del petróleo en el trabajo.
- Haber recibido radioterapia en la pelvis o ciertos medicamentos que se usan en la terapia contra el cáncer, como la ciclofosfamida o la ifosfamida.
- Consumir Aristolochia fangchi, una hierba originaria de China.
- Beber agua proveniente de un depósito de agua con concentraciones altas de arsénico.
- Beber agua tratada con cloro.
- Tener una enfermedad (Schistomosis) causada por el parásito llamado Schistosoma haematobium, frecuente en África y Oriente Medio, pero infrecuente en los Estados Unidos.
- Utilizar sondas urinarias por mucho tiempo.
La presencia de uno o más de estos factores de riesgo no significa que con toda seguridad usted enfermará de cáncer de vejiga. Muchas personas con factores de riesgo nunca presentan este cáncer, mientras que otras sin factores de riesgo conocidos sí lo hacen. Hable con su equipo médico si cree que tiene riesgo de presentar este cáncer. Para obtener más información sobre los posibles exámenes de detección, consulte Detección del cáncer de vejiga.
Síntomas del cáncer de vejiga
Los síntomas del cáncer de vejiga pueden variar de una persona a otra. El síntoma más común es la hematuria (sangre en la orina). Con frecuencia el color de la orina es de pardo claro a rojo intenso. Es posible que en un momento determinado usted vea sangre en la orina y después quizás no la vuelva a ver por un tiempo. Algunas veces, hay una pequeña cantidad de sangre en la orina que solo se puede detectar mediante un análisis.
Otros síntomas comunes del cáncer de vejiga son los siguientes:
- Necesidad de orinar con frecuencia.
- Dolor o ardor al orinar.
- Sensación de que necesita orinar aunque la vejiga no esté llena.
- Necesidad de orinar varias veces durante la noche.
Cuando el cáncer crece o se disemina más allá de la vejiga a otras partes del cuerpo, quizás los síntomas incluyan los siguientes:
- Incapacidad de orinar.
- Dolor en la parte baja de la espalda a un lado del cuerpo.
- Dolor en el abdomen.
- Dolor en los huesos o dolor a la palpación.
- Pérdida involuntaria de peso y pérdida del apetito.
- Hinchazón de los pies.
- Cansancio.
Es importante consultar con el equipo médico si tiene alguno de estos síntomas. Tenga en cuenta que estos síntomas se pueden deber a infecciones urinarias, cálculos renales o vesicales, u otros problemas relacionados con los riñones, y no a un cáncer. El equipo médico le preguntará cuándo empezaron los síntomas y cuán a menudo se presentan. Es muy probable que primero le pidan una muestra de orina para encontrar el motivo de los síntomas y dar un diagnóstico. Para obtener más información, consulte Diagnóstico del cáncer de vejiga.
Diagnóstico del cáncer de vejiga
Si usted presenta síntomas o los resultados de las pruebas o exámenes de detección indican un posible cáncer de vejiga, hay que determinar si estos síntomas se deben a un cáncer o a otra afección. Durante una consulta médica, quizás ocurra lo siguiente:
- Le pregunten sobre sus antecedentes familiares y personales para saber más sobre los síntomas y los posibles factores de riesgo del cáncer de vejiga.
- Le tomen una muestra de orina para analizarla en el laboratorio y verificar la presencia de sangre, células anormales o infección.
- Le hagan un examen físico, en el caso de pacientes mujeres, tal vez se incluya un examen pélvico, para detectar signos de cáncer.
Según los síntomas, los antecedentes médicos y los resultados del examen físico y de orina, es posible que el personal médico indique más pruebas para verificar si usted tiene cáncer de vejiga y, de ser así, determinar la extensión (estadio o etapa) de este.
Pruebas y procedimientos para diagnosticar el cáncer de vejiga
Las siguientes pruebas y procedimientos se usan para diagnosticar el cáncer de vejiga. Los resultados de estos procedimientos también ayudarán a planificar el tratamiento.
Cistoscopia
La cistoscopia es un procedimiento por el que se observa el interior de la vejiga y la uretra (tubo que lleva la orina hacia el exterior del cuerpo) a fin de detectar áreas anormales. Se introduce en forma lenta un cistoscopio por la uretra hasta la vejiga para ver el interior de esta. El cistoscopio es un instrumento delgado en forma de tubo, con una luz y una lente para observar. A veces tiene una herramienta para sacar tumores de vejiga muy pequeños o muestras de tejido para hacer una biopsia. La cistoscopia ayuda al diagnóstico, y algunas veces al tratamiento, del cáncer de vejiga y otras afecciones.
Biopsia
Por lo general, la biopsia se hace durante una cistoscopia. En una biopsia, se obtiene una muestra de células o tejido de la vejiga para que un patólogo la observe al microscopio y determine si hay signos de cáncer. A veces es posible extirpar todo el tumor cuando se hace la biopsia.
En la cita médica puede obtener más información sobre lo que ocurre durante la cistoscopia y la biopsia, y después de estas. Algunas personas tienen sangre en la orina o molestias y sensación de ardor al orinar por 1 o 2 días.
Para obtener información sobre los informes de patología de células o tejidos que se extraen en una biopsia, consulte Informes de patología.
Urograma por tomografía computarizada o pielograma intravenoso
El urograma por tomografía computarizada (TC) es una prueba en la que se hace una TC del aparato urinario con un tinte de contraste que se inyecta en una vena. Al comienzo del procedimiento, se toma una serie de imágenes detalladas de los riñones con una máquina de TC. A continuación se inyecta un tinte de contraste y se toma otra TC de los riñones, la vejiga y los uréteres. Después de casi 10 minutos, se toma una última TC a medida que el tinte de contraste pasa por los riñones hacia la vejiga. El urograma por TC también captura imágenes detalladas de los huesos, los tejidos blandos y los vasos sanguíneos cercanos. Esto permite observar el funcionamiento del aparato urinario y determinar si hay signos de enfermedad.
El pielograma intravenoso (PIV) es una prueba de imágenes radiográficas del aparato urinario. Después de inyectar el tinte de contraste en una vena, se toma una serie de imágenes detalladas de los riñones, los uréteres y la vejiga para determinar si hay cáncer en estos órganos. A medida que el tinte de contraste pasa por los riñones, los uréteres y la vejiga, se toman más radiografías en momentos específicos. Esto permite observar el funcionamiento del aparato urinario y determinar si hay signos de enfermedad.
Prueba de marcadores tumorales en la orina
Los marcadores tumorales son sustancias que se encuentran en la orina. Las células del cáncer de vejiga las producen, o el cuerpo las elabora en respuesta a esta enfermedad. En esta prueba, se analiza una muestra de orina en el laboratorio para detectar la presencia de estas sustancias. Es posible usar las pruebas de marcadores tumorales en la orina para el diagnóstico de algunos tipos de cáncer de vejiga.
Pruebas para estadificar el cáncer de vejiga
Si usted recibe un diagnóstico de cáncer de vejiga, su caso se remitirá a los servicios de oncología urológica. Estos servicios se especializan en el diagnóstico y tratamiento de cánceres en el sistema o aparato urinario de cualquier persona, y en los órganos del aparato reproductor masculino. Se indicarán pruebas para determinar la extensión del cáncer. Algunas veces, el cáncer solo está en la vejiga. Otras veces, es posible que se haya diseminado a distintas partes del cuerpo. El proceso que se usa para determinar la extensión del cáncer en el cuerpo se llama estadificación. Es importante conocer el estadio del cáncer de vejiga para planificar el tratamiento.
Para obtener información sobre un estadio específico del cáncer de vejiga, consulte Estadios del cáncer de vejiga.
Es posible usar las siguientes pruebas con imágenes para determinar el estadio del cáncer de vejiga:
Tomografía computarizada
En una tomografía computarizada (TC) se usa una computadora conectada a una máquina de rayos X para tomar una serie de imágenes detalladas del interior del cuerpo desde ángulos diferentes. Se inyecta un tinte en una vena o se ingiere para que los órganos o los tejidos se destaquen de forma más clara.
Imágenes por resonancia magnética
En las imágenes por resonancia magnética (IRM) se usa un imán, ondas de radio y una computadora para crear una serie de imágenes detalladas de áreas del interior del cuerpo, como la vejiga. También se llama imágenes por resonancia magnética nuclear (IRMN). En ocasiones, se toman imágenes en 3 momentos diferentes después de inyectar un tinte, para obtener la mejor imagen posible de las áreas anormales de la vejiga. Este procedimiento se llama IRM trifásica.
Radiografía del tórax
En una radiografía del tórax se toma una radiografía de los órganos y huesos del interior del tórax. Un rayo X es un tipo de radiación de alta energía que puede atravesar el cuerpo y plasmarse en una película, lo que permite obtener una imagen de áreas del interior del tórax.
Gammagrafía ósea
En una gammagrafía ósea se verifica si hay células en los huesos que se multiplican rápido, como las células cancerosas. Se inyecta una cantidad muy pequeña de material radiactivo en una vena y este recorre el torrente sanguíneo. El material radiactivo se acumula en los huesos con cáncer y se detecta con un escáner.
En busca de una segunda opinión
Algunas personas desean pedir una segunda opinión para confirmar el diagnóstico de cáncer de vejiga y el plan de tratamiento. Para esto, necesita los resultados de las pruebas y los informes médicos importantes a fin de compartirlos con el profesional médico a quien usted vaya a pedir una segunda opinión. Durante la cita para obtener una segunda opinión, se revisará el informe de patología y las pruebas por imágenes antes de darle una recomendación. Es posible que esta coincida con las recomendaciones iniciales, se sugieran cambios u otros abordajes, o se le proporcione más información sobre el cáncer.
Para obtener más información sobre cómo elegir profesionales médicos y obtener una segunda opinión, consulte Búsqueda de tratamiento para el cáncer. Para obtener información sobre profesionales médicos, hospitales o una segunda opinión, comuníquese por teléfono, chat o correo electrónico con el Servicio de Información de Cáncer del Instituto Nacional del Cáncer. Para obtener información sobre preguntas que tal vez quiera hacer durante esta cita, consulte Preguntas para hacer al doctor acerca del cáncer.
Pronóstico y tasas de supervivencia del cáncer de vejiga
Si le diagnosticaron cáncer de vejiga es posible que tenga preguntas sobre la gravedad del cáncer y la probabilidad que tiene de sobrevivir.
El pronóstico es el resultado o la evolución probable de una enfermedad, y en el caso del cáncer de vejiga muchos factores como los siguientes podrían afectar dicho pronóstico:
- El estadio o etapa del cáncer, incluso si se presenta alguna de las siguientes situaciones.
- Si el cáncer no se ha diseminado a la pared muscular de la vejiga (cáncer de vejiga sin invasión muscular, también llamado cáncer de vejiga no músculo invasivo o superficial).
- Si el cáncer se diseminó a través del revestimiento interno de la vejiga hacia la pared muscular, o más allá de esta (cáncer de vejiga con invasión muscular, también llamado cáncer de vejiga músculo invasivo o cáncer de vejiga invasivo).
- El tipo de cáncer de vejiga.
- El grado del cáncer, si es de grado bajo o grado alto.
- La edad y el estado general de salud del paciente.
En el cáncer de vejiga sin invasión muscular, el pronóstico depende también de los siguientes factores:
- Si hay muchos tumores o si son grandes.
- Si el cáncer se diseminó al tejido conjuntivo que está al lado del revestimiento de la vejiga.
- Si el cáncer volvió después del tratamiento.
El cáncer de vejiga sin invasión muscular a menudo se puede curar.
En el cáncer de vejiga con invasión muscular, el pronóstico también depende de si además se presenta carcinoma in situ.
Tasas de supervivencia del cáncer de vejiga
En medicina, se estima el pronóstico del cáncer de vejiga usando datos estadísticos que se recopilan durante muchos años de estudio de personas con esta enfermedad. Un dato estadístico que suele usarse para explicar el pronóstico es la tasa relativa de supervivencia o sobrevivencia a 5 años. La tasa relativa de supervivencia a 5 años es el porcentaje (proporción) de personas con el mismo tipo y estadio de cáncer de vejiga que están vivas después de 5 años del diagnóstico inicial en comparación con las personas de la población general. Por ejemplo, la tasa relativa de supervivencia a 5 años del cáncer de vejiga localizado es del 71 %. Esto significa que quienes reciben un diagnóstico de cáncer de vejiga localizado tienen una probabilidad del 71 % de seguir con vida a los 5 años del diagnóstico en comparación con quienes no tienen este tipo de cáncer.
Las tasas relativas de supervivencia a 5 años para el cáncer de vejiga son las siguientes:
- Del 97 % para el carcinoma in situ que solo se encuentra en la vejiga (células anormales en el revestimiento interno de la vejiga).
- Del 71 % para el cáncer de vejiga localizado (cáncer que se encuentra solo en la vejiga).
- Del 39 % para el cáncer de vejiga regional (cáncer que se diseminó más allá de la vejiga a ganglios linfáticos u órganos cercanos).
- Del 8 % para el cáncer de vejiga metastásico (cáncer que se diseminó más allá de la vejiga a partes lejanas del cuerpo).
Para obtener más información en inglés sobre las estadísticas del cáncer de vejiga, consulte Cancer Stat Facts Collection.
Cómo interpretar la información estadística de las tasas de supervivencia
Los datos estadísticos de supervivencia se obtienen de grupos grandes de personas, por lo tanto, no predicen con exactitud lo qué sucederá con usted. El equipo médico que le atiende conoce en detalle su situación y son las personas indicadas para analizar y conversar con usted sobre los datos estadísticos para explicarle el pronóstico. Los siguientes aspectos son importantes al momento de analizar la información estadística de supervivencia:
- Todas las personas son diferentes por lo que la respuesta al tratamiento puede variar mucho.
- Los datos estadísticos de supervivencia se calculan con la información de grupos grandes de personas que quizás recibieron diferentes tipos de tratamiento.
- Hay que esperar varios años para conocer los efectos de un tratamiento nuevo o mejorado, por lo que tal vez estos no se reflejen en las estadísticas actuales.
Para obtener más información sobre las estadísticas de supervivencia, consulte El pronóstico del cáncer.
Estadios del cáncer de vejiga
El estadio (etapa) describe la extensión del cáncer en el cuerpo, como el tamaño del tumor, si se diseminó, y de ser así, qué tanto se ha diseminado desde donde se formó. Es importante saber en qué estadio está el cáncer de vejiga para planificar el tratamiento.
Hay varios sistemas de estadificación diferentes para el cáncer. En el cáncer de vejiga por lo general se usa el sistema de estadificación TNM. Es posible que en el informe de patología se describa el cáncer que usted tiene de acuerdo con este sistema de estadificación. Según los resultados de la estadificación TNM, el cáncer puede estar en estadio I, II, III o IV (a veces descritos como estadio 1, 2, 3 o 4). Durante las conversaciones con el equipo médico es posible que se use uno de estos estadios para describir el cáncer que usted tiene.
Para obtener más información, consulte Estadificación del cáncer.
Para obtener información sobre las pruebas y procedimientos que el equipo médico usa para estadificar el cáncer, consulte Pruebas para determinar el estadio del cáncer de vejiga.
Estadio 0 (carcinoma papilar no invasivo y carcinoma in situ)
El estadio 0 es cáncer de vejiga no invasivo. Esto significa que se encuentran células cancerosas en el tejido que reviste el interior de la vejiga, pero estas células no han invadido la pared de la vejiga. El estadio 0 se divide en los estadios 0a y 0is, según el tipo de tumor:
- El estadio 0a también se llama carcinoma papilar no invasivo y a veces tiene el aspecto de bultos largos y delgados que se extienden hacia dentro del lumen (espacio donde se almacena la orina) de la vejiga. El cáncer en estadio 0a puede ser de grado bajo o grado alto, según cuán anormales se vean las células al microscopio (para obtener información, consulte la sección Grados del cáncer de vejiga).
- El estadio 0is también se llama carcinoma in situ, y es un tumor plano en el tejido que reviste el interior de la vejiga. El estadio 0is siempre es de grado alto (para obtener información, consulte la sección Grados del cáncer de vejiga).
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio 0.
Cáncer de vejiga en estadio I
El cáncer de vejiga en estadio I es un tipo de cáncer de vejiga sin invasión muscular que se diseminó al tejido conjuntivo, pero no a las capas de tejido muscular de la vejiga. También se llama cáncer de vejiga no músculo invasivo o superficial.
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio I.
Cáncer de vejiga en estadio II
El cáncer de vejiga en estadio II también se describe como cáncer de vejiga con invasión muscular, cáncer de vejiga músculo invasivo o cáncer de vejiga invasivo. En este estadio, el cáncer se diseminó, a través del tejido conjuntivo, a las capas de tejido muscular de la vejiga.
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio II.
Cáncer de vejiga en estadio III
El cáncer de vejiga en estadio III también se describe como cáncer de vejiga localmente avanzado. El estadio III se divide en los estadios IIIA y IIIB.
- En el estadio IIIA, se presenta una de las siguientes situaciones:
- El cáncer se diseminó a través del tejido muscular y la pared de la vejiga a la capa de grasa que rodea la vejiga, y es posible que se haya diseminado a los órganos genitales (la próstata, las vesículas seminales, el útero o la vagina), pero no se ha diseminado a los ganglios linfáticos.
- El cáncer se diseminó en la pelvis a un ganglio linfático que no está cerca de las arterias ilíacas comunes (arterias principales de la pelvis).
- En el estadio IIIB, el cáncer se diseminó en la pelvis a más de un ganglio linfático que no está cerca de las arterias ilíacas comunes; o a por lo menos un ganglio linfático cerca de las arterias ilíacas comunes.
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio III.
Cáncer de vejiga en estadio IV
El estadio IV se divide en los estadios IVA y IVB.
- En el estadio IVA, se presenta una de las siguientes situaciones:
- El cáncer se diseminó a la pared de la pelvis o del abdomen.
- El cáncer se diseminó a los ganglios linfáticos ubicados por encima de las arterias ilíacas comunes (arterias principales de la pelvis).
- En el estadio IVB, el cáncer se diseminó a otras partes del cuerpo, como los pulmones, los huesos o el hígado.
El cáncer de vejiga en estadio IV también se llama cáncer metastásico o metástasis. La metástasis se presenta cuando células cancerosas viajan por el sistema linfático o la sangre y forman tumores en otras partes del cuerpo. El tumor metastásico es el mismo tipo de cáncer que el tumor primario. Por ejemplo, si el cáncer de vejiga se disemina al pulmón, las células cancerosas en el pulmón son, en realidad, células de cáncer de vejiga. La enfermedad se llama cáncer de vejiga metastásico, no cáncer de pulmón. Para obtener más información, consulte Cáncer metastásico: cuando el cáncer se disemina.
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio IV.
Grados del cáncer de vejiga
El grado de un cáncer es una descripción de cuán anormales se ven las células de cáncer de vejiga al microscopio y cuán rápido se podrían multiplicar y diseminar. El equipo médico usa los grados y otros factores, como el estadio, del cáncer que usted tiene para crear un plan de tratamiento y en algunos casos para valorar el pronóstico.
- Cáncer de vejiga de grado bajo. Las células cancerosas se parecen más a las células normales y tienden a multiplicarse y diseminarse más lento que las de grado alto.
- Cáncer de vejiga de grado alto. Las células cancerosas tienden a multiplicarse y diseminarse más rápido que las de grado bajo. Los cánceres de grado alto por lo general tienen un pronóstico más precario que los de grado bajo y es posible que sea necesario tratarlos de inmediato o administrar tratamiento más intensivo.
Para obtener más información, consulte Grado de un tumor.
Cáncer de vejiga recidivante
El cáncer de vejiga recidivante (recurrente) es cáncer que regresó después del tratamiento. El cáncer de vejiga tiende a reaparecer después del tratamiento, aunque sea no invasivo en el momento del diagnóstico. El cáncer de grado bajo sobre todo reaparece en el revestimiento de la vejiga. El cáncer de grado alto, cuando regresa, es más probable que se haya diseminado a las capas de tejido muscular o a otras partes del cuerpo. Se harán pruebas para determinar en qué lugar del cuerpo reapareció el cáncer, si se diseminó y hasta dónde se diseminó. El tipo de tratamiento que se administra para el cáncer de vejiga recidivante depende del lugar del cuerpo donde reaparece.
Para obtener más información, consulte Cáncer recurrente: cáncer que regresa. Para obtener información útil sobre cómo afrontar esta situación y cómo hablar con el equipo de atención de la salud, consulte Cómo afrontar el cáncer de vejiga y para obtener información en inglés, consulte When Cancer Returns (Cuando el cáncer regresa).
Para obtener información sobre el tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga recidivante.
Tratamiento del cáncer de vejiga
Hay diferentes tipos de tratamiento para el cáncer de vejiga. El equipo de atención del cáncer le ayudará a decidir el plan de tratamiento que suele incluir varias opciones. Se tendrán en cuenta muchos factores, como el estadio y el grado del cáncer, su estado general de salud y sus preferencias personales. El plan incluirá información sobre el tipo de cáncer, además de las opciones, objetivos, posibles efectos secundarios y la duración esperada del tratamiento.
Hablar con el equipo de atención del cáncer antes de comenzar el tratamiento para saber qué sucederá puede ser útil. Quizás quiera informarse sobre qué necesita hacer antes de empezar el tratamiento, cómo se sentirá en el transcurso del mismo y qué tipo de ayuda necesitará. Para obtener más información, consulte Preguntas para el doctor acerca del tratamiento. Para obtener información sobre el tratamiento según el estadio, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga según el estadio.
Cirugía
La cirugía es el tratamiento principal para el cáncer de vejiga. El lugar donde se encuentra el cáncer determina el tipo de cirugía que se hará. Además de esta opción, es posible administrar las siguientes terapias:
- Terapia preoperatoria o neoadyuvante la cual se administra antes de la cirugía. A veces se administra quimioterapia preoperatoria para encoger el tumor y reducir la cantidad de tejido que se necesitará extirpar durante la cirugía.
- Terapia posoperatoria o adyuvante la cual se administra después de la cirugía para disminuir el riesgo de que el cáncer vuelva. Después de que se extirpa todo el cáncer visible en el momento de la cirugía, algunos pacientes reciben quimioterapia, radioterapia, inmunoterapia o terapia dirigida para destruir las células cancerosas que hayan quedado.
Para obtener más información, consulte Cirugía para tratar el cáncer.
Los tipos de cirugía para tratar el cáncer de vejiga son los siguientes:
Resección transuretral con fulguración
En la resección transuretral (RTU) con fulguración, se introduce un cistoscopio (tubo delgado con una luz) en la vejiga a través de la uretra. A continuación, se usa un instrumento que tiene en un extremo un alambre fino en forma de asa para extirpar el cáncer o quemar el tumor con electricidad de alta energía. A esto se le llama fulguración.
Cistectomía parcial
En la cistectomía parcial, se extirpa parte de la vejiga. En ocasiones, se lleva a cabo en pacientes con un tumor de grado bajo que invadió la pared de la vejiga, pero que se limita a un área de este órgano. Después de recuperarse de esta cirugía, los pacientes pueden orinar de forma normal ya que solo se extrae una parte de la vejiga. También se llama cistectomía segmentaria.
Cistectomía radical con derivación de la orina
En la cistectomía radical, se extirpa la vejiga y los ganglios linfáticos y órganos cercanos con cáncer. Se lleva a cabo cuando el cáncer invade las capas de tejido muscular, o cuando un cáncer sin invasión muscular afecta gran parte de la vejiga.
- En los hombres, los órganos cercanos que se extirpan son la próstata y las vesículas seminales.
- En las mujeres, se extirpan el útero, los ovarios y parte de la vagina.
En ocasiones, cuando el cáncer se diseminó fuera de la vejiga y no es posible extraerlo por completo, se extirpa solo la vejiga para reducir los síntomas urinarios que causa el cáncer.
Cuando se tiene que extirpar esté órgano, el cirujano hace un procedimiento llamado derivación de la orina para que el cuerpo tenga otra manera de almacenar y eliminar la orina. Es posible que esto consista en redirigir la orina hacia el colon mediante catéteres que drenen la vejiga, o hacer una abertura en el abdomen para conectar una bolsa recolectora de orina por fuera del cuerpo. Para obtener más información, consulte la página del Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales sobre Derivación urinaria.
Radioterapia
En la radioterapia, se usan rayos X de alta energía u otros tipos de radiación para destruir células cancerosas o impedir que se multipliquen. El cáncer de vejiga, a veces, se trata con radioterapia de haz externo. En este tipo de radioterapia, se usa una máquina que envía la radiación desde el exterior del cuerpo hacia el área con cáncer. La radioterapia se puede administrar sola o con otros tratamientos, como la quimioterapia.
Para obtener más información, consulte Radioterapia de haz externo para el cáncer y Efectos secundarios de la radioterapia.
Quimioterapia
En la quimioterapia, se usan medicamentos para interrumpir la formación de células cancerosas, ya sea mediante su destrucción o al impedir su multiplicación. Se puede administrar sola o combinada con otros tratamientos. La manera en que se administra la quimioterapia depende del tipo y el estadio del cáncer que se esté tratando.
Quimioterapia sistémica
La quimioterapia sistémica para el cáncer de vejiga consiste en la inyección de medicamentos de quimioterapia en una vena. Cuando se administran de esta manera, los medicamentos ingresan al torrente sanguíneo para llegar a las células cancerosas de todo el cuerpo. Los medicamentos de quimioterapia sistémica que se usan para tratar el cáncer de vejiga son los siguientes:
- Carboplatino.
- Cisplatino.
- Doxorrubicina.
- Fluorouracilo (5-FU).
- Gemcitabina.
- Metotrexato.
- Mitomicina.
- Paclitaxel.
- Vinblastina.
Es posible usar combinaciones de estos medicamentos y en ocasiones se administran medicamentos de quimioterapia diferentes a los de esta lista.
Quimioterapia intravesical
Para el cáncer de vejiga, a veces, se usa la quimioterapia intravesical que consiste en la administración de medicamentos de quimioterapia en la vejiga a través de un tubo que se introduce por la uretra. Durante los tratamientos intravesicales se hace un lavado de la vejiga con medicamentos que destruyen las células cancerosas que quedan después de la cirugía. Esto reduce la probabilidad de que el cáncer vuelva.
Dos medicamentos que se usan en la quimioterapia intravesical para el cáncer de vejiga son la mitomicina y la gemcitabina. También es posible administrar estos medicamentos como quimioterapia sistémica.
Para obtener más información sobre el efecto, la forma de administración, los efectos secundarios comunes y otros datos de la quimioterapia, consulte Quimioterapia para tratar el cáncer y La quimioterapia y usted: Apoyo para las personas con cáncer.
Inmunoterapia
La inmunoterapia ayuda al sistema inmunitario a combatir el cáncer. Es posible que el equipo médico indique pruebas de biomarcadores para predecir la respuesta que usted tendrá ante ciertos medicamentos de inmunoterapia. Para obtener más información, consulte Pruebas de biomarcadores para el tratamiento de cáncer.
Inmunoterapia sistémica
Los medicamentos de inmunoterapia sistémica que se usan para tratar el cáncer urotelial (tipo de cáncer de vejiga) son los siguientes:
- Atezolizumab.
- Avelumab.
- Nivolumab.
- Pembrolizumab.
Estos medicamentos funcionan de varias maneras para destruir células cancerosas. Además, se consideran medicamentos de terapia dirigida porque actúan sobre cambios específicos o ciertas sustancias en las células cancerosas (para obtener información, consulte la sección Terapia dirigida).
Inmunoterapia intravesical
El bacilo de Calmette-Guérin (BCG), el nadofaragén firadenovec-vncg y el nogapendekin alfa inbakicept-pmln son medicamentos de inmunoterapia intravesical para el cáncer de vejiga. Estos se administran en una solución que se coloca directamente en la vejiga mediante un catéter (tubo delgado). Durante los tratamientos intravesicales se hace un lavado de la vejiga con medicamentos que destruyen las células cancerosas que quedan después de la cirugía. Esto reduce la probabilidad de que el cáncer vuelva.
Para obtener más información, consulte Inmunoterapia para tratar el cáncer y Efectos secundarios de la inmunoterapia.
Terapia dirigida
En la terapia dirigida, se usan medicamentos u otras sustancias que bloquean la acción de enzimas específicas, proteínas y otras moléculas que participan en la multiplicación y diseminación de células cancerosas. Es posible que el equipo médico indique pruebas de biomarcadores para predecir la respuesta que usted tendrá ante ciertos medicamentos de terapia dirigida. Para obtener más información, consulte Pruebas de biomarcadores para el tratamiento de cáncer.
Los medicamentos de terapia dirigida para tratar el cáncer de vejiga son los siguientes:
- Enfortumab vedotina.
- Erdafitinib.
- Ramucirumab.
- Sacituzumab govitecán-hziy.
Para obtener más información, consulte Terapia dirigida para tratar el cáncer.
Ensayos clínicos
Es posible que algunos pacientes tengan la opción de participar en un ensayo clínico. Hay diferentes tipos de ensayos clínicos para personas con cáncer. Por ejemplo, en un ensayo de tratamiento se prueban opciones terapéuticas nuevas o formas novedosas de usar las terapias actuales. En los ensayos de cuidados médicos de apoyo y cuidados paliativos se analiza la manera de mejorar la calidad de vida, en especial de quienes presentan efectos secundarios del cáncer y su tratamiento.
Puede usar el buscador de ensayos clínicos en inglés para encontrar los ensayos clínicos que el NCI patrocina y que aceptan pacientes en este momento. Las opciones de búsqueda le permiten encontrar ensayos según el tipo de cáncer, la edad del paciente y el lugar donde se llevan a cabo. La información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, se encuentra en el portal de Internet ClinicalTrials.gov.
Para obtener más información sobre ensayos clínicos, incluso sobre cómo encontrar y participar en uno de estos, consulte Información sobre estudios clínicos para pacientes y cuidadores.
Atención de seguimiento
Algunas de las pruebas que se hicieron para diagnosticar o estadificar el cáncer quizás se repitan para saber si el tratamiento está funcionando. Los resultados de estas pruebas sirven para tomar decisiones sobre si hay que continuar, interrumpir o cambiar el tratamiento. Estas pruebas a veces también se llaman exámenes de seguimiento, revisiones o controles.
Tratamiento del cáncer de vejiga según el estadio
El estadio y grado del cáncer de vejiga son factores importantes en el momento de decidir el mejor tratamiento. Otros factores, como sus preferencias personales y su estado general de salud, también son importantes.
El objetivo de la terapia paliativa es aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas con enfermedades que ponen en riesgo la vida, como el cáncer. Esta es útil en todos los estadios del cáncer. Muchos tratamientos del cáncer también se usan como terapia paliativa para mejorar el bienestar del paciente. Para obtener más información, consulte Cuidados paliativos para la persona con cáncer.
Es posible que algunas personas tengan la opción de participar en un ensayo clínico de nuevos medicamentos o combinaciones de tratamientos contra el cáncer. Para obtener más información sobre ensayos clínicos, incluso cómo encontrarlos e inscribirse, consulte Información sobre estudios clínicos para pacientes y cuidadores.
Tratamiento del cáncer de vejiga en estadios 0 y I
El cáncer de vejiga en estadio 0 y estadio I, también conocidos como cánceres de vejiga sin invasión muscular (CVSIM), no se han diseminado a la capa muscular de la vejiga. El tratamiento de este tipo de cáncer depende de varios factores, como los siguientes:
- El grado de riesgo de recidiva o invasión muscular del cáncer (bajo, intermedio o alto).
- El estadio y el grado del cáncer.
- El tamaño y el número de tumores.
Por lo general, el primer tratamiento es un procedimiento quirúrgico llamado resección transuretral (RTU) con fulguración para extirpar el tumor. En ocasiones, se repite la cirugía cuando no se extirpa suficiente tumor o no se obtiene una muestra de la capa muscular durante el primer procedimiento. Si al repetir la cirugía se encuentra que el cáncer ha invadido la capa muscular, se tratará como un cáncer de vejiga con invasión muscular (cáncer de vejiga en estadio II o superior).
Dado que el cáncer de vejiga en estadio 0 y estadio I a menudo reaparece después de la cirugía, la mayoría de las personas reciben quimioterapia intravesical con mitomicina o gemcitabina, o tratamiento con el BCG intravesical en el momento de la primera cirugía. Para ayudar a reducir el riesgo de recidiva de cáncer de vejiga, el médico quizás le recomiende seguir recibiendo BCG intravesical por un máximo de 3 años, según cuáles sean las características del cáncer. Esto se conoce como terapia de mantenimiento.
Para obtener más información sobre los tratamientos que se incluyen en las siguientes secciones, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga.
Tratamiento del cáncer de vejiga de riesgo bajo
En el cáncer de vejiga de riesgo bajo se presentan tumores de grado bajo pequeños y aislados.
El tratamiento, por lo general, incluye RTU con fulguración y terapia intravesical que se administra cerca del momento de la cirugía, seguida de vigilancia. La vigilancia es la observación minuciosa de su estado de salud sin administrar tratamiento a menos que el cáncer reaparezca.
Tratamiento del cáncer de vejiga de riesgo intermedio
El cáncer de vejiga de riesgo intermedio incluye tumores en estadio 0a de crecimiento lento, múltiples o de gran tamaño, tumores en estadio 0a de crecimiento lento que recidivan en el transcurso de 1 año, un único tumor en estadio 0a de crecimiento rápido o un tumor en estadio I de crecimiento lento.
El tratamiento por lo general consiste en RTU con fulguración y terapia intravesical (BCG o quimioterapia con mitomicina o gemcitabina). Es posible que, según las características del cáncer, el médico le recomiende continuar con el BCG intravesical por un máximo de 1 año para reducir el riesgo de recidiva. Además, se mantiene la vigilancia con cistoscopias regulares (inspecciones de la vejiga con una cámara) y en ocasiones se hacen pruebas adicionales con imágenes para controlar la aparición de signos de recidiva o progresión del cáncer.
Tratamiento del cáncer de vejiga de riesgo alto
El cáncer de vejiga de riesgo alto incluye tumores en estadio 0a de grado alto, múltiples o de gran tamaño, la presencia de carcinoma in situ (estadio 0is) y tumores en estadio I de crecimiento rápido.
El tratamiento por lo general consiste en RTU con fulguración, seguida de terapia con BCG intravesical. En ocasiones, el BCG intravesical se mantiene por un máximo de 3 años para reducir el riesgo de recidiva. Si tiene múltiples tumores o un carcinoma in situ, un tipo de cáncer en estadio 0 de grado alto, otra opción de tratamiento es la cirugía para extirpar una parte o toda la vejiga (mediante cistoscopia).
Tratamiento del cáncer de vejiga de riesgo muy alto
El cáncer de vejiga de riesgo muy alto incluye el cáncer que no responde al BCG intravesical, el que recidiva en la uretra, o aquel en el que se detectan células cancerosas en la sangre o en el sistema linfático cerca del tumor. El cáncer de vejiga de riesgo muy alto tiene más probabilidades de progresar a enfermedad con invasión muscular (estadio II o superior).
Si tiene varios tumores o carcinoma in situ (un tipo de cáncer en estadio 0 de grado alto), la cistectomía parcial o completa (extirpación de la vejiga mediante cirugía) quizás sea una opción. Si tiene carcinoma in situ, no puede someterse a una cistectomía, o prefiere no hacerse una cistectomía, y la terapia con BCG no funcionó, usted cuenta con otras opciones como la quimioterapia intravesical, el medicamento de inmunoterapia pembrolizumab administrado a través de una vena, o la inmunoterapia intravesical con nadofaragén firadenovec-vncg o nogapendekin alfa inbakicept-pmln.
Tratamiento del cáncer de vejiga en estadios II y III
Los dos tratamientos principales para el cáncer de vejiga en estadios II y III son la cistectomía radical o una combinación de radioterapia y quimioterapia.
En la cistectomía radical, se extirpa la vejiga, así como los tejidos y órganos que la rodean. Además, se hace una derivación de la orina con la que se crea una nueva vía para que la orina salga del cuerpo. Es posible que los pacientes además reciban los siguientes tratamientos antes de la cirugía o después de esta:
- En ocasiones se administra quimioterapia antes de la cirugía a las personas que están lo bastante bien como para tolerarla. Se demostró que la quimioterapia combinada, que incluye cisplatino antes de la cirugía alarga más la vida de las personas que la cirugía sola.
- En ocasiones se administra el medicamento de inmunoterapia nivolumab cuando hay un riesgo alto de que el cáncer regrese después de la cirugía o si no hubo una respuesta a la quimioterapia.
Si usted decide no someterse a cirugía o no se puede operar por otro motivo, es posible que su tratamiento incluya una combinación de radioterapia y quimioterapia, como cisplatino y fluorouracilo, administrada al mismo tiempo. La combinación de quimioterapia y radioterapia hace que el efecto de la radioterapia sea más fuerte.
La cistectomía parcial (extirpación de una parte de la vejiga) es un tratamiento menos común para el cáncer de vejiga en estadios II y III.
Para obtener más información sobre estos tratamientos, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga.
Tratamiento del cáncer de vejiga en estadio IV
El tratamiento del cáncer de vejiga en estadio IV es diferente si el cáncer es localmente avanzado o metastásico. El objetivo del tratamiento para el cáncer de vejiga metastásico es aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida a la vez que se reduce la velocidad de crecimiento y diseminación del cáncer.
El tratamiento del cáncer de vejiga en estadio IVA (localmente avanzado) incluye las opciones que se indican a continuación.
- El medicamento de inmunoterapia pembrolizumab en combinación con el medicamento de terapia dirigida enfortumab vedotina.
- El medicamento de inmunoterapia nivolumab en combinación con los medicamentos de quimioterapia cisplatino y gemcitabina.
- Los medicamentos de quimioterapia cisplatino y gemcitabina seguidos del medicamento de inmunoterapia avelumab.
- Para las personas que están lo bastante bien como para tolerarla, quimioterapia sistémica a base de cisplatino, por ejemplo uno de los siguientes regímenes:
- Metotrexato, vinblastina, doxorrubicina y cisplatino (MVAC) con dosis densa.
- Cisplatino, metotrexato y vinblastina (CMV).
- Pembrolizumab solo.
- Un régimen de quimioterapia a base de cisplatino seguido de cirugía para extirpar la vejiga así como el tejido y órganos que la rodean (cistectomía radical) con derivación de la orina, o cirugía sola.
- Radioterapia y quimioterapia, como cisplatino y fluorouracilo, administradas al mismo tiempo para ayudar a que el efecto de la radioterapia sea más fuerte.
- Derivación de la orina como terapia paliativa o para prevenir una obstrucción del paso de la orina que podría afectar los riñones.
- Cirugía para extirpar toda la vejiga o una parte de esta (cistectomía) como terapia paliativa.
El tratamiento del cáncer de vejiga en estadio IVB (metastásico) incluye las opciones que se indican a continuación.
- El medicamento de inmunoterapia pembrolizumab en combinación con el medicamento de terapia dirigida enfortumab vedotina.
- El medicamento de inmunoterapia nivolumab en combinación con los medicamentos de quimioterapia cisplatino y gemcitabina.
- Los medicamentos de quimioterapia cisplatino y gemcitabina seguidos del medicamento de inmunoterapia avelumab.
- Quimioterapia sistémica, como por ejemplo alguno de los siguientes regímenes:
- Gemcitabina con cisplatino o carboplatino.
- Metotrexato, vinblastina, doxorrubicina y cisplatino (MVAC) con dosis densa.
- Cisplatino, metotrexato y vinblastina (CMV).
- Un medicamento de inmunoterapia, como avelumab, nivolumab o pembrolizumab.
- Radioterapia como terapia paliativa.
- Derivación de la orina como terapia paliativa o para prevenir una obstrucción del paso de la orina que podría afectar los riñones.
- Cirugía para extirpar toda la vejiga o una parte de esta (cistectomía) como terapia paliativa.
Para obtener más información sobre estos tratamientos, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga.
Tratamiento del cáncer de vejiga recidivante
El tratamiento del cáncer de vejiga que recidivó (volvió) depende de los tratamientos anteriores y del lugar del cuerpo donde reaparece; este incluye las opciones que se indican a continuación.
- Quimioterapia sistémica sola, como alguno de los siguientes regímenes:
- Gemcitabina con cisplatino o carboplatino.
- Metotrexato, vinblastina, doxorrubicina y cisplatino (MVAC con dosis densa.
- Cisplatino, metotrexato y vinblastina..
- Un medicamento de inmunoterapia, como el avelumab, nivolumab o pembrolizumab.
- Un medicamento de terapia dirigida, como enfortumab vedotina, erdafitinib o ramucirumab.
- Cirugía para los tumores sin invasión muscular o localizados, a veces seguida de inmunoterapia y quimioterapia.
- Radioterapia como terapia paliativa.
Para obtener más información sobre estos tratamientos, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga.
Cómo afrontar el cáncer de vejiga
Al recibir la noticia de que tiene cáncer, quizás se pregunte cómo afrontará o hará frente a los cambios que ocurrirán en su vida. Una manera de hacerlo es conociendo más sobre los cambios físicos y emocionales que a veces ocurren y los recursos disponibles que le ayudarán durante el proceso. Hablar con el equipo de atención de la salud sobre sus preocupaciones le permite tener una sensación de mayor control. Sus familiares y amigos también pueden ser un apoyo importante.
Para obtener información sobre los efectos secundarios físicos comunes del tratamiento, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga. Para obtener información sobre los efectos secundarios emocionales, consulte Los sentimientos y el cáncer.
Para obtener información después de terminar el tratamiento del cáncer, consulte Supervivencia de cáncer y Siga adelante: la vida después del tratamiento del cáncer.
Adaptación después de una urostomía
Las personas que tienen un estoma y usan bolsas de urostomía demoran en adaptarse a esto. Hay quienes necesitan aprender cómo usar un catéter para vaciar la vejiga, y este es otro cambio importante. Tener incontinencia o problemas para controlar el funcionamiento de la vejiga puede ser frustrante.
Sepa que usted no es la única persona que se siente así. Adaptarse a estos cambios a veces es difícil. Pero con el tiempo, muchas personas logran hacer varias de las actividades que hacían antes de la cirugía. El apoyo de sus familiares y del equipo de atención de la salud le ayudará a acostumbrarse a la vida cotidiana después de una urostomía. Pida al personal de enfermería información sobre recursos y grupos de apoyo útiles. Para obtener más información en inglés, consulte Patient's Concerns About Surgery (Preocupaciones del paciente acerca de la cirugía).
Problemas con la imagen propia y la sexualidad
Los cambios en el cuerpo producidos por el tratamiento en ocasiones afectan la imagen que se tiene de uno mismo (imagen propia o autoimagen) y la vida sexual. Algunos tratamientos para el cáncer de vejiga, como la quimioterapia, la radioterapia, la cirugía y ciertos medicamentos a veces ocasionan problemas sexuales a corto o largo plazo. Por ejemplo, una cistectomía puede afectar los nervios y complicar la erección en los hombres. Por otro lado, es posible que las mujeres tengan dolor durante el acto sexual o problemas con la lubricación y el orgasmo.
Es importante hablar con el equipo de atención de la salud antes de comenzar el tratamiento sobre cualquier problema o preocupación que tenga relacionada con el sexo. Saber con antelación lo que usted piensa sobre el tema, quizás les ayude a planificar el tratamiento.
Para obtener más información sobre los problemas sexuales que causan algunos tratamientos contra el cáncer y cómo afrontarlos, consulte Problemas de salud sexual en mujeres con cáncer y Problemas de salud sexual en hombres con cáncer. Para obtener información sobre cómo expresar sus sentimientos, consulte Su imagen propia y su sexualidad.
El estrés que produce la atención de seguimiento
El cáncer de vejiga con frecuencia reaparece, aunque el tratamiento haya sido exitoso. Por ese motivo, es importante que las personas que recibieron tratamiento para esta enfermedad tengan citas médicas con regularidad para que se les hagan ciertos exámenes o pruebas de seguimiento. Es posible que esto sea difícil por varias razones, como las siguientes:
- La planificación y programación de estas citas médicas a veces es estresante y requiere de mucho tiempo.
- La espera de los resultados quizás cause ansiedad y temor constante de que el cáncer recidive (vuelva).
- Los costos adicionales de copagos, medicamentos, estacionamiento y transporte aumentan aún más el estrés.
Para obtener información sobre cómo prepararse para las citas de seguimiento, consulte Atención médica de seguimiento.
Para obtener información sobre algunos consejos para enfrentar el temor de que el cáncer vuelva, consulte la sección Temor al regreso de la enfermedad en Una nueva normalidad.
Costo del tratamiento del cáncer
El cáncer es una de las enfermedades más costosas de tratar en los Estados Unidos. Aunque tenga seguro médico, con frecuencia se presentan obstáculos financieros considerables, y tal vez necesite ayuda para cubrir los costos del tratamiento del cáncer de vejiga. Además, en ocasiones, es difícil trabajar y pagar deudas cuando uno tiene cáncer. La toxicidad financiera se refiere a los problemas relacionados con el costo del tratamiento de una persona. Para obtener información sobre cómo afrontar los gastos médicos, consulte Manejo de costos e información médica del cáncer. Para obtener información sobre la toxicidad financiera y saber si usted está en riesgo, consulte Toxicidad financiera del tratamiento del cáncer.
Última revisión: 2024-10-18
Si usted quiere saber más sobre el cáncer y cómo se trata, o si desea saber sobre ensayos clínicos para su tipo de cáncer, puede llamar al Servicio de Información del Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés) al 1-800-422-6237, llamada gratuita. Un especialista en información capacitado puede hablar con usted y responder a sus preguntas.