Desgarro del rodete acetabular: Instrucciones de cuidado

Generalidades

El rodete acetabular (o labrum) es un anillo de tejido firme (cartílago) en la articulación de la cadera. Forma una copa que ayuda a mantener los huesos de la articulación de la cadera en su lugar y ayuda a mantener estable la articulación. Un desgarro del rodete acetabular puede ser causado por cosas como una lesión al participar en deportes de contacto. Otra posible causa es el desgaste normal de la articulación de la cadera. O podría estar causado por un problema con cómo está formada la cadera. Por ejemplo, algunas personas nacen con un fémur que no encaja perfectamente en la cavidad de la cadera (displasia de cadera).

Los síntomas de un desgarro del rodete acetabular pueden incluir:

• Dolor en la ingle, la cadera o la nalga.
• Chasquidos, crujidos o bloqueo en la articulación de la cadera.
• Una articulación de cadera rígida o inestable.

Un desgarro del rodete acetabular puede ser difícil de diagnosticar. El médico puede usar pruebas de diagnóstico por imágenes, como radiografías o resonancia magnética. Se le puede inyectar un tinte especial en la cadera antes de que le hagan una resonancia magnética. Este tipo de prueba se llama artrografía por resonancia magnética.

El descanso y el cuidado en el hogar pueden reducir los síntomas de un desgarro del rodete acetabular. El médico también puede recomendarle ejercicios para fortalecer y hacer la cadera más estable. En ocasiones, puede aplicarse una inyección de esteroides para proporcionar alivio del dolor a corto plazo.

Si estos tratamientos no ayudan, es posible que le hagan un tipo de cirugía conocido como artroscopia. Esta cirugía se realiza a través de pequeños cortes (incisiones) cerca de la articulación. Permite que el médico observe la lesión de cerca y haga algunas reparaciones al mismo tiempo.

¿Cómo puede cuidarse en el hogar?

• Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las instrucciones de la etiqueta.
  • Si el médico le recetó un analgésico (medicamento para el dolor), tómelo según las indicaciones.
  • Si no está tomando un analgésico recetado, pregúntele a su médico si puede tomar uno de venta libre.
• Descanse y proteja la cadera. Deje de hacer cualquier actividad, incluso estar de pie o caminar, que pudiera causarle dolor.
• Si su médico le recomienda usar un bastón o muletas, úselos según las indicaciones. Esto puede ayudar a reducir la presión en la cadera.
• Haga ejercicios y estiramientos según las indicaciones de su terapeuta o su médico.