Dolor de espalda en niños: Instrucciones de cuidado

Generalidades

En la mayoría de los casos, no existe una causa clara para el dolor de espalda. Puede estar relacionado con problemas con los músculos y ligamentos de la espalda. También puede estar relacionado con problemas con los nervios, discos o huesos de la espalda. Moverse, levantar objetos, estar de pie, sentarse o dormir de manera incómoda puede forzar la espalda.

Aunque puede doler mucho, el dolor de espalda suele mejorar por sí solo al cabo de varias semanas. La mayoría de los niños se recuperan en 12 semanas o menos. El cuidado personal, como calor o hielo y actividades livianas (como caminar), puede ayudar a que su hijo se sienta mejor antes.

¿Cómo puede cuidar a su hijo en el hogar?

• Haga que su hijo se siente o se acueste en posiciones que sean las más cómodas para él y que reduzcan el dolor. Su hijo puede probar una de estas posiciones cuando se acueste. Haga que su hijo:
  • Se acueste boca arriba con las rodillas dobladas y apoyadas en almohadas grandes.
  • Se acueste en el suelo con ambas piernas sobre el asiento de un sofá o una silla.
  • Se acueste de lado con las rodillas y las caderas flexionadas y una almohada entre las piernas.
  • Se acueste boca abajo si no empeora el dolor.
• Descansar en la cama puede aliviar el dolor inicialmente, pero retrasa la sanación. Evite que su hijo descanse en la cama después del primer día.
• Haga que su hijo cambie de posición cada 30 minutos. Si su hijo tiene que estar sentado por períodos prolongados, trate de que tome descansos mientras está sentado. Haga que su hijo se levante y camine o se acueste en una posición cómoda.
• Pruebe a utilizar una almohadilla térmica a baja o media temperatura por entre 15 y 20 minutos cada 2 o 3 horas.
• Haga que se duche con agua tibia en lugar de una sesión con la almohadilla térmica.
• También puede probar una compresa de hielo en la espalda de su hijo por entre 10 y 15 minutos por vez. Ponga un paño delgado entre la compresa de hielo y la piel de su hijo.
• Sea prudente con los medicamentos. Administre los analgésicos exactamente según las indicaciones.
  • Si el médico le recetó un analgésico a su hijo, déselo según las indicaciones.
  • Si su hijo no está tomando un analgésico recetado, pregúntele a su médico si puede darle uno de venta libre.
• Haga que su hijo dé caminatas cortas varias veces al día. Su hijo puede comenzar con 5 a 10 minutos, de 3 a 4 veces al día, y aumentar progresivamente a caminatas más largas. Su hijo debe apegarse a superficies niveladas y evitar colinas y escaleras hasta que la espalda esté mejor.
• Haga que su hijo regrese a sus actividades tan pronto como pueda. El descanso continuo sin actividad generalmente no es bueno para la espalda de su hijo.
• Para prevenir futuros dolores de espalda, pregúntele al médico qué ejercicios puede hacer su hijo para estirar y fortalecer la espalda y el estómago. Enséñele a su hijo cómo usar una buena postura, técnicas de levantamiento seguras y la mecánica corporal adecuada.