Aprenda sobre las rutinas para la hora de acostarse para niños

¿Por qué es importante la rutina a la hora de acostarse y dormir?

Los niños de entre 3 y 12 años necesitan entre 9 y 13 horas de sueño para crecer y desarrollarse. Los niños pueden tener problemas para aprender y desarrollarse socialmente si no duermen lo suficiente. Pueden estar cansados durante el día y no ser capaces de prestar atención en la escuela.

A medida que su hijo crece, probablemente notará cambios en sus hábitos de sueño. Es posible que su hijo quiera dormir la siesta un día y que se resista a hacerlo otro día. A veces, los niños se niegan a dormirse como una manera de mostrar su independencia. Otras veces, es posible que simplemente necesiten más atención o tranquilidad antes de sentirse lo suficientemente seguros y cómodos para dormir bien.

Lo mejor que puede hacer para ayudar a su hijo a dormir lo suficiente es tener una rutina para la hora de acostarse. Hacer las mismas cosas en el mismo orden todas las noches ayuda a los niños a saber qué esperar.

Tener una rutina para la hora de acostarse para su hijo, también le ayuda a usted. Si su hijo duerme bien, usted tendrá menos preocupaciones y también dormirá mejor.

¿Cómo puede empezar?

• Establezca una rutina nocturna para ayudarle a su hijo a prepararse para acostarse y dormirse. Por ejemplo, lean juntos, abrácele y escuchen música suave de 15 a 30 minutos antes de apagar las luces. Haga las cosas en el mismo orden cada noche para que su hijo sepa qué esperar.
  • Haga que se vaya a dormir a la misma hora todas las noches y que se levante a la misma hora cada mañana.
  • Mantenga la habitación de su hijo en silencio, fresca, oscura o iluminada con luz tenue. Puede ser necesario que saque la televisión, la computadora, el teléfono o los juegos electrónicos de la habitación de su hijo para evitar problemas con la hora de acostarse.
  • Limite las actividades que le estimulen, como jugar o mirar la televisión, antes de acostarse.
  • Limite el consumo de alimentos o bebidas cerca de la hora de acostarse.
• Anime a su hijo a estar activo todos los días. Es posible que a su hijo le guste salir a caminar con usted, montar en bicicleta o practicar deportes.

¿Qué puede hacer usted si su hijo tiene problemas para dormir?

• Si su hijo se despierta y lo llama en mitad de la noche, responda de la misma manera cada vez. Ofrézcale consuelo rápido, pero luego salga de la habitación.
• Ayude a evitar las pesadillas controlando lo que su hijo ve en la televisión.
• No intente despertar a su hijo durante un terror nocturno. En su lugar, tranquilice y sostenga a su hijo para evitar lesiones. Durante un terror nocturno, su hijo puede gritar mientras duerme y luego, una vez que está despierto, puede no recordar haber llorado o qué lo causó.
• Si su hijo es sonámbulo, mantenga las ventanas y puertas cerradas con llave a la hora de dormir.
• Si su hijo tiene sobrepeso, establezca metas para controlar su peso. El sobrepeso puede causar problemas para dormir o empeorarlos.
• Si su médico le receta un medicamento, haga que su hijo lo tome exactamente según las indicaciones. Llame a su médico si su hijo tiene cualquier problema con un medicamento.