Pesario: Instrucciones de cuidado

Generalidades

Un pesario es un dispositivo que encaja en la vagina y sostiene los órganos pélvicos. Puede usarse si un órgano pélvico se sale de su posición normal (prolapso). Para algunas personas, usar un pesario significa que tal vez no necesiten operarse para corregir un prolapso. Un pesario también podría usarse para ayudar a tratar la incontinencia urinaria de esfuerzo.

Hay muchos tamaños y tipos de pesarios. El tipo que use depende del problema que tenga. Su médico se asegurará de que el pesario sea adecuado para usted. Es posible que tenga que probar diferentes tipos hasta encontrar el que le quede mejor. El pesario debería mantener los órganos pélvicos en su lugar sin causar dolor ni presión. Usted podría tener relaciones sexuales vaginales con el pesario colocado. Esto depende del tipo de pesario y de su nivel de comodidad.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Si tiene secreción vaginal mientras tiene un pesario puesto, hable con su médico acerca de maneras de reducir la secreción y el olor. Un pesario, en algunos casos, roza la vagina y puede causar irritación y secreción. Si le duele la vagina, hable con su médico acerca de una crema o gel para proteger la vagina. Su médico también podría cambiar el tipo de pesario.
• Siga el consejo de su médico acerca de por cuánto tiempo puede usar el pesario antes de que haya que limpiarlo. Tal vez pueda retirarlo y limpiarlo usted misma. O es posible que su médico quiera hacer esto durante una cita en el consultorio. Su médico puede decirle que no se ponga el pesario por un tiempo determinado después de limpiarlo.
• Si usted limpia el pesario, lávelo con agua y un jabón suave. Siga el consejo de su médico con respecto a la colocación del pesario.
• No use duchas ni lavados vaginales a menos que su médico se lo indique.
• No fume. Fumar puede causarle tos, lo cual puede empeorar el prolapso. Si necesita ayuda para dejar de fumar, hable con su médico sobre programas y medicamentos para dejar de fumar. Estos pueden aumentar sus probabilidades de dejar el hábito para siempre.

Cómo ayudar a sostener los órganos pélvicos

• Evite hacer actividades que pongan presión sobre los músculos pélvicos, como levantar objetos pesados.
• Pruebe los ejercicios para el suelo de la pelvis (Kegel), los cuales contraen y fortalecen los músculos pélvicos. (Si hacer estos ejercicios causa dolor, deje de hacerlos y hable con su médico). Para hacer los ejercicios de Kegel:
  • Contraiga los músculos como si estuviera tratando de no ventosear. O contraiga los músculos como si estuviera interrumpiendo un chorro de orina. Debe tener inmóviles el abdomen, las piernas y las nalgas.
  • Mantenga la contracción por 3 segundos, y luego relaje por entre 5 y 10 segundos.
  • Comience con 3 segundos, luego añada 1 segundo cada semana hasta que pueda contraer por 10 segundos.
  • Repita el ejercicio 10 veces por sesión. Haga de 3 a 8 sesiones al día.
• Para aliviar la presión sobre la vagina, acuéstese y coloque una almohada debajo de las rodillas. También puede acostarse de lado y llevar las rodillas hacia el pecho.