Trastorno de adaptación en niños: Instrucciones de cuidado

Instrucciones de cuidado

Sufrir un trastorno de adaptación significa que su hijo tiene problemas emocionales o de comportamiento a causa del estrés. Pero la respuesta al estrés es mucho más grave que una respuesta normal. Es lo suficientemente intensa como para afectar la vida escolar, laboral o social de su hijo. Además, podría causar depresión y dolores físicos. Entre los eventos que podrían causar esta respuesta están el divorcio de los padres, el conocimiento de problemas económicos familiares o un comienzo escolar o laboral. Podría ser cualquier cosa que cause algo de estrés.

Con mayor frecuencia, este trastorno es un problema a corto plazo. Ocurre dentro de los 3 meses a partir del evento o el cambio estresante. Si la respuesta dura más de 6 meses después de que finaliza el evento, es posible que su hijo tenga un trastorno más grave.

¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?

• Haga que su hijo asista a todas las sesiones de asesoría psicológica. No falte a ninguna porque cree que su hijo se siente mejor.
• Si su médico le recetó medicamentos a su hijo, haga que los tome según se los indicó. Llame a su médico si cree que su hijo está teniendo un problema con su medicamento. Recibirá más detalles sobre los medicamentos específicos recetados por su médico.
• Anime a su hijo a hablar sobre las causas de su estrés con un buen amigo o un familiar. Usted y su hijo también pueden unirse a un grupo de apoyo para personas con problemas similares. Hablar con otras personas a veces alivia el estrés.
• Aliente a su hijo a estar activo al menos 1 hora todos los días. Caminar es una buena opción. Su hijo podría querer hacer otras actividades, como correr, nadar, montar en bicicleta, o jugar al tenis u otros deportes de equipo.

Técnicas de relajación

Haga que su hijo practique ejercicios de relajación durante 10 a 20 minutos al día. Puede escuchar música tranquila y relajante mientras los hace.

Dígales a las demás personas de su hogar que va a hacer ejercicios de relajación. Pídales que no lo interrumpan. Ayude a su hijo a encontrar un lugar cómodo y tranquilo.

Haga que su hijo:

• Se acueste boca arriba o se siente con la espalda derecha.
• Se concentre en su respiración. Debe respirar de manera lenta y constante.
• Inhale por la nariz y exhale por la nariz o la boca.
• Respire profundamente, llenando la zona entre el ombligo y la caja torácica. Haga que su hijo respire de forma tal que el abdomen se mueva hacia arriba y hacia abajo.
• Debe respirar de esta manera entre 5 y 10 minutos.

Mientras continúa con la respiración lenta y profunda, ayúdelo a relajarse con los siguientes ejercicios durante otros 5 a 10 minutos:

• Tensione y relaje cada grupo de músculos. Su hijo puede comenzar con la punta de los pies y continuar hacia arriba hasta llegar a la cabeza.
• Imagine a los grupos de músculos relajándose y volviéndose pesados.
• No piense en nada. Ponga la mente totalmente en blanco.
• Relájese más y en forma más profunda.
• Sea consciente del estado de serenidad que lo rodea.

Cuando finalice su tiempo de relajación, haga que su hijo vuelva al estado de alerta moviendo los dedos de las manos y los pies así como las manos y los pies. Después, su hijo puede estirar y mover todo el cuerpo. A veces, las personas se duermen durante la relajación. Pero con frecuencia se despiertan pronto.