Aprenda sobre pruebas para la tuberculosis (TB) latente en niños

¿Qué son?

Su hijo podría someterse a pruebas para averiguar si él o ella tiene tuberculosis (TB) latente. Los niños con TB latente tienen las bacterias de TB en el organismo. Pero no tienen ningún síntoma de TB. Las pruebas pueden incluir la prueba cutánea de la tuberculina o el ensayo de liberación de interferón gamma (IGRA, por sus siglas en inglés), que es un análisis de sangre.

¿Por qué se hacen estas pruebas?

Si su hijo ha tenido contacto cercano con alguien que tiene TB, su hijo podría estar infectado. Las pruebas ayudan a su médico a descubrir una infección de TB latente (inactiva). Entonces, su hijo puede recibir tratamiento si es necesario. Esto puede prevenir que la TB latente se convierta en tuberculosis activa que pudiera transmitirse a otras personas.

¿Cómo puede prepararse?

Si el médico sugiere una prueba cutánea de tuberculosis para su hijo, dígale al médico si su hijo ha recibido la vacuna BCG. Esta interfiere en los resultados de la prueba cutánea. Las personas que tienen la vacuna BCG tienen probabilidades de obtener resultados de la prueba de TB que indican que tienen una infección de TB incluso cuando no la tienen.

¿Cómo se hacen estas pruebas?

Podrían hacerle a su hijo la prueba cutánea de la tuberculina o el ensayo de liberación de interferón gamma (IGRA, por sus siglas en inglés), que es un análisis de sangre. La prueba cutánea suele usarse en niños menores de 5 años de edad.

Durante la prueba cutánea, se inyecta parte de una bacteria de TB bajo la piel de su hijo. La prueba se siente como un pinchazo de aguja rápido. Su hijo debe volver a ver al médico entre 2 y 3 días después de la prueba para que le revisen la piel. Si su hijo tiene TB en el cuerpo, se formará un bulto rojizo y firme en el sitio de la inyección en 2 días.

Para el análisis de sangre, un profesional de la salud le extrae sangre a su hijo. Esta se analiza en un laboratorio.

¿Qué ocurre después de la prueba?

Es posible que el médico desee repetir la prueba cutánea o el análisis de sangre en varias semanas.

Si las pruebas muestran que su hijo está infectado con TB, el médico podría solicitar más pruebas. Estas podrían incluir revisar la mucosidad en los pulmones de su hijo o tomar una radiografía. Estos pueden ayudar al médico a determinar si su hijo tiene tuberculosis activa que pueda transmitirse a otras personas.

Los resultados de la prueba ayudarán al médico a decidir sobre tratamientos.